Anexo 2

Síntesis de las Entrevistas realizadas por los alumnos

del Segundo Semestre de 1988 (Curriculum B)

 

            Vale para estas entrevistas lo dicho al inicio del Anexo 1, salvo que en este caso les pedí a los alumnos que entrevistaran gente que se declara no creyente. Los temas tratados en las entrevistas se pudieron ordenar en torno a 7 capítulos. Las opiniones de los entrevistados son citadas textualmente, señaladas con un número puesto entre paréntesis al final de cada frase, que corresponde a la siguiente lista de identificación (de dos entrevistados, 29 y 30, no hay datos):

 

Sexo

Edad

Estudios

1

mujer

21

Filosofía, 3º

2

varón

22

Derecho, 4º

3

varón

23

Filosofía en la UC

4

varón

22

Filosofía en la UC

5

mujer

23

Filosofía, 5º

6

mujer

23

Filosofía, 5º

7

mujer

24

Castellano en la UC, 4º

8

varón

21

Derecho en la UC, 4º

9

varón

42

Cantante lírico de formación universitaria incompleta

10

varón

21

Pedagogía básica, 1º

11

varón

19

Filosofía en la UC

12

mujer

22

Licenciatura en Castellano en la UC

13

varón

22

Filosofía en la UC, 4º

14

mujer

22

Filosofía en la UC, 5º, casada

15

mujer

-

Bibliotecóloga recibida

16

varón

17

Instituto Nacional, 4º de enseñanza media

17

varón

23

Filosofía, 2º

18

mujer

21

Historia, 2º

19

mujer

-

Derecho en la UC, 2º

20

varón

-

Historia y Geografía en la UC, 1º

21

mujer

21

Filosofía en la UC, 2º

22

varón

29

Castellano en la UC, 3º

23

varón

19

Historia en la UC, 2º

24

varón

24

Teatro en la UC, egresado

25

varón

21

3 años de Música en la U de Chile y 2 años de Turismo

26

varón

27

Estudiante universitario

27

mujer

22

Pedagogía básica, 4º

28

varón

22

Pedagogía básica en Educares, 3º


 

            1. El sentido de la existencia individual y colectiva

 

            En este primer capítulo reúno tres tipos de reflexiones, que tienen que ver respectivamente con la situación actual de la existencia humana, con el ideal de existencia y con las dudas y dificultades acerca del sentido de la existencia.

 

            1.1. Diagnóstico y pronóstico de la situación actual

 

            Lo que los entrevistados dicen acerca de la situación actual del sentido de la existencia se mueve en una gama que parte de la constatación de una crisis, pasa por el reconocimiento de la ambigüedad fundamental del ser humano y termina en un pronóstico de catástrofe.

 

            a) Crisis y necesidad de cambio

 

            Entre los entrevistados que afirman que estamos viviendo una situación de crisis profunda, que hace deseable, incluso necesario, un cambio, algunos se refieren a lo económico y social, otros a lo científico y cultural.          -Lo económico y social:

                "Se tiene que producir un vuelco radical, porque los jóvenes están divididos: hay los que van hacia el consumismo, queriendo progresar en el sentido exclusivo de tener dinero, un estatus económico suficiente; y hay los que desean salir adelante al costo que sea, y muchas veces lo logran mediante la violencia. Se necesita, por lo tanto, un cambio del sistema que nos oprime y divide" (15).

                "Estructuralmente veo que está la crema; el grado de contradicciones aumenta, especialmente a nivel económico" (19).

 

            -Lo científico y cultural:

                "La razón tomó una carrera vertiginosa en su relación con el mundo. Vinieron las horrorosas guerras mundiales y pareciera que esta razón no da abasto para comprenderlas. Se cae en la razón de la sinrazón. Esto se une al mito de Sísifo de Albert Camus: la razón no tiene capacidad para conocer al mundo tal cual es. Pero ante todo esto percibo que algo pasa: la línea posmodernista, la crisis de las ideologías, las vanguardias" (24).

                "Hemos llegado a un tope de algo: de la racionalidad, de la acción, del movimiento. Estamos entrando en un proceso que debe decantar en otra cosa. Este siglo ha sido de la acción. Tanto el marxismo como el capitalismo han sido muy importantes. Pero es un siglo que veo contrapuesto a un mundo de contemplación, de pasividad que permita la reflexión" (24).

 

            b) La ambigüedad del ser humano: perfección/destrucción

 

            Algunos entrevistados constatan simplemente la ambigüedad de los seres humanos:

                "Pienso que la gente es buena, a pesar de lo negativo que tiene. Tengo gran confianza en el hombre: en general es bueno, es capaz de construir, de ser solidario en esta construcción. Frente al mal que hacen los hombres reacciono mal: si actúan así es por ignorancia o complicidad" (10).

                "Creo en las capacidades del hombre para construir un mundo nuevo; pero me siento decepcionada por la sociedad actual que, más que construir, destruye al hombre y al mundo" (27).

            Otros entrevistados parecen pensar en una evolución hacia el bien y la perfección en cierto modo necesaria, casi sin intervención de la voluntad humana libre:

                "El hombre tiene un proyecto que no ha sido seguido. Por eso es que hay signos de destrucción. Porque no se sujeta al plan natural de crecimiento, de evolución" (29).

                "Se supone que el hombre, necesariamente, se va perfeccionando. Por un lado, las ciencias, las artes, se hacen más masivas, pero también el desarrollo tecnológico nos conduce casi al borde del exterminio. Las muestras de miseria, mientras se gastan millones en armas, son símbolo de la falta de humanidad en que vivimos. Creo que vivimos la prehistoria de un tiempo mejor, donde los hombres van a poder convivir en la sociedad de forma libre y respetando el medio ambiente, las necesidades y sobre todo la justa distribución de los bienes y alimentos, al igual que de los medios de producción. Esto parece ser, en definitiva, el objetivo del hombre" (3).

 

            c) La humanidad va de hecho a la destrucción

           

                "Se mueve el hombre en el campo de lo superfluo. Busca cosas. Su meta es tener más cosas y poder prolongar más su vida, satisfaciendo sus anhelos" (30).

                "El hombre está encaminado al holocausto, ya que tarde o temprano los patrones que lo están rigiendo lo van a llevar a la destrucción. Por ejemplo, la ideología que te encasilla en creencias, doctrinas y dogmas, que afectan al hombre, concientizándolo y volviéndolo prejuicioso" (16).

                "No puedo pensar bien del hombre. Se ha dedicado, desde el principio de la historia, a destruir. Es un destructor, un guerrero, y lo negativo supera todo lo positivo que pudiera existir. Por lo que he visto y veo, no puedo pensar de otra forma; me gustaría, pero no puedo. El hombre va hacia su destrucción, y esto lo veo prácticamente irremediable, a no ser que haya una intervención ajena al hombre, divina o extraterráquea. Al hombre lo mueve el egoísmo y la ambición de poder. Gandhi fue un hombre de ideales superiores, su vida era atrayente, ha sido el hombre más admirable de este siglo; pero su muerte era de esperarse, fue la reacción típica del ser humano corriente: asesinar y hacer desaparecer lo bueno, así como hicieron desaparecer a Jesús, porque era bueno y porque atraía a la gente. No me gusta la sociedad actual y tampoco otras antiguas, que no eran mejores ni peores que ésta. La única diferencia que tenemos con los antiguos son los adelantos tecnológicos: ¡somos bárbaros tecnológicos con computadores! Pero el hombre es el mismo bárbaro de hace tres mil años. Pienso que el hombre está llamado a la autodestrucción. No espero nada de esta vida, muchas veces he pensado que éste es el purgatorio del que se habla en la Biblia, porque uno mira a su alrededor y ve que hay tanta desgracia, tanto sufrimiento, que uno debe estar pagando pecados pasados" (9).

 

            1.2. El proyecto ideal

 

            En las respuestas a la pregunta por el proyecto ideal de existencia humana -sea que la pregunta esté hecha explícitamente por el entrevistador, sea que el entrevistado llegue a hablar de esto por sí mismo- detecto la presencia de algunos rasgos del ethos moderno y del pathos posmoderno, tal como los he definido en el curso de Teología Fundamental. Recojo aquí los rasgos modernos de clausura intramundana y de dominación (las expresiones de la autonomía las recojo más tarde: 4.1., 4.3.b y 6.1.d) y el pathos posmoderno de goce. Añado las respuestas que abren alguna perspectiva de trascendencia, pero dentro de la inmanencia, y las que ponen el ideal en el desarrollo pleno del ser humano, aunque con distintas acentuaciones.

 

            a) Expresiones del ethos moderno de dominación

           

                "El hombre es el ser que domina el mundo a través de su inteligencia. Su tarea es someter todo lo que entraña la realidad, para adecuarla a su servicio. Concretamente, lo que mueve al hombre en su actuar es su supervivencia. Ahora bien, depende de cada estrato social la comprensión de lo que significa la supervivencia: cada uno tiene su nivel o medida de cómo sobrevivir, unos se contentan con lo elemental, otros tienen exigencias más complejas" (30).

 

            b) Expresiones del ethos moderno de clausura intramundana

 

                "El fundamento de mi vida está en mí mismo, y el lugar está aquí en la tierra. Me parece que las cosas  se hacen aquí y aquí se paga por ellas; éste es el paraíso y éste es el infierno para los hombres, la misma tierra" (25).

                "El sentido de la vida es algo que el mismo ser humano se construye: es plantearse metas y trabajar para conseguirlas. No creo que el sentido esté dado por algo superior al hombre. Es algo que se construye en la vida común, pues no existimos separados del grupo; cada uno asume su sentido propio, pero en diálogo con los demás, con su tiempo y con su historia" (1).

                "No creo que la vida tenga un sentido. Creo que es una cuestión más casual: está aquí y y cada uno tiene que hacer lo suyo para sentirse feliz, pero sin dañar a los demás" (6).

                "A veces pienso que si sabemos que nos vamos a morir, o que la vida es tan corta como esto, o que la vida es simplemente esto, entonces tendríamos que hacer lo mejor posible. Todo. Lo doble o triple de bueno que antes, cuando me decían que existía otra vida. A esa otra vida yo no le encuentro sentido, porque no la conozco" (5).

                "A la pregunta: ¿Cual es el sentido de la vida para el hombre? responde: Si lo tuviera, tendría todos mis problemas solucionados. Creo que el hombre es un animal más desarrollado, que cumple un ciclo, el de toda materia. Se encuentra a sí mismo al lograr cierta comunión con los demás hombres" (19).

                "¿Qué es para ti el cosmos? responde: El cosmos es el misterio más grande que puede existir. Se produce un juego eterno, estoy dentro y no puedo salir, y no puedo evitar el mirarlo desde lejos y sentirlo con una coherencia interna, con una armonía" (21).

                "¿Hacia dónde se encamina el hombre? Creo que no se encamina hacia ninguna parte. El hombre es capaz de darle sentido a las cosas; la vida hay que hacerla, no está hecha; hay que vivirla. El sentido que las cosas van tomando es lo que el hombre elige en ese momento. Para mí no hay nada trascendente -lo que no implica que no lo haya-; pienso que eso no es sustancial para vivir, ya que para realizar las cosas que el hombre puede hacer, no necesita de ningún ser trascendental" (4).

                "¿Cuál es la razón profunda por la cual tú vives? Siento que estoy acá, no más, y me muevo de acuerdo a lo que veo acá donde estoy. Me muevo exclusivamente frente a lo que me rodea, en mi realidad, en mi pequeño mundo, mi país y todo lo que puedo percibir" (7).

 

            c) Expresiones del pathos posmoderno de goce o fruición

 

                "La felicidad es algo momentáneo. Me evoca una sensación de bienestar muy completo, donde yo me siento plena. Pero es sensación momentánea, no eterna. La naturaleza es lo único que tienes; estos árboles que ves, los vas a ver ahora, pero cuando te mueras no. Vivir, para mí, es más que estar aquí, haber nacido; uno empieza a vivir cuando empieza a tomar conciencia de lo que está haciendo en la vida, de que le trata de dar un sentido. Puedes tener éxitos o fracasos, pero estás viviendo. Entonces soy feliz, aun cuando me vaya mal. Porque me gusta vivir. Le tomé tanto cariño, que lo más tremendo para mí es pensar que tengo que morirme; pero por eso, porque me gusta" (5).

 

            d) Trascendencia en la inmanencia

 

                "Mi esperanza está puesta en las generaciones nuevas: debemos enseñarles a los niños una actitud nueva frente a la vida y al mundo, actitud que nosotros no recibimos en nuestra formación. Aunque esto es poco frente a la gran humanidad, pienso que hay muchas personas que están tomando conciencia de esto y luchan en forma personal por aportar" (27).

                "La trascendencia de los hombres está dada en sus obras terrenales, en el recuerdo de la obra imperecedera que pudieron haber dejado Einstein, Marx, el mismo Jesús. El sentido del hombre es vivir bien, y vivir bien es realizar obras; realizar obras es plasmar el sentido de cada uno, la característica esencial que lo hace distinto de los otros. Las obras serán imperecederas en la medida que aporten al conocimiento y a la evolución" (2).

                "El sentido de mi existencia es el encuentro con los otros, porque ahí me siento viva. Mi mundo interno es un desafío hacia lo trascendente, a construir un proyecto mío que me trascienda. La filosofía es un instrumento para desarrollar eso" (21).

                "Dejar un legado es la manera como el hombre puede subsistir aun después de la muerte. El sentido del hombre es la vida misma, realizarse, tener una familia, hijos, amigos, gente a quien estimar y que lo estimen a uno también" (20).

                "La razón última del hombre en este mundo es dejar un camino para los que vienen después, así como la generación pasada, nuestros padres, nos forjaron un camino. Cada uno, al pasar por este mundo, toma algo de él y, a través de su sabiduría, lo transforma en frutos. Después de dar y de haber procreado, el hombre muere; luego vienen otros. Es decir, el hombre es un eslabón en esta cadena, porque cada hombre deja algo en favor de este mundo. Si no hiciese nada, no tendría sentido su existencia" (26).

                "¿Dónde está la plenitud del hombre? Es difícil de decir. Creo que es cuando uno percibe que está siendo armonioso con la naturaleza de uno. Pero éste es un estado ideal, no es un momento en que uno dice: ¡Ya! lo tengo. Es como ir de viaje: en un buen viaje uno va hacia algo, pero tan importante como llegar a la meta es el trayecto que uno va haciendo. A lo mejor no va a llegar nunca, pero el viaje vale en sí" (24).

                "Estamos entrando en un proceso que yo creo que es algo más reflexivo, o místico, o religioso. Siento que en el hombre hay una armonía: en su relación con los demás y con la naturaleza; cuando eso se quiebra, la cosa está mal. Armonía es una sensación de estar en paz, de estar tranquilo, de no sentir rabia. Se trata de sentir verdadera comprensión por las personas que conozco y que voy a conocer" (24).

 

                e) Desarrollo de todas las potencialidades del ser humano

 

            Agrupo aquí una serie de respuestas que ponen el proyecto ideal, el sentido de la existencia en el pleno desarrollo de todas las potencialidades del ser humano, en el encuentro pleno consigo mismo. Se dan aquí acentuaciones matizadas, sea en lo individual, sobre todo en el conocimiento; sea en lo social, sea en ambos a la vez.

            -Acento en lo individual:

                "¿Qué da sentido a tu vida? Para mí es muy importante saber que yo estoy bien, pero no a costa de otros; y, de la misma manera, saber que otros están bien, pero no aprovechándose de mí" (7).

                "El hombre llega a su plenitud cuando puede desarrollarse como persona: forjar esa existencia propia, y poder crear a partir de eso. Es crearse a sí mismo. Lo más propio del hombre es desarrollar su capacidad creativa. El sentido de plenitud se construye en esa creación. Esto no quiere decir que no vaya a haber dificultades y dolor" (1).

                "El hombre es el ser más elevado en el proceso evolutivo de la naturaleza. Sus motivaciones radican en el desarrollar sus potencialidades. La meta que persigue el hombre es la hominización del mismo hombre; que desarrolle todas las capacidades que esconde por dentro. Todavía tenemos mucho trecho para cumplir lo que el hombre debe ser" (29).

                "El sentido de mi vida es desarrollarme como hombre, como persona, teniendo siempre presentes los ideales o valores por los cuales he luchado. Importante para mí es poder realizarme como profesional, desenvolverme en lo que me gusta y que no me impongan algo que va en contra de mis principios" (13).

                "El sentido último del ser humano es que cada uno se realice como persona, con todo lo que conlleva: una profesión, la religión y el desarrollo de uno mismo. Más allá no sé qué responder, pues siento un cierto temor al cuestionarme sobre esto. En este momento le encuentro más sentido a mi vida; lo encuentro en mi hijo, mi marido, en terminar la carrera para trabajar y darle más tiempo a mi familia" (14).

            -Acento en el conocimiento:

                "El actuar del hombre en ciencias está motivado por el deseo de conocer el por qué de las cosas. En este conocimiento el hombre se va perfeccionando, en relación al otro o a la naturaleza. El sentido de la vida del hombre es la perfección, caminar hacia allá; la perfección vista como una actitud frente a la vida, en todo orden de cosas" (10).

                "La pregunta por el sentido de la vida es una pregunta difícil, pues implica conocer qué es el hombre, qué es la vida. Intento responder diciendo que el hombre va camino a un encuentro consigo mismo. Ha explorado tantos ámbitos distintos, ha conocido tanto la realidad, ha descubierto tantos mundos, que lo que va quedando es que se encuentre con la realidad que es él mismo. Con todo lo que ha logrado ya, está en pie como para dar el gran salto decisivo en la historia de la humanidad: saber quién es el hombre, qué es lo que hace aquí. Lo que me da miedo es conocer lo que pueda pasar una vez descubierto el sentido pleno que tiene el hombre: ¿qué más podrá querer conocer? ¿Comenzará un vaciamiento de sentido por todo? ¿Será más "fome" la vida después de ese momento? Porque ya no habrá en qué más especular, si el hombre lo ha sabido ya todo y llegó a la plenitud de su saber, sabiendo quién es él mismo" (12).

