VALDENSES
VocTEO
 

Los valdenses son los seguidores de Pedro Valdo de Lvón, un próspero mercader que, en 1173, repartió sus riquezas entre los pobres e hizo voto de vivir la pobreza evangélica. Valdo y su grupo fueron recibidos en el concilio Lateranense III (1179) por el papa Alejandro III, que aprobó su manera de vivir, pero insistió en que no permitieran la predicación a las personas laicas iletradas. A pesar de ello, los «pobres de Lyón", como se les llamaba, perdieron pronto el favor de su obispo, que los denunció al papa. El papa Lucio III los condenó como herejes junto con otro grupo (los trabajadores de lana de Milán, conocidos como los «humillados") en el concilio local de Verona (1184).

Los pobres de Lyón y los humillados se unieron durante cierto tiempo, formando un grupo llamado de los Pobres lombardos, algunos de los cuales (conocidos como los Pobres católicos) se reconciliaron con la Iglesia romana en tiempos de Inocencio III (1208). Algunos seguidores de Valdo fueron condenados de nuevo por el concilio Lateranense IV (1215) y se convirtieron en uno de los puntos de mira principales de la Inquisición.

Los valdenses estaban apasionadamente interesados por una reforma de la Iglesia según las líneas del ideal apostólico representado por la Iglesia del Nuevo Testamento. Este ideal promovía la pobreza y la simplicidad del estilo de vida, en claro contraste con la manera de vivir de muchas autoridades eclesiásticas de la época.

Los valdenses se negaban a jurar o a cumplir el servicio militar; eran contrarios a la pena de muerte. Condenaban la corrupción del clero, proponiendo la necesidad de ministros dignos para la celebración correcta de los sacramentos. Algunos llevaron esta idea más adelante afirmando que era la santidad, y no la ordenación, la condición suficiente y necesaria para la celebración válida de los sacramentos.

Criticaban además la enseñanza y la práctica de la Iglesia sobre el purgatorio y las indulgencias, y fomentaban la predicación de los laicos, tanto hombres como mujeres, Su devoción a la Escritura queda patente en un documento de la Inquisición del 1321, que atestigua cómo se sabían de memoria casi todo el Nuevo Testamento.

Después de la Reforma protestante los valdenses de Francia fueron asimilados progresivamente por la Iglesia de la reforma calvinista.

W Henn

Bibl.: Valdenses. en ERC, Vll, 509-510: H. Woler, Herejías e lnquisición en el siglo XIII, en Hdl, 1V 354-366.