TRASCENDENTAL
VocTEO
 

Término que posee diversos significados según el sistema filosófico al que pertenece.

En el ámbito de la filosofía medieval indica aquellas propiedades del ser que, como el ser mismo, superan cualquier determinación predicamental.

Son propiedades del ente en cuanto ente. En la filosofía griega encontramos el origen de la teoría medieval sobre los trascendentales en cuanto que Platón, Aristóteles y Plotino perciben la profunda conexión existente entre lo uno, lo bueno y lo verdadero. Platón, en su teoría de las ideas, atribuye el lugar más elevado a la idea del Bien como fundamento de todo ente y de toda racionalidad y saber. Aristóteles busca lo que es propio del ser en cuanto tal y estudia lo uno, lo verdadero y lo bueno bajo los rasgos del primer Motor inmóvil y del ser perfectísimo, único, sumo bien, «pensamiento del pensamiento». Plotino considera la Unidad y el Bien como propiedades divinas y ve en el Nous su primer producto: la totalidad de los seres proviene del primer Ente en una serie de perfección decreciente, en la que el ser llega a perderse en el no-ser.

En la filosofia medieval, ya Agustín aplica a la revelación cristiana algunos principios del neoplatonismo y afirma que Dios, «suma unidad y sumo bien», verdad y belleza suprema, hace libremente partícipes a las criaturas con su acto creador de la unidad, del bien, de la verdad y del ser. También Alejandro de Hales y Alberto Magno relacionan lo uno, lo verdadero y lo bueno con el ente.

Santo Tomás afirma la bondad de los seres en la medida en que tienen el ser («unumquodque sit bonum in quantum habet esse" : 5. Th. 1, q. 6, a. 3, ad 2), así como la unidad y la verdad de los mismos, en cuanto que lo uno no significa otra cosa más que el ente indiviso y lo verdadero no es sino una conformidad de las cosas con el entendimiento divino. En algunos pasajes también la alteridad es un trascendental.

En la filosofía moderna se produce con Kant una «revolución copernicana", que transforma el trascendental ontológico basado en el ser en un trascendental gnoseológico relativo al conocimiento a priori. Kant llama trascendental a todo conocimiento, búsqueda o método que se ocupa, no va de los objetos, sino de los conceptos, representaciones o juicios a priori de los objetos. Trascendental es el conjunto de las leves internas del espíritu que son condición de la experiencia. Para Kant el hombre no puede llegar al absoluto mediante el conocimiento: Dios es solamente una idea trascendental que responde a la tendencia inevitable del espíritu a superar el mundo de los fenómenos.

En el ámbito fenomenológico, E. Husserl desarrolla a partir de la intencionalidad del conocimiento su lógica trascendental como ciencia rigurosa que capta en una intuición pura la esencia de las cosas prescindiendo completamente de su existencia concreta, a través de la epoché o reducción fenomenológica. La lógica trascendental, en cuanto que tiende en su constitución trascendental a crear el elemento noético, deriva hacia el idealismo. Heidegger, principal discípulo de Husserl, aplica el método fenomenológico a la existencia humana en relación con el ser. Existir es trascender, superación del mundo como horizonte que proyecta el hombre.

El giro antropológico en el ámbito filosófico ha llevado a una reflexión trascendental en el ámbito teológico, desarrollada particularmente por K. Rahner, discípulo de J Marechal y M. Heidegger. Rahner afirma la existencia en el hombre de una experiencia trascendental que consiste en el «con-conocimiento subjetivo, atemático, presente en todo acto de conocimiento espiritual, necesario e ineliminable, así como en su apertura a la amplitud ilimitada de toda la realidad posible ». Es una experiencia trascendental, "porque forma parte de las estructuras necesarias e ineliminables del sujeto cognoscente, precisamente en la superación de un grupo determinado de objetos, en la superación de categorías» (K. Rahner, Curso fundamental sobre la fe, 1977). El carácter trascendental del hombre, espíritu en el mundo, lo prepara como oyente de la palabra y lo orienta a recibir la mediación absoluta y gratuita de Dios en la encarnacióñ histórica en donde ésta se realiza de hecho. El método y la teología trascendental han suscitado graves críticas en el terreno filosófico y teológico; fundamentalmente, la reducción de la realidad de la fe a la realidad mundana y de la cristología a la antropología (C. Fabro, H. U. von Balthasar). Sus defensores afirman que el análisis trascendental no implica una cesión al inmanentismo y que en virtud de su teología trascendental se ha logrado un enriquecimiento teológico en todas las ramas de la teología.

J. B. Metz, discípulo de Rahner, asume algunos elementos de la teología trascendental en su teología política.

E. C Rava

Bibl.: J B. Lotz, Trascendentales, SV Vl, 726-730; R. Bittner, Trascendental, en CFF K. Rahner Teología trascendental, en SM: VI, 610-616; Íd., La comunicación de Dios mismo al hombre, en SM, 11, 343-348; H Vorgrimler. Entender a Karl Rahner Herder, Barcelona 1988.