                "Para un grupo, el sentido de la vida está en la cuestión económica; pero esto es intrascendente. Para otro grupo, es una cuestión más espiritual: luchar para que la demás gente tenga una mejor calidad de vida y acceso a ampliar sus conocimientos, su cultura, su educación. En lo personal, me gustaría saber harto: eso es lo que da sentido a mi vida; a mí me enseñaron un solo punto de vista y de pronto descubrí que había muchas cosas distintas. Se da el caso de personas que no tienen acceso a un mayor conocimiento, y luego llegan otros que les hacen tragar cualquier cosa (por ejemplo, religión); en realidad, si la gente conociera más, tendría más libertad para desechar y asumir cosas" (18).

            -Acento en lo social:

                "Un objetivo importante para mí es tratar de humanizar todas las condiciones inhumanas de vida: la miseria, la explotación, etc." (3).

                "Los valores que orientan mi vida son fundamentalmente los derechos humanos, el respeto al otro, el sentido de desarrollo y progreso, tratando de que todo el mundo pueda alcanzar mejores niveles de vida" (4).

                "Lucho para que todo el mundo tenga un mínimo de alimento y educación, para luego ir con paso agigantado a un medio y a un máximo. Es cosa de imaginar cómo se podrían actualizar las potencialidades de tantas inteligencias que no pueden ser aprovechadas porque no tienen comida, ni plata para entrar en la UC. Tendríamos no cien, sino mil científicos y miles y millones de ideas" (2).

                "La humanidad camina hacia una superación de barreras y diferencias políticas (de Estados-Repúblicas particulares), hacia una superación de diferencias culturales; esto, debido en gran parte a que el mundo comienza a ser un mundo científico" (23).

 

            f) Logro de paz y armonía interior, de plena espiritualidad

 

            Recojo aquí respuestas de tono individualista, que basan la felicidad y el sentido de la vida en logros de la persona individual o de su pequeño grupo familiar y de amigos. Aunque en alguna respuesta expresamente se afirme que eso no basta:

            "Para mí lo fundamental es el amor a la vida, el respeto a la naturaleza, a la armonía, a la belleza" (3).

                "Mis ideales son llegar a conocerme y que no se enferme mi ser, es decir, que no me muera antes de mi muerte física. Mi mayor deseo es morir el día de mi propia muerte" (16).

                "A mi vida le doy el sentido que le doy a todo lo que hago: cada cosa debe salir bien. Me lo propongo y me sale, por lo menos hasta ahora. Debo sentirme realizada en lo que estoy haciendo" (12).

                "La felicidad la encuentro en los rincones, donde creo que los demás no la encuentran; por ejemplo, conversando con mi hermano, descubriendo algo nuevo cada día. La felicidad no hay que buscarla sino saber encontrarla, descubrirla, y te va a llegar por sí sola" (25).

                "Las cosas duraderas de este mundo son las cosas espirituales. El ser (es decir, uno mismo, pero sin dolor, sin cuerpo, pura esencia) es eterno" (16).

                "Lo que me plenifica como mujer es el hecho de no haber perdido el respeto que me tengo a mí misma. Sé cuanto valgo y esto debo hacerlo manifiesto en mi trabajo: debo entregarme por completo a la función que me toca desempeñar, aunque a veces esté resentida físicamente. Si uno aprende a asumir el dolor, sea físico o moral, ciertamente se enriquece, pero es muy difícil" (15).

                "A mi vida le da sentido mi polola, con la que pienso casarme y tener hijos; también aportar mucho en los procesos de cambios en la sociedad" (23).

                "La felicidad es aprender a dominar un poco los sentimientos, las pasiones, sin dejarse llevar por ellos. Es un vivir bien, mayormente espiritual, que no tiene nada que ver con comodidades. Y que no afecte a otros de mala forma. La felicidad es una cuestión interna, espiritual, es un estilo de vida" (6).

                "Lo que da sentido a mi vida es mi sobrina Carola, a quien quiero mucho; es mi familia, la gente que me rodea, mis amigos: son razones que me inducen a seguir viviendo y a seguir tratando de cambiar este mundo. También ciertos valores como el deseo de que haya una mayor solidaridad entre los hombres" (8).

                "Soy feliz, porque tengo un grupo humano que me rodea, que me da cariño, aprecio. Hay, sin embargo, una sombra en esta felicidad, que va más allá del pequeño grupo, que mira a la nación: mientras ésta esté sufriendo, mi felicidad no es completa" (23).

                "No se puede hablar del sentido de la vida, sino de los sentidos: en este momento, es casarme y estar con la mujer que amo; ayer era sembrar mi parcela" (22).

 

                1.3. Dificultades y dudas

 

            Los entrevistados expresan también sus dudas. Éstas se refieren sea al sentido de la existencia individual, sea al de la historia.

 

            a) Acerca del sentido de la existencia personal

 

                "La razón de mi vida es justamente darme cuenta de que no todo es como nos gustaría que fuera; es tratar de mejorar todo esto. Pero de repente me encuentro con que es algo difícil, que me esfuerzo, pero no pasa nada, sigue todo tal cual" (7).

                "No sé por qué vivimos, no tengo la respuesta. Sería fantástico creer que vivimos para algo más; para mí tendría mucho sentido" (7).

                "En el mundo actual el sufrimiento no asumido te va dando el sentido de violencia, que se transforma en rebeldía frente a la vida. Pero asumir el sufrimiento no es lo mismo que ser conformista: prefiero la violencia que una actitud pasiva frente al sufrimiento" (15).

                "He tenido varios momentos de soledad donde poder pensar y he llegado a la conclusión, triste por cierto, que todo es ambiguo y que no hay nada que encuadre; nadie tiene la razón verdadera, no somos nada, nadie puede discernir lo que nos va a pasar" (16).

                "No sé para dónde va el hombre. Algunos, los cristianos, dicen que hay otra vida, la eterna, y ven su sentido de vida en su fe, en su Dios; a mí no me llena eso. Me gustaría saber por qué estamos aquí, cuál es nuestro fin. El hombre está viviendo una crisis, y vive sólo por vivir, le da miedo cuestionarse. En una sociedad consumista el hombre se ve encerrado y en muchas oportunidades es muy cómodo, egoísta, lo cual no lo hace salir de sí y trascender buscando el sentido de su vida" (13).

                "No he encontrado el sentido de mi existencia; hasta el momento estoy en búsqueda, no es nada muy determinado" (11).

                "El hombre siempre debe tener un móvil, un sentido, un fin. Pero uno siempre puede preguntar de nuevo por qué. Y habrá una parte que no te puedes responder, donde es necesario un salto y te metes en un ámbito trascendental, metafísico. Racionalmente no se puede dar ese salto, que puede ser la fe o el amor. En lo social se da mucho: gente que lo da todo por el cambio social, para que la humanidad sea mejor; gente de una generosidad increíble" (11).

 

            b) Acerca del sentido de la historia

 

                "No hay sentido de la historia, no es posible decir hacia dónde vamos. Sólo poseemos nuestro pasado y nuestro presente" (21).

                "La historia no existe, la hacen los que la inventan, y habrá tantas historias como interpretaciones haya. Napoleón fue mil veces más irrelevante para la historia que el vecino que una vez me prestó su bicicleta" (22).

                "No tenemos nada asegurado hacia adelante. Sería fácil para uno acogerse a un pensamiento marxista y esperar que venga una sociedad socialista sin clases: esperar el transcurso de la historia, y eso va a llegar indefectiblemente. Ni siquiera eso está asegurado. Si uno quiere hacer algo, tiene que prepararse mucho más, porque no tiene nada asegurado" (8).

 

            2. La verdad, el conocimiento, la ciencia

 

            2.1. La verdad

 

            Cuando se pregunta sobre la verdad aparecen diversas "definiciones".

 

            a) La verdad como "adaequatio"

 

                "La verdad es sujetarse, reconocer las cosas como son; que aquello que pensamos y decimos se adecúe a aquello que verdaderamente es la realidad" (29).              

 

            b) La verdad vinculada a la vida

 

                "La verdad para mí es una experiencia total, a medida que me ayuda a vivir. Siempre surge la necesidad de encontrar fundamentos verdaderos. Pero de cierto modo es algo relativo, puesto que la verdad depende de los valores de cada uno, de lo que tú consideras como verdad. De todas maneras el hombre tiende siempre a buscar la verdad" (4).

                "Si no existiera la verdad, no existiría la vida, el hombre. La vida va muy ligada a la verdad. Si uno le dice a otro: 'soy tal persona', sin serlo, se está engañando a sí mismo y al otro; esto puede destruir la vida del otro, pues confía en mí y yo no puedo responderle" (25).

                "La verdad no puede ser definida sino experimentada. Descubro la verdad en el momento en que soy consciente de que, al decir a alguien de confianza algo, sé que se lo digo todo, sin ocultar nada" (30).

                "La verdad de la ciencia (de la física, de la matemática) para mí no es una verdad porque no me motiva; sería un hecho, pero no una verdad. El nombre de verdad le queda grande" (7).

                "Hay una verdad individual; si no se mantiene, uno se engaña a sí mismo y a la sociedad. El concepto de verdad tiene muchos elementos, entre ellos sinceridad, querer no engañarse uno a sí mismo, buscar el desarrollo de los demás" (23).

               

            c) La verdad es subjetiva: cada uno debo juzgarla como verdadera

 

                "La verdad es subjetiva, nadie es dueño de la verdad absoluta. Para mí, Dios la posee y la conoce, pero aquí caemos al plano de la fe. Mientras no se llegue a Él, no se conocerá la verdad, porque en el mundo todo es subjetivo" (9).

                "Creo que las ciencias son el medio adecuado para alcanzar la verdad. Pero hay que ser precavido: uno no puede aceptar cualquier cosa que le vengan a mostrar como la verdad, uno tiene que pensar y ver si realmente eso es lo correcto; uno tiene que juzgar de acuerdo a lo que cree y siente" (18).

                "Para el no creyente la búsqueda de la verdad es algo muy complejo y urgente, porque la debemos encontrar en nosotros y no fuera" (3).

                "Mi verdad, a lo mejor, son dogmas; es en lo que yo creo" (19).

 

            d) La verdad es relativa

 

                "No creo en una verdad única, igual para toda la gente. Cuando tú tienes un ideal de vida, hay ciertas cosas que son verdaderas y ciertas otras que son falsas" (6).

                "No creo en una verdad religiosa, no existen absolutos religiosos" (20).

                "La verdad es una relación que se da con lo falso también; entonces, para que haya verdad tiene que haber algo que no sea verdad también. La verdad es como el absoluto, pero relativo: hay una verdad y uno puede acercarse a ella, pero se va modificando a medida que va cambiando el hombre, las circunstancias. A partir del racionalismo en filosofía hay una relativización del hombre, aunque a muchos -sobre todo a los conservadores- no les guste, porque dicen que entonces el hombre no tendría nada de que aferrarse; pero no creo que sea así: el hombre tiene algo de donde sujetarse, valores por los cuales luchar, aunque nada tenga asegurado" (8).

               

            e) La verdad es fragmentaria, no poseíble

 

                "La verdad es un conjunto, hecho de la verdad tuya, de la mía, de la de todos. El problema es que nos cegamos mucho y siempre nos creemos poseedores de la verdad" (7).

                "No hay nadie que pueda decir que tioene la verdad absoluta, todos tenemos algo de la verdad" (13).

                "La verdad nadie la posee absolutamente; la verdad no está al alcance de la mano, siempre hay que buscarla con humildad y entusiasmo. A veces pienso que la verdad es ser auténtica y vivir según mis valores" (14).

 

            f) ¿Es comprobable la verdad?

 

                "Todo existe en la medida en que es empíricamente comprobable. Pero no estoy muy segura, quizá hay una verdad que es más trascendente, que va más allá de lo que podemos tocar y comprobar. También hay una verdad de lo que podemos sentir, y eso no es comprobable" (7).

 

            2.2. Acerca de la ciencia

 

            a) La ciencia, camino único a la verdad

 

                "La ciencia es algo maravilloso, es la realización del hombre. Pero recién está empezando, el hombre es incipiente en cuanto a los aportes intelectuales. La ciencia es el gran aporte a la humanidad; se debe desplegar todo, se debe investigar todo, en la medida en que la ciencia apunte al desarrollo" (23).

                "Las ciencias no han avanzado mucho. Todavía, por ejemplo, la religión está demasiado arraigada en la gente. Y cuando se llega al campo del origen del mundo, de la evolución, la ciencia no establece nada con claridad" (18).

                "Hemos depositado en las ciencias nuestra confianza, y con justa razón. El hombre, en cierta medida, depende de las ciencias. Por otra parte, ya no se puede hacer nada al azar, sino que todo debe estar determinado por las ciencias; y el hombre mismo está estructurado por las ciencias, piensa en ellas como un verdadero camino para alcanzar la verdad. Si son el único medio para alcanzar la verdad, yo creo que sí, porque si uno no la comprueba por los medios científicos, no es la verdad o no lo es plenamente, que es lo que pasa con la inmortalidad del alma" (17).

               

            b) Los límites de la ciencia: entre Dios y la libertad humana

 

                "La ciencia puede explicar muchas cosas, pero hay cosas que lindan con la fe, con Dios, que no puede explicar. Nadie puede decir con opinión absoluta que Dios existe o no existe. Es un tema que el hombre aún no tiene los suficientes elementos para contestar. Pero cuando la ciencia está al servicio del hombre, no tiene límites" (2).

                "La ciencia de ningún modo agota la realidad, pues no puede explicar todo. Por ejemplo, no puede explicar la afectividad, la espontaneidad, la libertad del ser humano" (1).

 

            c) El aporte de la ciencia a la vida del ser humano y a su conocimiento

 

            La mayoría de los entrevistados hablan al mismo tiempo del aporte positivo de la ciencia y de sus peligros; aquí presento los dos temas por separado, en este párrafo el aporte positivo, en el próximo los peligros.

                "Lo importante en la ciencia son dos cosas: permite transformar la realidad por la tecnología, y desarrolla la inteligencia del hombre, es decir, su capacidad creativa y su capacidad crítica" (1).

                "La ciencia es vital, pues con ella se ha podido explicar fenómenos que antes lindaban con lo mitológico. La ciencia, como búsqueda de saber, como búsqueda del conocimiento pleno, es la herramienta del hombre" (2).

                "La ciencia está bien encaminada, siempre que sea para mejorar la condición de vida del hombre" (15).

                "La ciencia ayuda, siempre que sea bien tratada, hecha con cariño. Si yo fuera científico ecologista, lo haría por mí, por otros y por la naturaleza. Al hombre todavía le queda mucho para llegar a su perfección" (10).

                "La ciencia tiene valores y desvalores. Un valor es que la ciencia y los adelantos tecnológicos ayudan a salvar vidas, a descubrir enfermedades que antes eran incurables" (25).

                "La ciencia ha ayudado mucho al hombre, lo ha impulsado a salir adelante. Pero el hombre debe ser superado, porque todavía no se han desarrollado algunos sentimientos, algunas conductas, sobre todo el amor" (16).

 

            d) Los peligros que la ciencia hace correr al ser humano

 

                "La ciencia ha apartado al hombre de sí mismo, lo ha dejado solo; ahora es una máquina la que realiza todo lo que el hombre puede hacer por sí mismo. Por eso, el mundo se está convirtiendo cada vez más en una gran máquina fría y tecnologizada, y las posibilidades de que esto se arregle son escasas" (16).

                "Los adelantos y la ciencia han destruido al hombre. La tecnología se impone y priva al hombre de algunos valores. La máquina está reemplazando al hombre" (25).

                "Todo lo que tienda a favorecer los intereses de un pequeño grupo no puede ser positivo, es decir, cuando la ciencia se transforma en exclusivismo, es fatal, pierde su sentido originario. A veces se utiliza al hombre para los avances científicos; creo que eso es inevitable, porque forma parte de la idiosincrasia del hombre moderno, en quien prima un exacerbado individualismo utilitarista. Ahora a nadie le importa usar al otro en beneficio propio" (15).

                "La ciencia está influida y condicionada por las relaciones sociales que existen. Así, la ciencia que existe en este momento en EE.UU. y Europa se utiliza para fines bélicos, provoca destrucción del medio ambiente. Esto se explica por la sociedad en que vivimos: se vive de la guerra, la explotación, la injusticia" (1).

               

            2.3. El conocimiento

 

            En lo que los entrevistados dicen cuando se refieren al conocimiento en general, se puede distinguir dos tipos distintos de conocimiento, el vivencial y el científico.

 

            a) El conocimiento vivencial

 

                "Para mí, conocimiento es la experiencia, pero no el experimento científico sino la experiencia vivencial; es como una memoria: es tener la sensación de que a mí eso me ha pasado, de que lo he vivido" (24).

 

            b) El conocimiento científico

 

                "Gracias a ese afán de conocer las cosas, el hombre logra someter todo lo que le llama la atención y aprovecharlo para satisfacer las necesidades" (30).

                "El conocimiento está en función de la perfección del hombre, es un dominio que ayuda al hombre a perfeccionarse globalmente" (10).

                "Nuestro conocimiento es en realidad limitado, porque el hombre aún no ha llegado al grado máximo de la evolución. Para el futuro, esperamos que el hombre pueda conocer más y mejor y así hacer el mundo más humano" (29).

 

            3. La naturaleza

 

            Las reflexiones de los entrevistados acerca de la naturaleza tienen que ver primero, en general, con el puesto del ser humano en ella y, luego, con el problema específico de su dominación científico-técnica.

 

            3.1. El ser humano en la naturaleza

 

            Hay consenso en los entrevistados acerca de que el ser humano es parte de la naturaleza, es decir, que no está fuera de ella ni por encima; hay consenso también en que puede gozar de ella, aunque aquí se perciben diversos matices (b-e).

 

            a) El ser humano como parte de la naturaleza

 

                "El hombre no es dueño de la naturaleza, no está sobre ella, sino que forma parte del conjunto, para que haya armonía. No es que de hecho sea así, pero sería el ideal (,,,). Me siento parte de la naturaleza" (7).

                "Me siento parte de la naturaleza; aunque, como tendemos nosotros los hombres, me separo un poco de ella" (8).

                "Las personas han empezado a ver la naturaleza como algo que es del hombre, su entorno inmediato, que le es más propio que la ciudad" (4).

 

            b) Contemplación gozosa de la naturaleza

 

                "La naturaleza es maravillosa. Me gusta la montaña. He ido varias veces a la montaña y creo que es maravilloso" (5).

                "Frente a la naturaleza experimento una paz interior, un goce. Apenas empieza el tiempo bueno, voy los fines de semana a la montaña a acampar" (6).

                "Hay un orden en la naturaleza, que se manifiesta en la belleza y que hay que contemplarla como lo que es: naturaleza" (29).

                "Cuando me encuentro frente a la naturaleza me encuentro más a mí mismo. Ella es para mí como un espejo. También los sentimientos se hacen más conscientes al contacto con ella" (30).

                "Me encanta contemplar la naturaleza" (19).

                "Me encanta la naturaleza, ahí todo está en armonía, en equilibrio, y eso es lo que le falta al hombre. Ahí la muerte no es mala, equilibra" (10).

                "Amo la naturaleza; me produce alegría, bienestar, paz" (9).

 

            c) Contemplación religiosa de la naturaleza

 

                "La naturaleza, la montaña es como algo sublime. Lo que yo siento es sublime totalmente. Ya no puedes decir nada, solamente admirarla y extasiarte con ella" (5).

                "La naturaleza la asocio directamente con Dios, con la creación. Para mí es la 'Madre naturaleza'" (9).

 

            d) El disfrute activo de la naturaleza

 

                "No me gusta contemplar la naturaleza como buscando algo superior (quién la creó, por ejemplo); más bien me gusta participar con ella, disfrutar con su vida. En la ciudad no puedo vivir tranquila, me siento encerrada, todo lo que me rodea está hecho por el hombre. Amo la naturaleza, y doy testimonio de ello, pues no fumo, trato de que no boten basura al suelo y trato de inculcar el amor por la naturaleza, para que la podamos disfrutar y vivir" (14).

                "Me gusta participar de la naturaleza, pues la vida de ciudad me llena de tensiones; además todo es artificial y uno tiende a encerrarse en uno mismo. Me gusta el montañismo y lo practico. Ir a la montaña es para mí como un salir fuera de mí mismo; es una experiencia muy rica, pues uno se siente en un medio que vive, que respira, y participo con esa vida cantando o tocando la guitarra. Yo no contemplo la naturaleza sino que participo de ella a través del montañismo: uno se enfrenta con la naturaleza y participa con ella en sus desafíos. Me sucede que, al salir de la ciudad y estar participando de la naturaleza, me encuentro con una vitalidad que normalmente no tengo, y me encuentro en una relación dinámica con las cosas, lo cual no me sucede normalmente en mi vida diaria" (13).

 

            e) No goce de la naturaleza

 

                "Me gusta la naturaleza, pero no mucho; la encuentro monótona. Más que contemplarla me agrada disfrutarla" (4).

                "La naturaleza la contemplo sólo a veces, no es algo que me apasione. Me cansa, incluso le hago el quite, muchas veces me pasa inadvertida" (20).

 

            3.2. El tema de la dominación de la naturaleza

 

            Las reflexiones sobre la dominación humana de la naturaleza están dominadas por una percepción negativa de la actual situación, percepción que se expresa en una variada gama de matices.

 

            a) Licitud o ilicitud de la dominación humana de la naturaleza

 

            Un entrevistado cree que esa dominación es lícita:

                "Creo que el hombre tendrá que dominar todo, de acuerdo a sus intereses. Hoy necesita algo y saca de las cosas lo que necesita para satisfacer lo que hoy es necesario. En el futuro surgirán otras necesidades" (30).

 

            Varios entrevistados señalan algunas limitaciones:

                "El dominio sobre la naturaleza es algo natural, posible y necesario, aunque puede ser exagerado. Debemos pensar en el futuro. La cosa sigue, no se acaba con nosotros" (20).

                "El hombre ha hecho progresos espectaculares: encauzar ríos, grandes obras de ingeniería; pero hay cosas que no podía evitar. El hombre se ha enfrascado, pues ha dado soluciones a sus problemas, sin estudiar las consecuencias que eso podía traer" (2).

                "Una limitación -para que el hombre no haga lo que quiera con la naturaleza- es el garantizar la supervivencia de la naturaleza, es decir, que sigan existiendo medios no contaminados, donde el hombre pueda vivir" (1).

 

            La mayoría de los entrevistados cree que la situación actual de dominio es ilícita:

                "El hombre no tiene derecho a hacer lo que quiera con la naturaleza, porque es parte de ella también" (7).

                "No creo que el dominio que se ejerce sobre la naturaleza sea un bien. Pero se produce de facto" (19).

                "El hombre no respeta la vida, no respeta nada. Para mí importa toda forma de vida, y no pongo al hombre por encima del animal, que tiene el mismo derecho a habitar el planeta. La vida humana es la menos valiosa, porque es la más destructiva; el hombre es el único animal que ha causado estragos irreparables en el mundo" (9).

                "El hombre no está dominando la naturaleza, está abusando de ella, y no sé cómo detener este daño que el hombre se está haciendo. No niego que el hombre utilice los recursos que le da la naturaleza, pero es bueno que sepa utilizarlos adecuadamente, sin destruirse a sí mismo" (14).

                "El hombre no tiene derecho a hacer lo que quiere con las plantas y animales, tiene que saber convivir con esos seres, vivos como nosotros; tiene que aprender a respetarlos. Ellos llevan un sistema de vida muy diferente del nuestro, pero es vida a la larga" (25).

                "Pienso que más que dominar la naturaleza, el hombre está haciendo un uso indiscriminado de ella. Tú puedes ver cómo se contaminan los ríos, el aire, etc." (13).

                "El hombre no tiene derecho a hacer lo que quiera con la naturaleza, porque sería como hacerse daño a sí mismo. Todo lo que tú haces te repercute, tarde o temprano. Todas las agresiones que tú haces a la naturaleza las recibes como un boomerang; si no las recibes tú, las reciben las generaciones futuras. Es la humanidad la que sale perdiendo" (8).

                "Hoy no tratamos a la naturaleza sino que la usamos; la tratamos mal, abusamos de ella" (7).

                "Existen personas que en la naturaleza ven una veta de la cual extraer sin medida y movidos sólo por intereses inmediatos" (30).

 

            Ante la pregunta de un entrevistador: "¿Qué piensas del hecho de arrancarle a tirones los pelos a los conejos para aumentar la productividad?", dos entrevistados responden:

                "Es malo, al hombre no le importa destruir con tal de enriquecerse. Si actúa así con un animal, lo puede hacer también con el hombre. El hombre no sabe aprovechar las cosas, las explota. Es mejor tener un campo donde haya armonía natural que un conjunto de jaulas" (10).

                "Me hace hervir la sangre. Le haría lo mismo a los que lo hacen. El hombre demuestra que es más bestia que cualquier otra bestia. Los animales sufren, tienen sentimientos, sólo que no se pueden comunicar como nosotros. Cualquiera puede notar que el animal responde al amor o a los malos tratos" (9).

 

            b) Victoria de la naturaleza sobre el ser humano

 

                "La ciencia jamás llegará a dominar completamente a la naturaleza, ésta es más fuerte que la ciencia. La naturaleza se acomoda al hombre; desde que empezó a pensar, el hombre comenzó a transformar la naturaleza en cosas que le sirvieran; después empezó a explotarla y a construir ciudades. Pero la naturaleza igualmente se defiende, porque debajo de los bloques de cemento hay vida, en los postes están los nidos de los pájaros, en las murallas crecen los musgos. Por lo tanto, el hombre no puede terminar con la naturaleza; porque, haga lo que haga, la naturaleza saldrá adelante, ella es indestructible" (26).

 

            c) La autodestrucción humana por el apetito de dominio

 

                "La relación con la naturaleza es mala, el hombre se está destruyendo solo. Yo, por ejemplo, fumo, y sé que es malo; pero no boto papeles en el suelo ni en el pasto. El hombre tiene conciencia de que se está destruyendo, y lo peor es que sigue" (10).

                "Es difícil la armonía del hombre con la naturaleza, no sé cómo se logrará. Se empieza a producir un desequilibrio en los ecosistemas, y eso solamente lleva a la destrucción. El hombre, inconsciente o conscientemente, al destruir la naturaleza se está destruyendo a sí mismo" (9).

                "El hombre ha dado soluciones a sus problemas, sin estudiar las consecuencias que eso podía traer. A nadie se le pasó por la cabeza que las consecuencias de la bomba atómica iban a ser tan desastrosas. Es como una lotería a la cual se ha enfrentado el hombre" (2).

                "Si el hombre pierde la finalidad del progreso -el mejorar-, entonces es seguro que puede destruir el orden de la naturaleza, que es una tarea mantener" (30).

                "La preocupación que hoy existe por la defensa de la naturaleza obedece a una necesidad histórica: los recursos naturales se agotan, la contaminación es excesiva, la población aumenta, los alimentos escasean, y la tierra es una y hay que cuidarla para habitarla" (3).

                "Es evidente que ha habido una destrucción de la naturaleza, al científico como que se le ha pasado la mano en el uso y destrucción de ella" (18).

                "En nuestra sociedad el hombre ha sometido a la naturaleza, principalmente con fines económicos, descuidando por lo tanto lo que ésta verdaderamente puede aportar. El hombre ha cometido un grave error, al plantearse la naturaleza como el medio para satisfacer sus necesidades, que en un principio pueden haber sido las básicas, pero que hoy día están más relacionadas con el adquirir prestigio; y, cuando se trata de adquirir prestigio, no interesa cuánta naturaleza se someta para ello, incluido el hombre. Si decimos que el hombre es un ser inteligente, de repente cuesta distinguirlo, porque se lo ve con tanta ansia de someter, que actúa más de manera animal que racional. En lo personal, uno cae en el nivel sometedor del resto de la humanidad; la sociedad nos presenta muchos productos, elaborados en base a alta explotación de la naturaleza, y los adquirimos por el ansia que tenemos de ser poderoso o de ser el centro de atracción" (17).

                "Hoy se trata a la naturaleza en forma bastante agresiva. Todos los sistemas de producción y los sistemas económicos que hay en el mundo están basados en gran parte en la destrucción del medio ambiente. En Constitución, por ejemplo, hay una planta de celulosa que produce 127 millones de dólares de utilidad al año, pero con un costo hacia el medio ambiente que no asume nadie. En Santiago es cosa de ver el cordón industrial que rodea la ciudad: causa bastante polución y eso va en desmedro de la vida de la gente" (8).

 

            d) La necesidad de un cambio

 

                "Nos falta adecuarnos a la naturaleza. Nos hemos alejado de ella y hemos empezado a vivir situaciones artificiales y en muchos casos erróneas. Debe existir un 'entonarse' con ella, para caminar a un desarrollo más auténtico en armonía con la naturaleza" (29).

                "Nos falta crecer en la convivencia armónica y racional con la naturaleza. Sólo así podremos ser más humanos en ella" (30).

                "No existe actualmente relación entre el hombre y la naturaleza, existe más bien una anti-relación. El hombre en general la destruye, abusa y sigue abusando, mientras algo superior no lo detenga. Para mí, o paran al hombre o va a terminar destruyendo el planeta" (9).

                "Hace falta una educación del hombre y una real toma de conciencia del problema ecológico" (13).

                "El cambio que se requiere pasa por la transformación de las relaciones sociales que nos hacen ir en contra de la naturaleza, agredirla. Eso no se transforma de la noche a la mañana por una propaganda" (1).

                "Si no tenemos hoy una preocupación por la naturaleza, más tarde será peor; aunque para mí ya es tarde" (3).

                "La gente no se ha planteado este problema -el de la destrucción de la naturaleza por obra del hombre-, recién ahora está surgiendo un interés al respecto, por influencia de la radio o la televisión, pero todavía en grupos muy pequeños. Personalmente me noto destruyendo la naturaleza; me encanta el Partido de los Verdes, pero de repente me encuentro que soy inconsecuente: ensucio el aire u otras cosas; falta mucho por hacer todavía" (18).

 

            e) Defensa de la naturaleza

 

                "A todos nos preocupa vivir en un medio ambiente que sea lo mejor posible, lo que implica que no te afecte ni te dañe" (4).

                "Está bien que los grupos de defensa de la naturaleza intenten defenderla. Si bien no pueden lograr grandes cosas, ¡qué bueno que haya gente que tenga la preocupación de cuidar el planeta!" (5).

                "Tengo que admirar esos grupos [de defensa de la naturaleza], aunque no participe en ellos" (6).

                "Me identifico parcialmente con los grupos ecologistas, pues no se trata de frenar el avance del mundo, pero sí de hacer tomar conciencia del daño que estamos haciendo" (14).

 

            4. Libertad y valores

 

            Cuando los entrevistados son interrogados acerca de la libertad humana suelen precisar qué entienden por ella y cuáles son sus límites y condicionamientos; se refieren también a la norma moral y a los valores.

 

            4.1. Qué es la libertad

 

            a) Definiciones de libertad

 

            Las variadas definiciones de libertad que aparecen en las entrevistas las agrupo por matices, sin demasiado rigor.

            -Algunos entrevistados hacen distinciones fundamentales:

                "La libertad tiene dos fuentes. Por un lado, la libertad en general hace referencia a la sociedad y se expresa en el desarrollo humano, en la creación espontánea y en la exposición de ideas. Por otro lado, la libertad individual, que es la que debe sentir cada ser, que debe ser expresión de una tranquilidad intelectual y física. La libertad debería ser el equilibrio, la relación de respeto entre sociedad e individuo; esta libertad no se puede imponer, hay que buscarla y desplegarla" (23).

                "La libertad la entiendo de dos maneras: la interior, la que tienes y sientes, que te permite pensar y razonar sin control; y la exterior, que te permite expresar ese razonamiento; ésta no existe en todo nivel de cosas en lo político, en lo laboral, ya que si expresas lo que sientes, te dicen que ahí está la puerta" (15).

 

            -Para otros, la libertad es la capacidad de optar o elegir:

                "Es estar condenado a elegir; no hay nada dado. El hombre tiene que formarse y alcanzar su grado de evolución solo, ya que al hacer lo que él quiera se va transformando en el arquitecto de su propio destino" (16).

                "(...) la libertad de poder elegir por donde uno quiere seguir" (18).

                "La libertad es la capacidad de optar por hacer esto o aquello, pero está condicionada" (17).

                "La libertad es la capacidad de poder optar. Los límites te los pone tu propio entorno" (7).

                "La libertad es una capacidad innata del ser humano de poder optar entre una serie de alternativas que se presentan; implica el compromiso a fondo con lo elegido: una vez que se opta, se acabó la libertad, pues viene el compromiso y la responsabilidad. La libertad no es poder hacerlo todo o elegirlo todo, no es libertinaje; es simplemente tener la oportunidad de elegir" (27).

                "La libertad es 'de lo más que hay'. Es algo que está en el hombre, no es capacidad racional suya: muchas veces no la comprende. Su sentido es que el hombre sepa escoger. La diferencia entre lo bueno y lo malo es el principio y el final de la libertad" (10).

 

            -Un grupo define la libertad por su finalidad humana:

                "Es una fuerza irresistible que tenemos, responde a un anhelo profundo del hombre; creo que es una de las fuerzas más poderosas y más específicamente humanas" (30).

                "Es la capacidad que tenemos los hombres para hacer aquello que debemos hacer y que conviene hacer" (29).

                "Libertad es poder realizar todas las potencialidades del hombre" (2).

                "La libertad es, para mí, la capacidad de determinar uno mismo, con el mínimo de elementos externos, racionalmente, qué hacer (actos morales); por otro lado, hay una parte mucho más sensible que experimenta la libertad dándose tiempo contemplando y resguardando ese espacio interior que la sociedad aplasta" (21).

                "A nivel personal, la libertad es la capacidad de autogobernarse, y eso implica responsabilidad y equilibrio, para discernir y saber lo que se puede o no hacer. A nivel social, se refiere a que la mayor cantidad de gente posible tenga los medios para ejercer la libertad" (3).

                "Soy un caso especial con respecto a la mayoría, que prefiere cumplir con las obligaciones mínimas y hablar de que se es bueno porque se cumple, sin cuestionar por qué lo están haciendo. Éste no es mi caso; de ahí mi rechazo a la religión, al sistema, etc., que tratan de impedirme que actúe como yo creo que es lo mejor" (18).

                "La libertad es poner en práctica los sueños. Cada persona tiene como marcada una energía que está inscrita en su ser indeleblemente, y lo importante es encontrarse y acercarse a ese ser que uno es realmente. La libertad es un medio que apunta a fines, el medio que me permite llegar a aquello que está en lo profundo de mi corazón" (22).

                "Para mí, el estado más pleno de libertad es el amor" (4).

                "El socialismo está destinado a la libertad del hombre: ahí uno es libre frente a todo, a creer en Dios o no creer, a hacer o no hacer. El sistema socialista es imperfecto, pero con cariño se supera" (10).

 

            -Finalmente, algunos conciben la libertad como ausencia de coacción:

                "Ser libre es no estar determinado, no tener nada que presione física o sicológicamente. Creo en la libertad, pero sé que no se da; funcionamos generalmente presionados. Sí creo que hay momentos de libertad, momentos de decisión; pero la gente no los asume, porque tiene miedo a decidir, a pensar por sí misma. La libertad tienes que hacerla tuya, llevarla a ti y hacerla decisión, poder y voluntad principalmente" (5).

                "La libertad es algo difícil de definir. Me gustaría relacionarla con otros términos: independencia, autonomía, conciencia al elegir. Es no estar regido por algo de afuera de uno" (1).

                "La libertad es la capacidad del hombre para influir sobre su medio, sin coacciones; es la capacidad de hacer lo que quiera" (8).

 

            b) El valor humano de la libertad

 

                "La libertad es el don más importante que el hombre tiene, para poder decidir. Un hombre sin libertad es un encarcelado. La libertad más bella es la libertad del alma" (25).

                "No hay modelos para el desarrollo del hombre. El hombre tiene la mirada adelante, hacia el futuro; nuestra aspiración no es volver a modelos. Más que moldes existen desafíos hacia el futuro" (29).

                "La libertad es para desarrollarse personalmente, es algo vital" (9).

                "Uno trata de hacer las cosas lo mejor posible, no para darle satisfacción a los demás, sino a uno mismo; porque, cuando te destruyen el valor que tú tienes, la persona se acaba y se destruye, no queda nada" (15).

                "La libertad es inherente al hombre; en la medida en que uno tenga libertad va a poder desarrollarse como sujeto creador y como sujeto actor, influyente sobre el medio, sobre los demás, sobre sí mismo también. Es el máximo de control sobre sí mismo, independientemente de lo que quieran hacer las otras personas o el Estado" (8).

                "La libertad es el anhelo profundo del ser humano: nadie quiere sentirse ni ser el esclavo de nadie. Le pertenece al hombre y es lo que lo hace más hombre. Me da mucha cólera ver mujeres sometidas a sus esposos, a sus hijos, a su hogar; tal vez éste fue el motivo de la separación de mis padres: ambos no se toleraban ni querían sentirse dominados por el otro. En síntesis, la libertad es ser persona humana" (12).

                "Creo en la libertad, es algo básico. El hombre no está predestinado; si así fuera, perdería la condición de humano" (20).

 

            c) El mal uso de la libertad

 

                "Usar mal la libertad es una torpeza personal" (9).

                "La libertad es una palabra vacía: el común de la gente ni siquiera se cuestiona sobre la libertad, porque están acostumbradas a vivir sin libertad, por el régimen de dictadura. Son muy pocos, principalmente los que tienen un grado de educación, como filósofos y teólogos, los que se cuestionan, pero el común de la gente no" (17).

 

            d) La necesaria lucha por la libertad

 

                "La libertad se expresa en el tomar la propia vida como tarea, cuya meta es la realización personal" (30).

                "Uno puede alcanzar los estados humanos espirituales de armonía donde sea. Hay lugares y condiciones que ayudan, pero no son la solución. Las trabas que uno tiene puede acabarlas; ésa es una experiencia que he tenido. Tal vez la vida entera es eso: despejar el camino, buscando ese estado ideal pleno. Hay personas que lo han conseguido y han vivido en él, como Cristo" (24).

                "La libertad es algo esencial en el hombre, pero no como algo dado, sino ligado a la existencia como proyecto que hay que realizar, sobre un horizonte de posibilidades que se abren" (4).

                "Queremos romper las ataduras de los factores culturales; queremos crear un hombre nuevo que, cuando diga 'quiero hacer deporte', haga deporte y no tenga la traba de haber sido mal alimentado" (2).

                "La libertad, pese a todos los condicionantes externos, puede trascender: desde el fondo profundo de la existencia, el esclavo puede ser libre, si quiere serlo" (21).

                "Quizá cuando el hombre se dé cuenta de la manipulación a que está sometido en la sociedad se empiece a desarrollar su propia capacidad de creación: ahí va a encontrar de verdad la libertad" (11).

                "Estoy siempre luchando por vivir la libertad. Doy esta lucha tratando de no ir contra mí mismo" (22).

                "Una parte de la libertad es el cambio para mejorar este mundo, para crear relaciones distintas entre los seres humanos; me interesa cambiar todas estas normas de conducta" (8).

               

 

            4.2. Límites y condicionamientos de la libertad

 

            En las entrevistas se encuentran mencionados tres límites o condicionamientos de la libertad humana: la persona del otro, la sociedad y la naturaleza.

 

            a) El otro -respetado desde dentro

 

                "No creo en una libertad absoluta, la libertad tiene sus restricciones. No puedo actuar libremente, si sé que mi acción te va a dañar. Los demás son, de alguna manera, la norma que te regula. Es en ese aspecto que no hay libertad absoluta" (6).

                "La libertad también tiene límites; cuando empieza a afectar al otro, deja de ser libertad, empieza a pisotear a los demás. No es parte de mi libertad el dejar la escoba porque sí, sabiendo que afecto a los demás" (7).

                "Es importante que mi libertad no sea traba para la libertad de otros" (10).

                "Mi concepto de libertad está profundamente referido a los otros; muchas veces el vivir mi libertad está reñido con la libertad de los otros, a veces he herido la libertad de otros en el ejercicio de mi libertad: ahí me reordeno, mi libertad es el compromiso también con la libertad de los otros" (22).

                "Uno de los criterios fundamentales es aceptar que estoy inserta en una sociedad y que necesitamos convivir con los otros; esto me hace aceptar normas externas de comportamiento" (21)

 

            b) La sociedad -que se impone desde fuera

 

            La mayoría de las respuestas acerca de lo que limita nuestra libertad apunta a la sociedad y sus estructuras económicas, políticas, culturales, ideológicas:

                "Nadie que vive en sociedad es totalmente libre, siempre hay limitaciones sociales que coartan la libertad" (9).

                "Hay ciertos principios que me son inherentes y me dominan; son heredados culturalmente de mi tradición familiar y del entorno sociocultural; tal vez no estoy de acuerdo con ellos con mi razón, pero están localizados en algún lugar de mi interior y reclaman no ser transgredidos. Siento que esos principios en mí son fundamentalmente cristianos, pues son los principios de la cultura" (22).

                "La libertad está condicionada, pero eso no te quita ni añade libertad; yo soy libre, aunque esté determinado por ciertas cosas, como ser chileno, vivir en una familia chilena, estar en la Universidad, etc." (10).

                "A nivel muy amplio, la sociedad contemporánea -tanto en Occidente como en los países del Este- está viviendo una manipulación muy grande del hombre. Es una manipulación gigantesca, prácticamente se están creando "tipos" de hombre, el tipo de hombre que se necesita para las diversas sociedades. La educación, más que dar herramientas para que el hombre ejerza su libertad para que después decida, lo está determinando demasiado. Nos encontramos con un hombre metido en una sociedad donde todo está determinado, donde le están mandando, sin que se dé cuenta, muchas cosas: en los caminos, en la familia, en la sociedad (roles). El hombre es muy poco libre, está muy metido en un saquito donde ya las cosas son de una forma y él tiene que meterse a funcionar dentro de esos esquemas o está sonado" (11).

                "Por un lado está la libertad, por otro lado está la condicionante de la estructura política o religiosa que me impide optar, que me determina a actuar como ellos quieren. Sin embargo, teniendo estas condicionantes, es posible en algunos casos la libertad: si estas condicionantes son asumidas como legítimas y por convicción; pero si no se las acepta e igual te determinan, no se puede hablar de libertad" (17).

                "La libertad no existe, uno está condicionado. En el estado actual, el hombre está determinado por su medio a todo nivel, en los valores por ejemplo" (19).

                "Hay prototipos, algunos negativos, presentados por la TV, trastocados por conceptos como el de belleza. También hay líderes positivos. La sociedad marca" (20).

                "Siempre estamos siendo guiados por valores generales que otros imponen. Somos menos libres que nunca, pues vivimos en una sociedad que tiene sus raíces en una cultura occidental, el catolicismo, etc., que a uno se le vienen inculcando desde que nace y que a la vez uno va asumiendo, con lo que se pierde la libertad" (18).

                "La libertad debe jugarse en este mundo en medio de una "cancha rayada". Frente a los condicionamientos que te van imponiendo, la única manera de salir es mediante la inteligencia de cada uno. Cuando son muy fuertes, no hay que nadar contra la corrriente, hay que aceptarlos; y cuando están en juego tus propios valores, hay que callar" (16).

                "Creo que la autonomía no existe, porque todos estamos determinados, ya sea por el siglo, por el momento histórico, o por la estructura familiar, social, política, religiosa, cultural, económica; siempre hay alquien que piensa por ti: ya sea los padres, los profesores, o el grupo de amigos; son ellos los que deciden por ti y uno actúa de la manera dispuesta, sea por caer bien o por simpatizar. También influyen los medios de comunicación, ellos también piensan por nosotros" (17).

                "Que el hombre no esté trabado por obstáculos económicos, sociales, de casta, geográficos, etc., es lo que buscamos los que tenemos ideales marxista-leninistas. Para mí no existe la libertad en este momento, pues está determinada por factores culturales" (2).

                "Uno está constituido por una serie de valores que le vienen de la sociedad, de sus creencias y limitaciones, y uno se siente constreñido a optar por eso. Hay muchas determinaciones sociales, culturales, de clase" (4).

 

            Algunos entrevistados subrayan el papel que juega la familia:

                "Estamos siempre enmarcados dentro de ciertas pautas que inconscientemente interiorizamos. Por ejemplo, el respeto por el otro: me muevo con lo que me enseñaron que tenía que hacer" (7).

                "Del momento en que a uno, desde niño, le van metiendo en la cabeza cosas que uno tiene que aceptar y asumir porque otros han dicho que son buenas, no se puede hablar de autonomía: el hombre está encasillado en ciertos límites, en los cuales simplemente vive" (18).

                "Este anhelo profundo y legítimo del hombre, la libertad, está constreñido, limitado, por leyes que limitan nuestro actuar. Desde la formación en nuestras familias se nos ha indicado cómo debemos comportarnos. Frente a esta 'proposición-obligatoria' cabe la respuesta negativa, en uso de la libertad" (30).

 

            c) La naturaleza -que repercute sobre la persona

 

                "Los límites de la libertad te los pone tu propio entorno. Respecto de la naturaleza por ejemplo, me afecta a mí también la forma en que la uso" (7).

 

            4.3. El problema de la norma moral

 

            Cuando los entrevistados tocan el tema de la norma moral, suelen adoptar una actitud cuestionadora, que abarca diversos aspectos.

 

            a) Origen y existencia de la norma moral

 

            Las respuestas de los entrevistados son enormemente diversas, divergentes incluso:

                "El hombre es imperfecto y actúa más por imposición" (10).

                "Las normas son necesarias para un ser salvaje como el hombre; sin ellas actúa como salvaje. Las normas son impuestas socialmente, lo mismo que las costumbres que condicionan fuertemente la vida del hombre. Las normas morales son las más importantes y yo trato de vivir según ellas, trato de no hacer a los demás lo que no me gustaría que me hicieran a mí" (9).

                "La moral es esencialmente evolutiva y debe ir relacionada con el desarrollo de la sociedad. Cada uno interpreta la moral de manera distinta, eso es inherente a la libertad humana; otra cosa es que exista el valor en abstracto. Una sociedad necesita un mínimo de valores que rijan su conducta, pero éstos deben nacer a partir de un autoconvencimiento, en la medida en que el ser humano se da cuenta que son necesarias ciertas reglas como la solidaridad, el respeto a la vida. Es negativo cuando esto viene impuesto, pues no refleja la madurez de un pueblo y el sentir de las personas" (3).

                "La norma representa el pensamiento de determinadas personas. Ahora bien, hay normas que son anteriores a la ley, porque están en el ser del hombre: el derecho a la vida, a la libertad. Éste es un deber ser, un fundamento inmanente al hombre mismo. Engels plantea que la humanidad tiene un origen de felicidad: allí no eran necesarios los Estados. Pero con el nacimiento de la agricultura se da pie a la explotación. Esto no quiere decir que el deber ser del hombre sea volver al estado primitivo" (2).

                "Tenemos responsabilidad ante los demás, ante nosotros y ante la sociedad. La sociedad mira lo que cada uno hace y lo que deja como obra; está también mi propia conciencia, ante la cual debo responder" (23).

                "Las normas morales que rigen la conducta en la sociedad son fruto de una convención; más que aportar al bien común, restringen a la comunidad" (4).

                "Mientras la norma moral nazca de ese reflejarte tú en los demás, todo lo que venga necesariamente de ese supuesto es válido" (6).

                "Desde que uno es pequeño empiezan a socializarlo en roles, que podrían interpretarse como normas de conducta. Pero creo que en el comportamiento humano no hay normas, puede haber regularidad, repetición en el tiempo; pero normas en el sentido de ley, no: yo creo que el hombre es más libre" (8).

                "Las normas no se constituyen por mandato divino, responden a la intención de mantener la sociedad tal como está" (1).

                "Pienso que muchas veces las normas son convenciones. No hago mucho caso de las normas morales. Me guío por lo que yo puedo juzgar de esas normas. Hay personas que dicen: 'No hay que matar, está prohibido'. No: hay que sentir ese 'No matar', hay que ir más allá de la mera norma y la prohibición" (5).

           

            b) El problema de la autonomía

 

                "La realización del hombre depende de él mismo, de nadie más. El hombre va forjando su propio futuro; lo que uno siembra, después lo cosecha. Pero hay herramientas que el hombre no tiene, medios que no se le dan para que se pueda realizar como tal" (25).

                "Desde que abandoné la Iglesia me he podido plantear mi autonomía moral. Éste ha sido un proceso larguísimo, en  el cual he ocupado muchos criterios racionales muy kantianos, además de intuiciones marcadas por el contexto sociocultural en el que vivo" (21).

                "En cuanto a las normas que regulan el comportamiento, el común de la gente las encuentra positivas, en cuanto que resguardan al hombre común de los defectos de la sociedad, como serían los delincuentes, terroristas, etc." (17).

 

            c) El juicio moral

 

                "Muchas veces uno dice: 'esta cosa es mala'; pero tacharla así es demasiado tajante. Quizá si buscáramos en la raíz de esa cosa, encontraríamos una intención que no era hacer mal. Podría ser que fuera una especie de defecto, algo que quiso ser y no pudo ser, más que bien o mal. En una cosa que la gente considera mala yo descubro problemas afectivos, por ejemplo. Así, lo que era tachado de malo, no era mal" (5).

 

            d) El ideal moral y el cambio en dirección a él

 

                "Las normas podrían ser más auténticas e incluso innecesarias, si existiera una convivencia más auténtica, no marcada por intereses u otros valores" (1).

                "En la medida en que haya una conciencia en un grupo grande de personas que puede influir socialmente, se puede cambiar eso que podría considerarse como una norma de conducta obvia para la gente, eso que se denomina sentido común" (8).

 

            4.4. Los valores

 

            Las referencias de los entrevistados a los valores pueden agruparse en torno a tres temas: un diagnóstico de la situación actual y las dos preguntas por el origen de los valores y por sus contenidos.

 

            a) Diagnóstico

 

                "En la convivencia social veo más antivalores que valores. Por ejemplo, la envidia te regula la forma de actuar, vestir, peinarte, para que no te distingas de los demás" (6).

                "Se están perdiendo muchos valores que antiguamente existían muy arraigados en nuestras familias, y ahí está empezando la destrucción del mundo. Hoy no se toman en cuenta los límites, sólo interesan las riquezas, el poder, el afán de conquista y de acaparación" (25).

                "Ha habido un período bastante largo donde se ha ido dando un individualismo muy fuerte, las personas ya no piensan en el que está a su lado, si come o no, si sufre; piensan sólo en su propia situación, el otro no les interesa. Se ha perdido el valor de escuchar y, como uno está tan cargado con los problemas propios, no quiere cargarse con los ajenos. Esto se ha producido porque se ha eliminado el humanismo, se ha alejado el deseo profundo de desarrollar el espíritu, por ejemplo el desarrollo de la filosofía en toda su profundidad. Este problema tiene su origen en la educación impartida en los colegios, donde se insiste sobremanera en la preocupación  por el bienestar, lo que está a un paso de acentuar el consumismo como estilo de vida" (15).

                "Estamos en una sociedad muy decadente en cuanto a los valores. La verdad es que no existe ningún valor rescatable. Los devotos ya no creen en los dogmas y por esta razón tarde o temprano esto debería caer por su propio peso; se aprecia un cinismo en la Iglesia. Me he dado cuenta que la gente frustrada es la que va a la Iglesia y llega a ella a pedir refugio y nada más" (16).

                "El quiebre <de los valores> se produce al mirar la sociedad que se dice cristiana y no vive los valores anunciados por Cristo" (27).

                "El consumismo es un sistema muy negativo que ha ido destruyendo a la sociedad y, por ende, también al hombre" (25).

 

            b) Origen

 

                "Hay valores humanos independientes de los cristianos, que se pueden encontrar en cualquier persona" (27).

                "Hay valores inherentes al ser humano, que se pueden captar por un conocimiento visceral" (19).

                "Hay valores que se trata de imponer, pero que no responden a la realidad, como por ejemplo el de la reconciliación después de la visita del Papa; esto no era sincero, era como un valor slogan. Hay otros que nacen de más adentro" (20).

                "Personas con las cuales tengo una relación muy estrecha me han hecho vivir la experiencia de enamorarme de ciertos ideales" (21).

                "A lo largo de la historia una serie de antivalores se han ido imponiendo, porque el hombre estaba entonces más limitado que hoy. Hay valores que responden a determinadas culturas: hay ahí un condicionamiento, una cierta imposición. Sin embargo, otros valores son evidentes en su bondad" (29).

 

            c) Contenido de los valores

 

                "Los valores anunciados por Cristo: el amor al prójimo, la solidaridad, el perdón, etc." (27).

                "El valor que sí debiera estar presente es el amor, ya que cuando lo realice en toda su dimensión el hombre lo va a alcanzar todo" (16).

                "El hombre visto en sus diferentes potencialidades es un valor absoluto. Por esto creo que todo debe converger a ofrecer condiciones de desarrollo del hombre. Por mi parte, deseo poder rendir el máximo de lo que realmente puedo" (30).

                "En mi época de universidad el ambiente era bastante diferente del que veo ahora: nosotros captábamos a las personas que tenían dificultades, íbamos a sus casas, veíamos sus problemas y tratábamos de darles alguna solución. Yo viví dos años con una compañera en mi casa, porque ella no tenía dónde quedarse. Uno era ciertamente más abierto a las necesidades de los demás" (15).

 

            5. Límites

 

            El tema de los límites de la libertad ya ha quedado consignado en el capítulo anterior. Aquí recojo lo que se dice, en general, de los límites humanos y, en especial, de la muerte.

 

            5.1. Los límites, en general

 

            a) Límites de las personas

 

                "Los límites son tremendos en todos los aspectos; en las relaciones humanas: no solucionar problemas como la pobreza, el egoísmo de la gente, el apasionamiento político; limitaciones de tipo social: expectativas de la gente muy limitadas; en la forma de percibir el mundo: según Humberto Maturana el hombre percibe la realidad a través de estructuras biológicas que están predeterminadas desde mucho tiempo; limitaciones para no poder apreciar otras dimensiones" (8).

                "Experimento limitaciones personales, condicionantes, que me hacen ser egoísta y cómoda, y preguntarme ante los ideales y las opciones si me convienen o no, midiendo qué pierdo y qué gano con ellas. Experimento además impotencia al ver gran cantidad de gente que vive en la inconciencia, de forma individualista, sin ver más allá de la propia situación; impotente por no poder hacer algo para hacerlos reaccionar. Pero al no ver mis propios valores vividos por los demás, sobre todo por la juventud, me lleva a preguntarme: ¿serán válidos para todos? ¿ no estaré yo equivocada?" (27).

                "Los límites se los pone uno mismo; no puedes no tener límites, pero parten de uno mismo, de tu concepción de la vida; por ejemplo, los otros seres humanos que hay que respetar. El problema es cuando los límites te los ponen los demás y tú consideras que esos límites no deberían estar" (7).

                "Los límites o frenos que encuentra el hombre en su historia o acontecer diario son las cosas que le van quitando los mismos hombres. El hombre es el mismo freno para su realización como tal: veo envidias (yo misma soy así), flojera, que no se nos dan todos los medios para realizar los proyectos que uno tiene. Quisiera hacer tantas cosas, pero me veo limitada por mi mamá, mis compañeras de estudio, mi sociedad, la política que se ejerce en las Universidades..." (12).

 

            b) Límites de la historia

 

                "Uno de los límites que veo es la sociedad consumista, que lentamente va destruyendo el mundo en aras del progreso. Si el hombre no toma conciencia del daño que se hace a sí mismo, va directo a la destrucción" (14).

                "El límite sería si, continuando el curso del progreso humano, se llegara a una tercera guerra mundial: ése es un límite claro. Pero pienso que no puede haber un estancamiento, pues mientras el hombre siga siendo hombre tiene que seguir creando, ya que eso es él mismo. Si no crea nada, no tiene sentido estar vivo" (1).

 

            c) Límites que la sociedad y la religión ponen al individuo

 

                "Uno de los límites es la religión, porque limita ciertos pensamientos, frenando un poco a la gente. Vivo en un mundo contradictorio: tengo mis valores, mis creencias, pero esto me lo ha frenado principalmente la religión, la estructura política, el ambiente en que vivo, los que me rodean e influyen constantemente; constantemente estoy viviendo un clima de oposición, de enfrentamiento, de violencia, lo que también limita el poder desarrollar mi forma de pensar. La actitud que tomo frente a estos límites es de rebeldía, sobre todo frente a la religión" (18).

                "La moral es un límite que dificulta la construcción del mundo. La religión limita también al hombre, porque hay que respetar sus normas. La sociedad somete a través de sus leyes y el hombre pasa a ser sólo un engranaje de la gran máquina. Personalmente, uno de los límites que más me ha afectado es esta estructura social supuestamente libre, pero que no lo es: me encuentro criticado por hablar de igualdad, y esto indudablemente es un límite, porque uno no sabe si seguir adelante con su postura o simplemente hay que someterse. La actitud que yo tomo es de rebeldía, basada en el hecho de que cada hombre tiene derecho a construir una vida que sea más o menos digna para todos. Otra actitud que trato de mantener es la de manifestar siempre mis pensamientos" (17).

 

            d) Actitud ante los límites

 

            "Todo hombre se siente impotente ante lo que no puede dominar. Hay cosas que escapan a las posibilidades del ser humano; son lo único que a veces hace aterrizar a los hombres y los hace pensar, aunque no sea más que por breves momentos, que no somos más que insectos. En esos momentos, por ejemplo en un terremoto, se recurre a la típica frase: 'no somos nada'; pero dura poco, y el hombre se siente omnipotente y todopoderoso" (9).

                "Los límites son cosas naturales, no son ni malos ni buenos; con ellos hay que tratar de vivir plenamente" (20).

                "Los acepto, pero no me quedo sólo en la resignación sino que trato de superarlos en la medida de lo posible. Hay cuestiones de tipo social que se pueden ir superando solidariamente" (8).

                "Los límites el hombre los tiene como cualquier ser aquí en la tierra: tenemos un principio y un fin que responden al orden natural. Mi posición es aceptar ese curso de la naturaleza" (29)

                "El hombre, en su intento de dominar su campo vital, encuentra frenos, imposibilidades, límite. Pero esta conciencia de límite el hombre la entiende dentro del proceso de un menos hacia un más; es decir, acepta los límites de hoy, sabiendo que en un futuro no muy lejano podrá vencer las dificultades que encuentra. Esto no es ninguna ingenuidad, pues muchas cosas que antes eran imposibles hoy son posibles" (30).

                "Cuando me encuentro frente a límites, naturales o humanos, pienso en alguien trascendente. Ahí está Dios; todos lo necesitamos. La armonía se logra más allá de la muerte, en lo trascendente" (10).

 

            e) ¿Trascendencia?

 

                "Pienso que la trascendencia del hombre se da a nivel material, en las cosas que puede hacer, incluso en los hijos; no resulta indispensable que se la viva las 24 horas del día" (3).

                "Por supuesto que hay cosas más allá de lo que vemos y tocamos: los sentimientos del hombre, los pensamientos, las ideologías, la cultura en términos abstractos. Hay todo un mundo que podemos conocer y que la ciencia está estudiando" (23).

                "Aparte de lo que vemos y tocamos, claro que se cree en algo más. Por ejemplo, tenemos facultades, valores que no vemos: el amor, la belleza, los pensamientos; no los vemos, y hay que creer en esas cosas. El hombre está en camino de ser autosuficiente, se está desarrollando y progresando más" (29).

                "Creo que existe algo más allá de lo que vemos y tocamos ahora. Hay muchas cosas que aún no conocemos, que no las vemos ni tocamos. Algún día -yo ya no lo veré- se abrirán horizontes nuevos al hombre" (30).

 

            5.2. El problema de la muerte

 

            Las respuestas de los entrevistados expresamente diferencian la actitud ante la muerte que tienen los creyentes y los no creyentes. Uno plantea como salida diferente la fe en la reencarnación.

 

            a) Para el no creyente

 

                "La muerte es un paso inevitable. Lo tengo que pasar como todo ser. Lo que me inquieta es dejar cosas tan buenas en esta vida y el misterio que supone entrar en algo desconocido como es el ir al otro lado (¿existe?)" (30).

                "La muerte es el término de una etapa que la naturaleza nos ha concedido" (29).

                "La muerte no me produce miedo, es algo evidente. La fe busca trascender, pero creo que es algo meramente visceral. Claro que yo no creo en la inexistencia total" (19).

                "El hombre muere y se acabó. Por eso es conveniente que tenga una vida plena. Yo no creo en una vida eterna después de la muerte como los cristianos o creyentes en general. Uno puede pasar a una vida eterna mediante un legado: familia, hijos, que a uno lo recuerden por haber aportado al mundo algo bueno" (20).

                "La muerte para mí es sólo morirse, dejar de pensar, sentir; y luego te comen los gusanos. La muerte me impacta pero no me da miedo. Lo importante es que los que seguimos viviendo lo sigamos haciendo intensamente" (14).

                "Al hombre lo que más lo marca es la muerte. En ese sentido, a mí se me produce una urgencia, una necesidad de vivir y de hacer. Los que no creemos vivimos de modo más urgente, pues nuestra existencia se limita sólo a esta instancia terrenal" (3).

                "Tengo sentimientos encontrados ante la muerte. Hay veces que pienso serenamente ante un cambio de vida; otras, con cierto temor a lo desconocido" (9).

                "Cuando creía, nunca le encontré sentido a la resurrección. No me interesa vivir después de esto. Para mí es esto y punto. Para mí, vivir es eso: hacer todo lo más hermoso posible y lo bueno. No por un premio ni por una recompensa. Sé que voy a morir y que todo es ciclo. Si yo no aceptara que las cosas nacen y mueren, no podría vivir feliz" (5).

                "Ante las limitaciones que nos pone la naturaleza, la muerte por ejemplo, siento un poco de impotencia, rabia de la situación. Ahora estoy viviendo un caso muy de cerca, una enfermedad de un pariente. Es rabia, no poder rebelarte contra eso y hay que 'agachar el moño' no más. Rabia porque te agarran y te cortan: esta persona va a durar un año más, sin que tenga un proyecto elaborado, porque lo arrebatan de todas sus condiciones" (6).

                "Veo la muerte como un proceso natural. Todos, desde que nacemos, sabemos que vamos para allá" (4).

                "Antes la muerte era para mí algo desesperante, pura destrucción. Pero ahora es sólo el término, el límite de la función que tengo que desempeñar. Al momento de mi muerte se acaba mi paso en este mundo, ya no existo más y no existiré en otra parte. La oportunidad se nos da aquí y no hay otra; si no se aprovecha, se perdió; aquí nacemos y aquí morimos, aquí se juega todo" (15).

                "Hasta hace muy poco, frente a la muerte he sentido mucho miedo, pero ya no. Es algo que tiene que pasar, todo lo natural muere: los vegetales, los animales, nosotros también; es algo normal. La diferencia que hay es la racionalidad; el hombre deja mucho tras sí gracias a su capacidad de creación. También se siente el dolor cuando muere alguien querido" (23).

                "La fe es el fin de la carne, no sé si del espíritu. No le tengo miedo a la muerte, sino a la muerte de los que quiero. Pienso que todo se cumple acá y que, viviendo plenamente, se puede llegar a que todo sea más bello, siendo uno el responsable de que se cumpla" (16).

                "La muerte no es un límite; al contrario, es lo más importante que hay en la vida. Es por la presencia de la muerte que nos movemos, nos vemos urgidos a vivir; si no estuviera el horizonte de la muerte, se podría hacer cualquier cosa, retomar algo o dejarlo; pero cuando está la muerte uno tiene que vivir con toda intensidad. La muerte es una amenaza, pero que nos hace movernos, actuar, vivir, jugarnos por algo. A veces la muerte me da miedo, otras alegría; a veces la deseo, a veces me es indiferente. Vivo habitualmente la vida en plenitud, como si la muerte no estuviera" (13).

                "Creo que lo que realmente le da un sentido a la vida es la muerte, saber que eres un ser para la muerte; a partir de ello tengo que construir mi felicidad. En el momento de morir tengo que hacer un balance; si fui menos feliz en algún momento, es producto de que no fui capaz de abrirme a la correspondencia mutua entre las personas" (17).

                "No creo que pueda acabarme al morir. Creo que hay algo más, no puede ser que me acabe. Pero no sé si me voy a ir al cielo o me voy a transformar en otro ser, planta o perro, o me voy a reencarnar. Pero algo hay. Gran parte de los hombres de hoy no pueden creer en Dios. Existe el deseo de querer agarrar a Dios, de entenderlo racionalmente. Yo tengo esa necesidad y, al mismo tiempo, sé que no puede ser. El creer lo veo como un acto de iluminación; pero, para creer, necesito convencer al mismo tiempo a mi razón, a mi mente" (24).

                "Pasé por una etapa existencialista donde dudé de todo y me dije que Dios no existía. Luego me di cuenta de que había en mí algo que no podía borrar, como que yo no puedo creer que me voy a morir y me voy a acabar. No puedo, no cabe en mí" (24).

                "Uno muere y se acabó todo, o muere y hay Dios y sigue viviendo en plenitud los valores que vivió aquí. Pero no, uno se muere y se acaba todo" (27).

 

            b) Para el creyente

 

                "La fe busca trascender, pero creo que es algo meramente visceral" (19).

                "Yo no creo en una vida eterna después de la muerte como los cristianos o creyentes en general" (20).

                "Para el creyente, me da la impresión, hay una actitud más pasiva ante la vida" (3).

                "Pienso en otra vida. Yo creo en Dios, pero también creo en la reencarnación ligada a Dios. Para mí hay un ciclo de vida que terminará cuando merezcamos llegar a Dios" (9).

                "Ante la muerte, la gente creyente piensa que no le arrebatan nada, sino que ellos entregan la vida. Pero como yo no participo de eso, a mí me cortan la vida" (6).

                "Lo que nos da el sentimiento de culpa es la creencia en la otra vida. Ante la experiencia de fracaso se necesita la creencia en una vida donde sea posible otra oportunidad para vivir mejor y en mayor plenitud" (15).

                "La fe puede decirte que, si la tienes, vas a nacer de nuevo en otro lugar, donde todo será más bello" (16).

 

            c) Otra salida: la reencarnación

 

                "Creo en la reencarnación; cada vida es una oportunidad de mejorar o empeorar. Esto lo creo por sueños quen he tenido y que se me han repetido desde niño" (9).

 

            6. Religión

 

            Este capítulo resultó ser el más largo de todos. Quizá, como se trataba de no creyentes, los alumnos insistieron en el tema religioso. Las respuestas se pueden agrupar en cinco rubros: lo religioso en general, la fe, Dios, Jesús y la Iglesia.

            Es notable que, en cada uno de los temas, siempre aparece un grupo de entrevistados que lo ve como el producto de una necesidad humana, que se busca su satisfacción, creando su objeto religioso; se niega así de partida la posibilidad de una real trascendencia. Pero en otros entrevistados se afirman matices.

 

            6.1. Lo religioso

 

            Cuatro matices se perciben en las afirmaciones acerca de lo religioso en general.

 

            a) Lo religioso es producido por una necesidad humana

 

            "El hombre siempre ha necesitado algo más de lo que tiene, de lo que ve, de lo sensible. Necesita algo que lo llene en su parte espiritual. La vida del hombre es una incesante lucha por sobrevivir; el ser humano necesita tener algo que lo ayude a sobrellevar todas las dificultades que se le presentan, necesita una esperanza. Aparece así la parte religiosa, las religiones, como un bastón necesario para salir adelante. Desde chico yo he buscado la religión, porque la necesito; pero no la he podido encontrar. Una religión tiene que llenar sobre todo el espíritu, desentendiéndose lo más posible de lo material. Las religiones que más se acercan a eso, según he leído, son las hindúes, que viven en pos de la purificación del hombre, ayudándolo a alcanzar un nivel de vida superior en lo espiritual, para alcanzar a Dios. Para ello, hay que morir, hay que dejar esta vida, de lo contrario no se puede alcanzar a Dios" (9).

                "La religión es necesaria. Tal como lo es la sicología, la religión también es necesaria. Hay personas que recurren al sacerdote y otras al sicólogo. El hombre necesita una fuerza interior, pero como no capta eso, es necesaria la existencia de la religión. Ésta crea un mito, crea a Dios, y a través de la fuerza que la religión otorga al hombre éste puede salir adelante" (15).

                "La religión responde a necesidades casi de la naturaleza del hombre, desprotegido frente a la realidad, por ejemplo ante la muerte. El fenómeno religioso surge como mecanismo de defensa. Es también un condicionamiento cultural" (19).

                "El fenómeno religioso es tratar de encontrar algo que sirva para unificar, para aunar todas las fuerzas humanas, en el sentido de darnos razón a todos juntos. Es algo que da sentido al caminar de la humanidad, pero en las cosas terrenas, que vemos a diario en nuestra realidad, no partiendo de lo que está más allá" (7).

                "El hombre tiene muchas necesidades, entre ellas la de explicarse muchas cosas. Cuando el proceso va evolucionando y se va desarrollando la sociedad, hay un crecimiento en términos de dominación, hay poderes que controlan, legalizan y contribuyen al sistema. Este poder dominante se vale de la ignorancia de la gente (que es la que produce los bienes) y le atribuye todos sus males a la voluntad de Dios, con lo que a la gente sólo le queda resignarse: la religión es una proyección de clases. Pero se ha producido en la religión una evolución positiva, ha habido un acercamiento entre la religión y el hombre actual; la fe va quedando en segundo plano. Creo en la capacidad del hombre concreto explicable y que puede conocer la naturaleza" (28).

                "Las religiones no solucionan problemas. Parten de una actitud cómoda, son un escape a diversos problemas, por ejemplo al temor a la muerte; de ahí que la gente realice actos buenos mirando a una segunda vida: hace las cosas por temor al infierno. Toda esa gente se olvida que hay que realizar el desarrollo ahora. Las religiones corresponden a una creación del hombre; por un lado, para satisfacer la comodidad de muchas opersonas que tienen intenciones opresoras y por medio de la religión pueden tener al pueblo tranquilo; por otro lado también se debe a que el hombre necesita seguridad: así imagina que hay un ser que lo ve todo, que nos vigila desde arriba y que nos castiga si nos portamos mal. Son puros inventos que le enseñan desde chico a uno, desde que, si se cayó de la bicicleta, algo malo habrá hecho uno, y cosas por el estilo" (23).

 

            b) Rechazo de lo religioso en nombre de la autonomía

 

            "La realización del hombre depende sólo de él. Nadie puede hacer por él lo que debe hacer por sí mismo. No tiene sentido que el hombre biusque afuera o, como los creyentes, arriba de él algo para darle sentido a su vida. Es suficiente con lo que somos aquí y ahora" (12).

                "Creo en mí mismo, creo en mis capacidades. Creo que no es indispensable entablar relaciones que disminuyen la real capacidad humana. El hombre, por sí mismo, tiene en sus manos su futuro. Además, la experiencia demuestra que mientras más fe se tiene en uno mismo, más se progresa" (30).

 

            c) Lo religioso como fenómeno que se acepta

 

            "Las religiones son agrupaciones humanas; son buenas si se agrupan en torno a ideas que favorezcan el bien. Me da lo mismo cualquiera de los fenómenos religiosos, acepto todas las religiones, aunque yo soy de una cultura cristiana" (20).

                "Cuando el hombre quiere aprender algo, aprende en libertad y no por imposición como las religiones lo exigen. Nadie tiene la verdad absoluta. Cada uno tiene que escoger lo que lo representa. Pienso que en las religiones, muchos la escogieron porque realmente les gustó" (10).

                "Acepto el fenómeno religioso como una realidad que se da en mucha gente y lo respeto bastante porque a mí me bautizaron, después hice la primera comunión y tenía una concepción del mundo que era católica" (8).

                "Hay un libro de Julio Retamal, "Después de Occidente", que plantea tres posibilidades para el mundo actual: abrazar el sovietismo, encontrar el sentido del sinsentido, y la tercera, que es la que más me llama, es volverse hacia lo religioso. Desde hace años en "El Mercurio" comenzaron a salir artículos de filósofos europeos que planteaban la necesidad de que el mundo volviera a lo religioso" (24).

               

            d) Presencia real de lo sobre-natural

 

            "En el hombre hay una creencia que después de esta vida existe otra. Si esto no fuera así, para qué estaría yo en esta tierra, si con la muerte todo termina. El hálito de lo vivo que tenemos no puede morir, esa energía tiene que volver a su origen, no se pierde" (26).

                "Tenemos una fuerza que nos empuja a entablar una cierta relación con 'lo misterioso'" (30).

                "No encuentro ninguna relación entre lo natural y lo sobrenatural, porque lo natural es algo dado y lo sobrenatural es algo que no sabes si te es dado, uno piensa que está y nada más. Hay indicios que te demuestran que lo sobrenatural está presente, como lo demuestra la pintura de Jerónimo Bosch, donde lo fantástico irrumpe" (16).

 

            6.2. La fe

 

            Cuando se trata de la fe, algunos entrevistados la ven como el producto de una necesidad humana que busca su satisfacción. Otros se preguntan primero qué es la fe. Luego están los que la evalúan según sea alienante del ser humano o no. Algunos se plantean expresamente la relación de la fe con la razón. Finalmente están los que se refieren a lo difícil que les resulta tener fe.

 

            a) La fe es producida por una necesidad humana

 

            "Mi cuerpo, como persona, funciona como un motor; pero aparte de eso hay algo que uno tiene dentro: se siente, pero no es palpable. Ésta es una fuerza que uno siente, es una luz de vida. Es desconocida. A lo desconocido el hombre lo pone más arriba; desconoce sus principios y, en la búsqueda de encontrar una respuesta, nace lo que se llama fe. Por tanto, fe es creer en algo que existe pero que no se ve, aunque se sabe que existe" (26).

                "Creo que la fe es necesaria para los creyentes; mientras les ayude a aportar y a ser coherentes, vale creer en lo que sea" (30).

                "Partiendo de la realidad y sin ser creyente se puede llegar a ser tan bueno y desarrollar tantos valores como las personas que creen. El problema está en que hay gente que si no tiene un Dios arriba, unas normas a priori que los regulen, no llegan a ser buenos. Una persona que no ha analizado bien su posición en el mundo y la consecuencia que tiene su propio comportamiento en los demás, no va a actuar necesariamente bien. A esa persona le hace falta tener un Dios y una Biblia, tener cosas en que apoyarse. Pero una persona que se ha cuestionado su existencia y la relación que tiene con los demás, puede llegar a ser tan bueno sin esas normas. Un pueblo se genera esas normas, pero no las da como propias sino que les pone nombre divino" (6).

                "De fondo hay un problema de lenguaje. Mi mamá tuvo una gran depresión y 'su fe en Dios' la sacó, y ella salió de verdad. Pero salió porque había fe en ella de salir. No tiene para qué ser Dios, puede ser incluso mi siquiatra. Pero hay un acto de fe que me lleva a mí a empujar, a tratar de superar el problema" (24).

                "La fe es la afirmación que tiene una persona que cree en algo; es lo que me pasaba a mí cuando era creyente. Usando una figura: como en el mar de la racionalidad no hay nada de qué agarrarse, la fe sería una balsa, un salvavidas" (8).

                "Siento envidia, debe ser rico afirmarse en algo, tener sentido de trascendencia. El creer es muchas veces por falta de seguridad, y eso lo da la fe" (19).

                "No tengo la fe, siento un vacío; me encantaría tenerla" (20).

                "Para mí no existe en absoluto la fe. La fe en Dios es un intento de explicar lo inescrutable; es la esperanza de que exista un Dios o de que se va a dar solución a los problemas" (2).

 

            b) Qué es la fe

 

            "Fe es creer en algo que existe pero que no se ve, aunque se sabe que existe" (26).

                "La fe es una creencia grandísima, casi sin cuestionamiento o, si es con cuestionamientos, éstos siempre se resuelven a favor. Es creer casi sin restricciones. Uno no entiende cómo nace la fe. cómo se genera" (6).

                "La fe es la esperanza en un mundo mejor. No es confianza en uno mismo, eso sería autosuficiencia" (8).

                "La fe es esperanza, llena un vacío. Uno no sabe de la vida, de dónde venimos, adónde vamos; la fe da la solución a eso. La fe es ser creyente en algo que no es probable; es confiar en algo que va más allá de lo humano, de lo racional" (20).

                "La fe es algo impuesto, condicionado por la familia, que presenta la existencia de Dios como evidente, de modo visceral. Hace referencia a dogmas, a dimensiones estáticas. Es algo mitológico. La fe es un sentimiento infantil" (19).

                "La fe es ante todo una esperanza: de una vida mejor, de algo mejor. Pero también es mezcla de superstición, credulidad, ingenuidad" (9).

                "La fe es confianza en lo que sea: Dios, padres, hombres, etc. Contribuye al crecimiento personal, porque es una confianza en el propio actuar" (10).

                "La fe la relaciono con la esperanza. Toda persona tiene la esperanza de realizarse a sí misma, de procurar, en este tiempo que tenemos en la historia, crecer como persona, crecer en la solidaridad y en la justicia. La fe la entiendo como la confianza que tenemos en nuestras potencialidades" (29).

                "Relaciono mucho fe con esperanza, siempre las he visto a las dos como un motor, algo que te impulsa a actuar" (7).

                "La fe la relaciono con la confianza" (1).

                "La fe es una adhesión y convencimiento pleno de la existencia de Dios" (3).

                "La fe es una intuición de Dios, es como una forma de conocer que no es racional; algo que te llega, que lo sientes, que lo palpas más que lo piensas. En mi caso, no me ha llegado. Para llegar a esos puntos de sentido de la vida, que puede ser la religión y en definitiva Dios o el amor, es necesario un salto" (11).

                "Fe me suena parecido a confianza, a tener mucha esperanza en lo que uno hace: es tener la convicción de que uno va a triunfar y que le va a salir bien lo que se ha programado. A veces se pierde, pues encuentras decepciones en lo que vas realizando. Cuando uno más piensa en una cosa, se la propone hacer con todo cuidado, va sintiendo algo muy especial dentro de sí. A eso lo llamo fe o confianza en sí misma, pues para la vez siguiente que me programe algo, sabré que me resultará, por la experiencia en la actividad anterior" (12).

                "La palabra fe tiene muchas más connotaciones que el solo sentido religioso. Una de las más esenciales para mí es que el hombre es un ser que confía, que vive creyendo, ya sea en sus proyectos o aspiraciones; el hombre siempre tiene una confianza esperanzadora" (4).

                "La fe es algo que se tiene o no se tiene; o se cree o no se cree, no hay términos medios" (24).

                "Tuve mucha fe. Creo que es una gracia, una cosa que se tiene y que después se puede perder. Fe significa tener confianza o creer cosas que no veo, que no sé nada de ellas. Es como soñar, es como una esperanza. Yo no tengo fe, pero sí tengo esperanza. Pero la fe es más fuerte que la esperanza; es algo que yo no puedo tener. Se puede tener fe en Dios, en sí mismo o en qué sé yo. Tengo más fe en mí y en las demás personas" (5).

                "En muchas personas se da el contacto intuitivo con Dios, se da la fe. Cuando la persona tiene esto todo lo demás está fuera de lugar" (11).

 

            c) La fe aliena

 

            "Cuando la fe es utilizada como un elemento distractor se transforma en alienante" (4).

                "Que la fe sea alienante o no, no sé. En algunos casos concretos es muy alienante, en otros muy poco. Así como también hay gente atea que vive muy alienada" (11).

                "La fe puede ser alienante cuando se transforma en fanatismo" (3).

                "En algunas personas puede ser alienante" (9).

                "Lo de alienante es relativo, depende de cómo se asuma: para los que la fe es algo solamente místico es alienante. Y si es alienante, no ayuda al crecimiento" (19).

                "Veo que hay aberraciones y extremismos en los creyentes" (30).

                "La fe religiosa es alienante, pero no me atrevo a decir el porqué, por no estar preparado" (25).

                "Respecto de los creyentes católicos, creo que la fe es una opción legítima. Pero creo que la gran masa encuentra allí una posibilidad de no enfrentar desde su mundo interior los desafíos de la vida, suele ser una masa amorfa. La religión suele dar respuestas a quienes no han preguntado, a quienes no les ha nacido la pregunta desde lo profundo de su ser: éstos terminan introyectando respuestas que nunca han tenido una pregunta que les dé sentido. Así, la religión pasa a ser tranquilizadora de conciencias sin cuestionar lo profundo" (21).

                "Creo que la fe es alienante. Por poner un caso: si soy de izquierda, la fe me va a coartar de modo que no podré hacer lo que yo creo y me brota del corazón; porque muchas veces tendré que conjugar el odio en mi vida y el dolor al cual la fe le da otro sentido" (17).

 

            d) La fe no aliena, favorece el desarrollo de la gente

 

            "En general la fe es importante, porque es difícil vivir sin fe. Para los que la tienen es una ayuda" (9).

                "A algunos la fe los lleva a compromisos sólidos, así no es alienante" (19).

                "La fe como vida religiosa se escapa de la realidad; pero esto no es algo malo, es respetable, da crecimiento de tipo moral, espiritual y esto ayuda al crecimiento humano, ya que influye en las acciones posteriores que realiza la persona" (20).

                "Nadie es dueño de la verdad y cada uno tiene su propia fe y su propia creencia, por lo tanto no es alienante" (25).

                "La fe es algo muy positivo. El mundo es tan agobiante que el ser humano necesita de un rescate, de encontrarse a sí mismo, y hay mucha gente que encuentra esto y la fuerza para vivir en Dios. Si la fe está acompañada con obras coherentes y una conducta racional, resulta ser muy positiva" (3).

                "La mayoría de nuestro pueblo y de la gente sencilla es cristiana; ahí yo no veo la fe alienante, sino como un pilar fundamental para la lucha diaria" (4).

                "La fe es válida en cuanto ayuda al hombre a desarrollarse" (29).

                "La fe no es alienante. El hombre también es inteligente; él contribuye con esa fe a su crecimiento personal, porque es una confianza en el propio actuar" (10).

                "Es innegable que, bien tenida, de una forma honesta, la fe cristiana es valiosa: la gente que realmente tiene fe cristiana hace el bien y es gente buena" (6).

                "La fe no es alienante, porque va muy relacionada con tus principios, costumbres, con lo que uno piensa, con tu espiritualidad, tu ideología; es decir, hacia donde tú estás pensando y hacia donde luego vas a caminar. Ahora, que haya un grupo de gente que utilice su fe para elevarse y vivir en otro mundo y no estar aquí, eso es sólo una cuestión mal vista; yo creo que la fe y la religión, que van unidas, tienden a hacer algo, concretamente a mejorar las cosas; en este sentido no me parece que la fe sea alienante" (18).

                "A algunos cristianos lo que creen les aporta para crecer en su responsabilidad y en su aporte en la construcción del mundo" (29).

                "Los creyentes me caen muy bien; es bueno creer, es sano, es creativo" (22).

                "Cuando me siento acompañado (por un Ser superior) me atrevo a hacer las cosas. La fe en mí mismo me ayuda a superarme; el Ser superior lo único que hace es acompañarme" (26).

                "Tengo respeto por las religiones, en especial por la religión católica; a muchas personas las ayuda a tener un sentido para su vida" (23).

               

            e) La relación razón/fe

 

            Los entrevistados se dividen aquí en dos: los que afirman que se da una relación entre fe y razón y los que la niegan.

            Entre los que niegan que haya relación aparecen dos razones diferentes: una es que la fe no admite a la razón, la otra es que la razón no alcanza a la fe.

            -La fe no admite a la razón:

            "La fe es algo que no admite razonamiento" (24).

            -La razón no alcanza a la fe:

                "La razón no te prueba la existencia de Dios y tampoco la no existencia; eso mismo evidencia que no hay ninguna relación entre la razón y la fe. Creo que la razón está en un estanco distinto al de la fe. No se puede llegar a una conclusión racional en la fe, siempre hay un salto que resulta ilógico para la razón" (3).

                "Creo que no hay contradicción entre razón y fe: la razón no puede traducir la fe ni puede impartirla" (11).

                "No hay ninguna relación entre razón y fe: la fe surge como un absurdo de la razón, como un absurdo lógico. No es posible dar cuenta con una certeza rigurosa que exista o no exista algo trascendental. Aceptar dogmas es antagónico a la razón. La razón que acepta la fe tratará de darle sentido lógico y racional. Creo que la fe está en un estado superior a la razón" (4).

               

            Las razones de los que piensan que se da una relación entre fe y razón:

                "Me imagino a Santo Tomás: él creía y por eso hizo todo lo que hizo; no lo hizo para saber si Dios existía realmente, porque él ya sabía que existía. La relación de la razón a la fe es, entonces, más como de apoyo: usar la razón para comprobar lo que se sabe por la fe. Es lo mismo que podría hacer un ateo: pasar años para demostrar que Dios no existe" (6).

                "Veo que la fe que tengo se entiende mejor cuando es pensada, pues soy un ser inteligente" (12).

                "La relación entre razón y fe es como de contradicción: de repente te metes en el razonamiento o en la racionalización y tu fe se va a la cresta. Creo que deberían ser compatibles, pero no sé cómo. La razón para mí es un instrumento, no un todopoderoso que domina todo: en ningún caso puedo decir que constituye la herramienta para conocer todo, entiendo que hay muchas cosas más allá de ella" (7).

 

            Finalmente, un entrevistado propone una posición relativista:

                "Creo que no es posible determinar filosóficamente qué relación hay entre razón y fe, sino a partir de la propia posición que uno tiene: si uno es cristiano, dirá que se complementan o que la fe es superior; si es marxista, dirá que es una forma de la razón. En el actual estado de cosas, es poco probable lograr transparencia y claridad en este problema, pues tenemos una conciencia que no sabe razonar sino sólo a partir de nuestras propias convicciones. El planteamiento del problema en Santo Tomás es inseparable de las condiciones históricas del pensamiento, del estado del mundo, y de su posición como sujeto que está pensando. Aún vivimos en un mundo con una gran carga de alienación, la que nos imposibilita para acceder a la solución de este problema" (1).

 

            f) La dificultad de tener fe

 

            "No sé cómo se aferran los creyentes a cosas que no se ven. No me explico de dónde nace esa convicción de lo que dicen creer" (30).

                "Yo admiro a las personas que dicen tener fe y las respeto, pero no las entiendo. A mí me gustaría tener fe, pero jamás la he experimentado; no entiendo cómo pueden amar tan desinteresadamente a algo tan abstracto como Dios" (15).

                "Me he hecho la pregunta: ¿en qué creo? Pero nunca llego a una respuesta que me satisfaga. Me pregunto, por ejemplo, ¿quién creó el mundo? Busco respuesta en la religión y también en la ciencia moderna, pero ninguna me convence, quedo en la duda, no sé en qué creer" (27).

                "Del cristianismo pienso que es una actitud valedera que intenta dar una respuesta a la existencia; aunque algunos nos mantendremos al margen, en el sentido que no vamos a postular como una doctrina que sea capaz de dar respuesta a toda la problemática del hombre; pero hay que reconocer que ello tiene un cierto sentido lógico" (17).

 

            6.3. Dios

 

            Frente a la pregunta por Dios se repite el esquema de las respuestas a los otros temas religiosos: para algunos, Dios es una invención humana, un prejuicio que se ha de superar con el tiempo, porque no existe (párrafos a, b, c); otros, en cambio, se hacen preguntas acerca de la posibilidad de aceptar su existencia, su revelación, su intervención en la historia (párrafos d, e, f); algunos, finalmente, manifiestan su indecisión ante Dios (g).

 

            a) Dios es producido por la necesidad humana

 

                "Creo que Dios es una realidad del hombre, una necesidad del hombre. En la historia hay particularidades, hay religión de esto, de lo otro, ídolos tantos y cuantos, los muchos dioses de los griegos: es la fantasía del hombre. No quiero empezar a imaginarme a Dios, porque ahí empezaría a inventar religiones, a atribuirle cuestiones humanas a Dios. Históricamente lo que ha pasado con Dios es que son los hombres los que lo inventan" (5).

 

            Cuando los entrevistados responden que Dios es producido por una necesidad humana, se perciben tres matices diversos: el ser humano necesita a Dios para dar explicación a lo que no logra explicarse con su inteligencia; o para resolver los problemas de la existencia, que su limitación y debilidad le impiden resolver por sí mismo; o para satisfacer sus necesidades místicas de misterio. Un entrevistado hace de Dios el producto de las necesidades ideológicas de la Iglesia.

            -Dios es necesario para explicarse lo inexplicable:

                "Aunque no creo en Dios, te puedo decir que el hombre siempre ha buscado atribuir los fenómenos que no se explica a un Ser superior, que lo denomina de diferentes maneras, por ejemplo Dios" (13).

                "Dios ha ocupado un lugar importante y permanente en la historia. Los pueblos primitivos se lo planteaban ante la incapacidad de explicarse muchos fenómenos naturales. Pero eso no implica que tenga que ocupar un lugar en todos los hombres, pues para mí no existe" (4).

                "No creo que Dios ocupe algún lugar en la historia. Todo depende del mismo hombre, no necesita a Dios para realizarse o dar plenitud a su quehacer. Lo encuentro hasta absurdo, buscar arriba del hombre lo que está frente a él mismo. Dios ha sido la gran idea loca que han metido en la historia de la humanidad, quizá desde qué tiempos, para explicar aquello para lo que no se encuentra solución a simple vista. Me parece que basta que el hombre accione en toda su potencia su racionalidad, su inteligencia, su hambre de sabiduría. No hay ninguna intervención de Dios en la historia. Dios tiene su propio mundo donde meterse y ocuparse. Mi abuela dice que está en el cielo, pero por más que miro hacia arriba no lo encuentro" (12).

                "Algunas veces Dios es como el opio del pueblo, pues la gente recurre a Él sólo cuando tiene problemas. Aunque hay gente que da un buen testimonio de su fe. El hombre por su razón no se explica cómo existe y quién creó el mundo; así, tiene que pensar en un ser superior, Dios. El avance de la ciencia hará que cada día la gente crea menos en Dios" (14).

            -Dios es necesario para resolver los problemas de la vida:

                "El hombre muchas veces se siente limitado; descubrimos nuestros defectos, existe una aspiración a algo más alto. Frente a esta experiencia de limitación, algunas personas tratan de calmar su angustia. Por esto buscan a 'alguien' que les dé esa esperanza que por sí mismos no pueden alcanzar" (29).

                "A Dios lo determinas con tus estructuras mentales de hombre, de ahí todo el juego de correspondencia entre Dios y el hombre. Si uno hace el esfuerzo mental por buscar algo trascendente, es porque no están satisfechas las necesidades básicas; por ejemplo, si alguien no es amado, va a necesitar un sentido a través de la razón de su existencia, a través de ese ser trascendente que lo ama; pero si se siente amado de otra persona, estraá satisfecho y no necesitará de este ser: si ya está satisfecho, no va a hacer el esfuerzo mental para tratar de buscar una respuesta que ya tiene" (17).

                "Dios es fundamental para que el hombre pueda mantenerse en vida, ya que necesita, por su misma debilidad, alguien en quien apoyarse, a quien echarle la culpa de todos sus errores y caídas, de sus debilidades. Cuando uno tiene un dolor, necesita recurrir a algo para tener algún consuelo, aunque sea algo mudo. En este sentido es fundamental la existencia de Dios; si no existiese, el mundo se destruiría. Si el hombre siente la necesidad de ese ser abstracto es para referirle toda su debilidad, sin  esforzarse él mismo por salir adelante, ya que siente que Dios se lo ha mandado y viene el conformismo. Ahora bien, esa conformidad es necesaria, ya que si no se diera, el hombre se volvería loco al darse cuenta de todos los errores que comete a diario. En parte, se trata de una debilidad del hombre, es como no tener fuerza para afirmarse en sí mismo. Ante sus carencias, el hombre trata de obtener la fuerza de un ser superior a él, etéreo, intocable. Me da la impresión de que el mecanismo que impulsa al hombre hacia Dios es un sentimiento de inferioridad. Así, la existencia de Dios es una construcción exclusivamente del hombre, un mito que nos hacemos para regir nuestras vidas en función de él. Yo nací y voy a morir; es un proceso que tengo que tratar de hacerlo lo mejor posible; pero esto se acabará y va a terminar todo" (15).

            -Dios es necesario para satisfacer las necesidades de misterio:

                "El hombre necesita siempre una dosis de misterio" (9).

                "A Dios lo veo con solución para todo, que conoce todo. Está claro que el hombre tiene que ser un poco místico, pero hay formas muy mecánicas de llegar a Dios y, en el fondo, a través de ellas no se llega" (10).

                "Aunque para mí Dios no existe, creo que ocupa un lugar importantísimo: el ser humano necesita creer en algo, necesita una fuente de respiro. De este modo, la presencia de Dios influye de manera notable en todos los ámbitos: culturales, políticos, económicos y sociales. Un hecho indiscutible es que la mayoría del continente latinoamericano es creyente" (3).

            -Dios es producido por las necesidades ideológicas de la Iglesia:

                "Dios es una imagen física, un concepto creado por la Iglesia, para ejemplificar su doctrina opresora. Es un Ser superior que mira desde arriba, que castiga con el infierno, que desde las nubes busca control; pero Él no tiene la culpa, sino la Iglesia que lo hizo así. Es una ayuda externa que busca el hombre y de la cual se aprovechan algunas mentes opresoras y dictatoriales" (23).

 

            b) Dios es un prejuicio que se ha de superar con el tiempo

 

                "Hay un prejuicio favorable a Dios, que creo se va a ir superando con el tiempo (8).

                "No creo en Dios, pero veo que es necesario en la cultura tal como está; es comprensible y explicable en este contexto. Después que se supere esta etapa, si es que se supera, no puedo decir que va a ser necesario que Dios exista: va a ser un problema que se va a tener en ese contexto" (1).

 

            c) Razones de la no existencia de Dios

 

            Entre los que niegan la existencia de Dios predomina el argumento tomado de la injusticia del mundo; pero se dan también razones culturales y argumentos propiamente intelectuales o racionales.

            -El argumento de la injusticia del mundo:

                "Si Dios existe y Cristo es su Hijo, ¿qué pasó con su mensaje? Llevamos dos mil años y no pasa nada, no somos mejores, se viven las mismas injusticias. Dios se equivocó, ¿por qué no intervino definitivamente y arregló todo esto? Es cierto que el hombre es libre, pero Él es Dios, se supone" (27).

                "Creo que el cristianismo no tiene ningún valor. Si Dios existe, ¿por qué se está viviendo todo esto? ¿por qué el Dios cristiano no nos ayuda de una vez por todas? ¿por qué su hijo Jesucristo no nos salva del hambre, de la miseria, de la pobreza?" (25).

                "Dios no ocupa un lugar privilegiado en la historia, porque si fuese así no tendríamos pobreza, muertes inexplicables, injusticias, abusos; si se partiera de una estructuración desde Dios, el mundo sería más justo, no habría tanta guerra, no habría necesidad de la ley del más fuerte; porque tienes que colocar la ley del más fuerte donde impera la tiniebla, para poder construir una estructura de acuerdo a tu planteamiento político y social" (17).

                "El mundo está demasiado mal para que exista un Dios; hay demasiada injusticia, por lo cual no puede haber un Dios al que le gusta que lo adoren, habiendo por otro lado tanto sufrimiento: niños que mueren de hambre, personas cuya dignidad es pasada a llevar. Prefiero negar la existencia de Dios, ya que así es más justificable. Si Dios tiene la posibilidad de revelarse, ¿por qué no va a tener también la de acabar con tanto sufrimiento de las personas que Él rige?" (15).

            -El argumento cultural:

                "Creo que hoy la figura de Dios está pasando de moda; la gente busca algo más real, no una cuestión que te la han inculcado y que no tiene base; la gente necesita algo que pueda verlo y decir: esto tiene base, tiene fundamento" (18).

            -Los argumentos propiamente racionales:

                "Dios no ocupa ningún lugar en la historia, porque no creo en Dios. No hay ninguna prueba que me dé su existencia necesaria. No veo nada que me diga, me indique que existe. No hay pruebas" (6).

                "Creo que podrías conjugar la idea de algo o alguien que es principio de todo, pero como idea, en el sentido de que si tenemos un mundo con técnica y respuestas ciertas a las problemáticas y cuestionamientos, también te llenará tus búsquedas de respuestas de más allá y te va a ir dejando satisfecho, porque es producto de uno mismo, de la búsqueda de uno mismo, de la propia estructuración mental, social y sicológica" (17).

 

            d) Se acepta (con matices) la existencia de Dios

 

            Algunos entrevistados creen en Dios, pero no en las religiones. Otros piensan que es posible creer en un ser superior, pero lejano y difícilmente captable. Finalmente, algunos reconocen que acuden a Dios en situaciones extremas.

            -Los que creen en Dios, pero no creen en las religiones:

                "Dios es el principio y el fin de todo. Él, sin banda o con ella, manda" (16).

                "No creo en las religiones. Pienso en Dios como fuerza superior, como energía superior" (9).

            -Los que creen en un Ser Superior lejano:

                "Yo veo a Dios con mucho respeto. Sé que hay un 'algo' en el hombre muy grande, que algo tiene que haber. Hay que buscar ahí, qué pasa en el hombre" (5).

                "A Dios no se llega por conocimiento, Dios es una cuestión de fe: se cree en Él o no. Yo creo en Dios" (9).

                "El fin del hombre es el perfeccionamiento en función de Dios. Pero Dios no está cerca, estamos súper solos, como que falta la mano de Dios. Él está siempre arriba. A veces está cuando tú sientes cariño, o cuando las cosas van bien, o lo sientes en la naturaleza, en el arcoiris. Pero está rodeando al hombre, afuera" (10).

                "La vida es una energía; la fuente de esta energía es un Ser superior, que yo sé que existe, pero que no lo puedo ver. Este Ser superior en el cual creo es único; pero cada uno le da diferentes nombres, según su manera de creer" (26).

                "Hay gente que ve que existe un Dios; pero no como un papá que con una varita mágica creó el mundo, sino que piensan que Dios puede traducirse en una fuerza, en una energía que hizo que se crearan las cosas y que hubiera una evolución del mundo. Pienso que podemos llegar a tener un conocimiento racional de Dios, de dónde salimos, etc." (18).

                "La religión es diversa, porque el hombre la está creando: no hay la religión o el Dios, sino que hay tantos dioses como hombres aprecian a ese dios" (11).

                "No me costaría pensar en alguien, pero no lo puedo comprender" (20).

                "Aunque me cuesta comprenderlo, me atrevo a decirte que creo que hay algo que existe, un ser trascendente, incluso podemos hablar de Dios. Pero creo que la vida es asunto de nosotros. Creo que hay un punto de encuentro entre las doctrinas religiosas, la filosofía y las ideologías, que tiene relación con el estado armónico. En el fondo, todos los caminos conducen a Dios. Pero no sé si ese Dios es un ser afuera, un tipo que nos creó; es simplemente una plenitud" (24).

            Un entrevistador pregunta: ¿Crees en algo, aparte de lo que vemos o tocamos? Los entrevistados responden:

                "Sí, no sé, en una fuerza superior que organiza el universo" (19).

                "Posiblemente, puede ser o no" (20).

            -Los que acuden a Dios en situaciones extremas:

                "Dios tiene injerencia en mi vida; en las situaciones límite, ya sea angustias o alegrías extremas, de mi corazón brota una palabra que quiere llenarlo todo, esa palabra es Dios. Mis deseos de infinitud y trascendencia los satisfago a través del acto de crear: cuando uno crea está trascendiendo, cuando creas eres un poco Dios" (22).

                "Cuando tengo problemas tiendo a pedir ayuda o a desahogarme en alguien que no es precisamente alguien como yo" (19).

 

            e) Acerca de la (posible) revelación de Dios

 

                "Eso es lo que yo pregunto: ¿por qué Dios no se revela? Si existiera, yo creo que lo haría. Tendría que revelarse como Dios, y no como persona, como hombre; como Omnipotente, porque es más que yo, Él que es tan grande. Y eso no lo veo. A lo mejor, porque me sobrepasa y no tengo capacidad para verlo" (5).

                "Me parece que no puede haber una revelación, o sea que Dios gratuitamente se manifieste al hombre; pero, si alguna vez sucede algo así, estaría abierta a decir: bueno, puede ser; pero, sinceramente, no me parece, es como hablar de magia. Si Dios realmente existiera, debería manifestarse de una forma en que todos lo entendiéramos; porque, si se dice que no hay palabras humanas para explicarlo, me parece injusto que no podamos entenderlo, pues si Él tiene tanto poder, ¿por qué no es capaz de simplificar su conocimiento, de modo que todos lo podamos entender y creamos? ¿Por qué ese misterio? Eso es lo que no entiendo. No me parece que se revele no más, sino que tiene que ser de una manera que todos podamos entenderlo, de una manera racional, a nuestra medida" (18).

                "Que Dios se comunique con el hombre, no lo concibo. Las personas que sienten que Dios se les revela son las que se aíslan un poco de la realidad y con su facultad de abstracción sienten que es Dios que se les está entregando; pero es una comunicación interna, son todas sus vivencias interiores, sus proyecciones inconscientes que irrumpen y salen al exterior; si esas proyecciones son positivas, Dios les dice cosas positivas; si son negativas, negativas. Pero son ellos los que se esfuerzan por hacer hablar a Dios" (15).

 

            f) Acerca de la (posible) intervención de Dios en la historia

 

            Las respuestas acerca de una posible intervención de Dios en la historia se pueden agrupar en tres rubros: los que rechazan esa posibilidad, los que dudan de ella -sobre todo por el dolor y la injusticia de este mundo-, y los que la aceptan, pero mediatizada por los que creen en Dios.

            -La intervención de Dios en la historia no es posible:

                "Si realmente existiese Dios y si realmente fuera infinitamente misericordioso, amoroso, etc., no veo por qué pensar la posibilidad de que se revele gratuitamente. Pero si me hablas de la idea de Dios, es imposible que se revele, porque es una construcción que uno hace para dar respuesta a las problemáticas" (17).

            -El dolor y la injusticia de este mundo hacen dudar de la intervención de Dios en la historia:

                "Siempre me he preguntado por qué Dios no participa más directamente como ente superior en la vida de los hombres. Me gustaría que lo hiciera. Pero pienso que no debe poder ser, porque no concibo que, pudiendo participar, no lo haga, y permita tanta maldad y miseria. Si Dios fuera omnipotente, participaría de nuestra historia y nos daría otra vida, impidiendo tanta maldad y tanta crueldad. O no puede, o quizá sea una prueba para nuestra superación" (9).

                "Frente al sufrimiento del hombre Dios debe sentir angustia, pero siento que Él lo hace sufrir, porque tiene que probar al hombre constantemente, para ver si éste le responde o no" (16).

                "Yo no sé si Dios cuenta o no en la historia. Las cosas caminan igual con Él o sin Él" (29).

            -Dios interviene en la historia, pero a través de los que creen en Él:

                "Dios ha jugado un papel preponderante en la historia, pero no podría decir que ha sido realmente Dios mismo el que ha jugado ese papel. Han sido los hombres los que han tomado el nombre de Dios. Más bien la idea de Dios ha sido preponderante, pero no con una intervención directa de Dios. Pienso que la única intervención directa ha sido la venida de Jesús" (9).

                "El Dios de los cristianos o los católicos ha influido mucho en nuestra historia. Las concepciones de su fe han influido en lo político, lo económico, en las estructuras de la sociedad y, por último, en el mismo hombre" (13).

                "Dios ha influido en la historia en la mente de los hombres. Ha sido una influencia mediatizada por los mismos hombres. El desarrollo del mundo occidental está determinado por el acercamiento o alejamiento de Dios, por ejemplo en la Edad Media y Renacimiento" (19).

 

            g) Indecisión ante Dios

 

            Hay finalmente algunos entrevistados que manifiestan cierta indecisión ante Dios:

                "Dios ocupa un lugar importantísimo en la historia. Pero no sé cuán sincero sea eso. No sé si existe un Dios" (20).

                "No tengo clara una noción de Dios. Ya no creo en la que tenía como católica, la de un Dios juez. Tengo alguna intuición del más allá, pero nada definido. No creo que Dios sea un ser, una persona. Dios es como lo insólito de la vida, lo inexplicable, el misterio. En estos momentos hay en mi vida una gran carencia respecto a la satisfacción de mis deseos de infinitud y trascendencia; no sé cómo dar respuesta a mi deseo, lo que me puede llevar a perder el sentido de mi vida. Pero no creo que esto sea argumento para justificar la creencia en Dios. En todo caso, he ido satisfaciendo mis deseos de trascendencia descubriendo mi propia afectividad y relacionándome con los otros en una amistad profunda. Desde lo cotidiano busco trascender hacia los otros" (21).

 

            6.4. Jesús

 

            Aunque algún entrevistado afirma que la fe en Jesús es un producto humano que satisface necesidades humanas, la mayoría aprecia a Jesús como persona humana, pero negando explícitamente su divinidad.

 

            a) La fe en Jesús satisface necesidades humanas

 

                "En la adolescencia está esta necesidad de uno de tratar de darle sentido a su existencia; ahí aparece el Jesús amigo que te escucha siempre, el Jesús comprometido con la realidad, pero también un poco distante" (7).

 

            b) Jesús, apreciado como ser humano

 

                "Jesús de Nazaret es un hombre extraordinario, distinto de los otros. Pudo superar muchas cuestiones y ser creativo frente a su condición humana. Un líder. Y además que enseñó y se preocupó mucho de los demás. Socialmente hizo mucho y eso fue rico. Lo veo como un hombre casi perfecto" (5).

                "Jesús fue un hombre que estaba predestinado a ser un líder en su época. Logró sobresalir gracias a su inteligencia superior; y por todas las condiciones que tenía y su alta preocupación social, estaba destinado a tener un  final como el que tuvo" (15).

                "Jesús fue en su tiempo un hombre extraordinario, un hombre que cambió todo un sistema político de vida, que vino con nuevas normas, que se dio a respetar entre los suyos. Fue un hombre muy consecuente con lo que decía" (25).

                "Jesús fue una persona espectacular. No sé cuán efectivo será lo de los milagros; yo creo que fue un hombre común, que procuró un cambio en la sociedad, que trabajó por el desarrollo de la persona, por los pobres, por la liberación del hombre, y que entregó su propia vida por su causa: es un ejemplo de lucha, un ejemplo universal" (23).

                "Mi primera impresión ante Jesús es la sensación de enfrentarme a un líder político revolucionario. Fue uno de los tantos profetas del pueblo de Israel, que murió en la cruz igual que tantos otros israelitas" (19).

                "Creo en su labor práctica: marcó un hito, dejó una huella innegable. Yo trato de seguir su práctica, es excelente como forma de vida" (20).

                "He tenido varias concepciones de Jesús de Nazaret. De repente, con el paso del tiuempo, me doy cuenta de que fue un hombre no más, con hartas características que lo hicieron bien especial" (7).

                "Yo veo a Jesús como hombre, súper cercano a Dios; y ese hombre me ayuda a entenderme como hombre. Jesús pasó por lo que pasamos todos, y eso me ayuda a responder a lo que soy, a lo que hago. Jesús es para mí una huella a pisar, es el camino; porque cuando tú sabes que tienes razón actúas con más fuerza y te entregas a los demás" (10).

                "Como personaje histórico no se puede dudar de la importancia de Jesús, de su vitalidad para transmitir vida. No niego que existió históricamente, que trajo un mensaje de paz y de amor; además que muchos lo siguieron y marcó un hito" (14).

                "Para mí Jesús es una persona con una armonía muy grande. En él se da un  equilibrio entre su contemplación, su acción, su pobreza y su moral. Es una figura que me provoca mucha atracción. Es como un maestro que me puede enseñar, pero así como me pueden enseñar Buda o Tao o incluso el Don Juan de Castaneda. Creo que hay seres que han sido iluminados, dentro de los cuales también están Mozart y Shakespeare. Ellos tienen las claves, han rasguñado algo más allá de lo que uno es capaz de percibir" (24).

                "Jesús de Nazaret es un acontecimiento histórico indiscutible. A mí me provoca mucho respeto saber que un hombre es capaz de llevar a tal grado sus valores, su compromiso, su creencia, que llega a dar incluso su propia vida. Para mí es un gran hombre, para los cristianos es Dios" (3).

                "Jesús para mí es una gran figura histórica, un hombre admirable, pero no es Dios ni resucitó. Admiro en él la fuerza de su palabra: golpea de manera muy fuerte, es un hombre que impulsa cambios radicales" (4).

                "Creo en Cristo sólo en tanto persona, no en tanto que divino. Es una persona especial, dotada de características diferentes, superiores al resto de la gente. Por eso llamó la atención, Por eso hizo todo lo que hizo. No creo que haya sido Dios quien lo mandó. Puede haber sido con el poder de su mente, el desarrollo de su mente, con su potencia sicológica, que hizo todo lo que hizo" (6).

                "Jesús, como Moisés o Mahoma, han sido grandes inspirados. No creo que Jesús sea Dios; es un hombre como cualquiera, puede ser un profeta, que trajo un mensaje de paz y de amor, en el cual se funda toda una civilización" (13).

                "Jesús es un personaje histórico bastante carismático y que ha influido bastante en el mundo, hasta los días de hoy. Concuerdo con él en todos sus planteamientos de solidaridad. Hay dos personajes que creo que han influido tremendamente en la historia: Jesús y Marx. Aunque parezca contradictorio, uno era creyente y el otro no creyente" (8).

                "Si tuviera que definirme, me definiría como filosóficamente cristiano. Cristo es como un ejemplo histórico de encuentro del hombre. Para los creyentes es Dios hecho hombre; yo lo veo sólo como hombre y como el gran ejemplo que marca al mundo y la sociedad contemporánea" (11).

                "He escuchado hablar de Jesús, pero no lo entiendo. Encuentro raro que se diga de él que es hijo de Dios. ¿Para qué necesita Dios un hijo para darse a conocer a los hombres? Por lo que he escuchado, me parece que Jesús fue un gran hombre, que marcó una época y que los que lo seguían divulgaron su persona hasta nuestros días" (12).

                "A Jesús lo veo como una persona 'chora', que supo postular sus ideales y que murió por ellos" (17).

           

            c) Se niega, con razones, la divinidad de Jesús

 

                "Pienso que la única intervención directa de Dios ha sido la venida de Jesús" (9).

                "Que Jesús se haya encarnado luego de salir de Dios, no lo entiendo. Que la Virgen haya permanecido virgen, como mujer me parece inconcebible" (15).

                "A Jesús lo veo sólo como hombre" (25).

                "Dudo que Jesús sea Hijo de Dios, no creo" (20).

                "Si hablamos de Jesús como hijo de Dios y que nació de la virgen María por el poder del Espíritu Santo, eso no lo creo, porque no creo en Dios" (14).

                "No sé realmente si hablar de hijo de Dios. A veces creo que sí, a veces que no" (24).

                "Pienso que Jesús se daba a sí mismo un origen divino, por el temor de que, al ver la gente el poder que tenía, lo consideraran malo, nacido del pecado, nacido del demonio" (6).

                "Se cae en el error de divinizar a Jesús, se cae en la idealización de la persona, lo que puede opacar su mensaje" (13).

                "Jesús como hijo de Dios no me convence, porque no tengo la fe" (11).

                "No logro ver en qué radicaría su utilidad si hubiese sido hijo de Dios como dicen que fue" (12).

                "No creo en Cristo como hijo de Dios, no creo en la encarnación, en la virginidad de María, en la resurrección ni tampoco en la otra vida. Tengo dudas, pero para aceptar que la encarnación o la resurrección pudieron ocurrir necesito pruebas: soy demasiado racionalista" (27).

                "No creo que Cristo sea manifestación de Dios. Si existe Dios, nosotros también somos manifestación de Él, y el árbol también podría ser, porque somos creaciones. Por eso, Cristo no era más especial que este pasto en el orden de la creación, y yo necesito más que eso" (5).

 

            d) Jesús fracasó en su misión divina

 

                "Jesús fue enviado a redimir a los hombres y falló porque no los pudo redimir. No pudo evitar que el hombre siguiera siendo tan malo o más malo de lo que era antes que él viniera. Pudo redimir a unos pocos, pero se supone que él venía a redimir a todos y no lo logró. Yo espero que vuelva nuevamente y que logre ahora, en su segunda venida, su objetivo. No me agrada el símbolo de la cruz, porque es un instrumento de tortura, y para mí es algo macabro" (9).

 

            6.5. La Iglesia

 

            Los entrevistados ven a la Iglesia como mera institución humana y subrayan sus rasgos negativos y su carácter internamente complejo, en el sentido de que hay en ella de todo, buenos y malos; se señala explícitamente la contraposición entre Iglesia jerárquica e Iglesia popular. Algunos, sin embargo, reconocen que hace bien, que presta alguna utilidad a la sociedad y a las personas. Un entrevistado plantea una crítica como viniendo desde el otro lado: la Iglesia, desde el Vaticano II, ha decaído, pues ha perdido su misterio y se ha secularizado.

 

            a) La Iglesia no es más que una institución humana

 

                "Lo referente a Dios se puede tomar de dos formas: desde el punto de vista de la religión y desde el de la fe. La religión en la sociedad contemporánea es una institución humana. Está determinada política, económica, social y sicológicamente. Tiene mucho más de humano que de religioso; es una institución más como podría ser cualquier otra" (11).

                "(...) otro elemento negativo es la estructura de la Iglesia católica. La fe católica propiamente no tiene nada de negativo" (19).

                "La fe cristiana tiene muchas cosas positivas que comparto; lo que la Iglesia predica me parece bien" (20).

                "Reconozco la influencia e importancia de la Iglesia en América Latina" (28).

                "Me carga la Iglesia misma como institución" (5).

 

            b) La Iglesia es opresora

 

                "Tuve la típica formación de colegio de monjas, donde Jesús y Dios están en otro nivel: son más unas fuerzas represivas que te condicionan en tu actuar" (7).

                "Cuando estuve en la Iglesia aprendí muchas cosas: que había que ir a Misa los domingos, aprenderse los diez mandamientos; y eso era ser cristiano, y me quedé con eso" (18).

                "Pensar en Dios me violenta por mi tradición católica de una fe muy alienante" (21).

                "En general, creo que el cristianismo ha frenado el desarrollo de las personas. A través del moralismo, de los castigos, ha infundido miedo. En muchos de los líderes de la Iglesia se ha visto, más que personas de futuro, guardianes de un pasado, de unas tradiciones; con esta actitud han limitado el crecimiento y el descubrimiento de cosas nuevas" (29).

                "Alguien decía que la religión era el opio de los pueblos. Ahora lo es; lo he podido comprobar cuando estudiaba en un colegio de curas y frecuentaba la parroquia: amigos míos que van a Misa son las personas más insensatas, más locas y huecas que puede haber, personas completamente alienadas, despersonalizadas. Si uno no es creyente o no tiene una religión fija, pero hace el bien, eso basta para que sea una persona sana, pura" (25).

                "En otras épocas o momentos históricos, la Iglesia ha sido instrumento de dominación" (4).

                "Respeto las prácticas religiosas, aunque tengo la impresión de que muchas veces coartan la expresión religiosa de un individuo, porque están demasiado estructuradas de antemano" (22).

                "Para mí Dios era una persona, un amigo con el cual conversaba, como lo estoy haciendo contigo. Pero a la vez tenía una concepción del Dios castigador, la religión era algo sólo de prohibiciones (no hacer esto o aquello); todo era pecado; si faltaba a Misa me consideraba pecadora. Tenía temor, todo era un cumplir cosas que no entendía" (27).

                "La Iglesia fue muy poderosa por más de 19 siglos. No me cabe duda que ha manejado a su libre albedrío las enseñanzas de Jesús: hay muchas cosas que estoy seguro que Él no predicó ni enseñó" (9).

                "Para mí el problema radica en el dogma, con el cual estoy en desacuerdo. La Iglesia con el dogma quiso mantener un poder político, por eso divinizó a Jesús. Yo creo en un universo dinámico, no creo en Dios. La Iglesia le quita al hombre la posibilidad de participar en un universo dinámico, porque la imagen de Cristo está de por medio como lo inalcanzable, lo inevitable, lo que legisla por encima de nosotros: así, el hombre no puede desenvolverse totalmente con todas sus potencialidades" (13).

 

            c) La Iglesia tiene de todo dentro de sí

 

                "En gran parte no creo, porque no veo en los cristianos la vivencia correcta de lo anunciado por Cristo; los sacerdotes hablan un lenguaje que nadie entiende, realizan signos que ya no significan (nunca logré entender la vida litúrgica, todo era un cumplir); descubro un individualismo y una falta de relaciones humanas en las celebraciones, que se contradice con lo que deberían ser: una comunidad que alaba a Dios. Los cristianos no viven lo que predican. No basta esperar el juicio final para que se les haga justicia a los que sufren: eso nunca lo comprendí, por qué proyectar todas las esperanzas para la vida eterna, el cielo; yo vivo en este mundo, con sus problemas, aquí debo construir mi vida, éste es mi trabajo" (27).

                "La mayoría de los creyentes son como monos que repiten lo que han aprendido" (20).

                "La fe cristiana es la única que conozco. Descubro en ella muchas cosas buenas, sobre todo porque pone en el hombre la responsabilidad de su futuro. Cristo les dice a los hombres que ellos son los que, de alguna manera, tienen que empezar a ser como dioses. Es como decirle al hombre: no sacas nada con seguir adorando y esperando favores de arriba. No. Eres tú el que tienes que empezar" (5).

                "Supongo que, debido al ambiente familiar en que me crié, tengo una imagen de la fe religiosa muy garcialorquiana: una imagen de vírgenes, de curas, de rosarios, de mi abuela vestida de negro toda su vida. En esa imagen hay algo que siempre me produjo una especie de contracción física por contraposición a una sensación de apertura y luminosidad. Me abruman los espacios cerrados o estar en medio de mucha gente. Tengo predilección por la luz y la vista espaciosa" (24).

                "La fe de un miembro del Opus Dei es muy distinta de la de un humilde franciscano que vive en la población La Victoria. Mientras uno presenta un dios al más puro estilo hebreo, drástico, al cual nada se le puede decir, el otro busca un Dios de amor que busca soluciones prácticas. Una fe dice que se mantenga el status quo y la otra que esto puede cambiar" (2).

                "El testimonio de vida de algunos cristianos me cuestiona, como por ejemplo el Padre Hurtado y otros como el Cardenal Raúl Silva, que viven su fe al máximo. La fe de algunas personas es alienante, viven por allá muy en lo alto. Otras personas no dan un testimonio de la fe que dicen profesar. Los católicos predican pero no practican" (14).

                "El cristianismo es contradictorio. Por un lado veo a los cristianos alegres, iguales a los demás, que van a la población y no les da lata tener que darle la mano a piojosos, delincuentes, prostitutas, como lo hacía Jesús. Es una religiosidad alegre, muy distinta a la de esta Universidad <la UC>, donde te hacen ponerte de pie porque el Prof. reza al comenzar la clase, sin importarle si hay ateos, protestantes, musulmanes. Por un lado encontramos gente capaz de dar la vida, como Arnulfo Romero; escuchamos teología tan avanzada como la de Frei Beto y Boff; por otro escuchamos las aberraciones de Hasbún" (2).

                "Critico a los que profesan la fe cristiana, porque no dan un verdadero testimonio de su fe. No entiendo la búsqueda de seguir a Jesús, si es sólo un imitarlo: lo veo como un anacronismo. Por ejemplo, tratar de vivir la pobreza como la vivió Jesús lo encuentro desubicado, viendo que el mundo necesita de los avances tecnológicos. Para vivir hoy se necesita ir al ritmo de lo moderno" (13).

                "Intuyo, por gente excepcional que conozco en la Iglesia, que hay algo más profundo en la fe cristiana, que no todo puede ser alienación; debe haber una espiritualidad más profunda, a la que no logro acceder" (21).

                "Los cristianos no pueden ser encerrados en un cuerpo único. Hay para todos los gustos. Algunos cristianos son consecuentes con lo que dicen creer. Otros, en cambio, tienen en sus creencias una justificación a su propia incapacidad, usan la religión para sus intereses" (30).

                "Hay distintas formas de ser cristiano: hay un cristianismo sociológico, en que se es cristiano porque estamos en una sociedad que se declara cristiana. Este cristianismo es alienante, pues es acrítico, al no permitir reflexionar ni cuestionar nada. Pero hay un nuevo cristianismo, que se plantea más crítico de la sociedad; no me refiero a los intelectuales sino a un vivir de manera diferente: estoy pensando en las comunidades eclesiales de base, que reflexionan su fe a partir de su contexto. Es un cristianismo más creativo" (1).

                "Hay un problema que se da en la gente católica, sobre todo en la más beata: es la falta de tolerancia hacia la gente que no es creyente" (8).

                "Un defecto o antivalor de la fe cristiana es el juego que juega muchas veces en la sociedad contemporánea para impedir los cambios; no digo que los curas no se deban meter en política, se deben meter. Pero muchas veces son un freno del movimiento social. La Iglesia muchas veces está como a la zaga. Así lo demuestra la historia de la misma Iglesia: ha tenido vuelcos gigantescos (la Inquisición, la Iglesia de Argentina que no dijo nada ante la realidad de miles de desaparecidos; la Iglesia chilena es una excepción). Además veo muchas formas de expresar el cristianismo: la religión es diversa, porque el hombre la está creando, no hay la religión o el Dios" (11).

                "Tengo muchos amigos y amigas que se dicen cristianos. Mi pololo es cristiano católico; con él no tengo problemas, nunca hablamos de esto. No sé si será por ser cristianos, pero tienen algunos miedos que para mí son absurdos: "tengo que portarme bien porque Dios me ve" o "debo ser bueno para llegar al cielo". Tienen un sentido social muy especial,  se sienten solidarios cuando ven necesidades en los demás; pero el resto del tiempo se olvidan que hay pobres y necesitados. Los veo muy sumisos a la autoridad de los curas o de los jefes que tienen, les falta iniciativa para realizar algo. Celebran los domingos la Misa, veo que otros cristianos gritan por las calles la palabra de Dios, pero no veo que el mundo cambie o que la sociedad sea mejor con tanta palabra que ellos dicen. No sé si sean tan fieles seguidores de su líder. Pero nunca me han pedido que acepte sus ideas o participe en sus reuniones" (12).

           

            d) Iglesia jerárquica / Iglesia popular

 

                "Hay dos tipos de religión: católica popular y católica jerárquica. La Iglesia jerárquica representa a los sectores poderosos, pudientes; en este tipo de religión se justifica un claro sistema de opresión. Esto se vio desde la llegada de los españoles a América; por ejemplo, la represión de los cultos indígenas. En el otro extremo está la Iglesia popular, que respeto mucho, porque aquí la gente del pueblo busca el sentido de la vida en el presente, quiere aportar a la sociedad, persigue la igualdad acá, y tiene conciencia de que la opresión es producto de la diferencia de clases" (23).

                "Veo que hay parte de la jerarquía que ha asumido valientemente el dolor y sufrimiento del pueblo. Pero también me resulta incomprensible la presencia de la parte castrense, que ha estado comprometida profundamente con las atrocidades de este gobierno. También hay pastores que han hecho la vista gorda frente a las injusticias" (4).

                "De parte de la jerarquía veo ciertas incomprensiones hacia el mundo popular. Creo que en esto influye mucho la procedencia social de los individuos que componen la Iglesia, puesto que éstos, antes de pertenecer a la Iglesia, pertenecen a una determinada clase y luego siguen manteniendo sus compromisos con su clase de origen" (3).

 

            e) Valores de la Iglesia para este mundo

 

                "Valoro en la Iglesia la lucha intransigente que ha dado por poner en alto la dignidad del hombre. También su gran respeto por la vida y por elevar la dignidad de los pobres" (3).

                "La Iglesia ha asumido el compromiso de levantar y construir este país" (4).

                "Encuentro rescatable en la religión católica la ayuda que le presta a las personas; hay gente que no podría vivir sin su existencia; realmente las salva de muchas cosas. Por otra parte, los hombres que trabajan para ella se dedican exclusivamente a su perdurabilidad, siendo la Iglesia más importante que las personas mismas" (15).

                "Los valores que veo en la Iglesia son la hermandad del hombre, la igualdad" (11).

                "La fe cristiana juega un papel importante, en especial lo refiero a América Latina, donde la Iglesia está presente en lo que va viviendo el hombre, dando canales de participación, compartiendo la experiencia de estos hombres y entregando valores que ayuden a las personas a desarrollarse en este mundo. En Europa esta fe la veo más tradicional, menos viva y más espiritual o menos concreta. Con esto no digo que la vivencia de la fe aquí en América Latina no sea tradicional, pero la veo con más vida, buscando desenvolverse en el medio o la cultura de cada país; la fe cristiana trata aquí de asumir los desafíos del tiempo moderno, pero es inevitable el peso de la tradición" (13).

                "La fe cristiana tiene el mismo significado que cualquier otra religión. Actualmente está más cerca de nosotros. Lo positivo es su contenido social, todo mediatizado por la existencia humana. Es positivo el esfuerzo por estrechar lazos entre los hombres. Por otro lado, comparte todo lo negatico con las otras religiones: la irracionalidad" (19).

 

            f) Su decadencia a partir del Concilio Vaticano II

 

                "El hombre necesita siempre una dosis de misterio, y la Iglesia empezó a perder adeptos porque dejó de lado lo misterioso que atraía a mucha gente. El Concilio Vaticano II fue negativo absolutamente por eso: perdió el misterio que la Iglesia tenía. Antes la Misa era distinta, verdaderamente espiritual; hoy en día no es así. Había una sensación de más espiritualidad, llegaba más que hoy aunque no se entendiera; hoy se entiende, pero no llega. Lo positivo hoy es lo que hace el Papa de volver a lo tradicional. El modernismo en la práctica no ha tenido nada positivo y la Iglesia está politizada. Los sacerdotes no se dedican a la parte social en forma espiritual sino en forma política" (9).

 

            7. Procesos personales de pérdida de la fe

 

            Muchos de los entrevistados reconocen que fueron creyentes católicos y que luego perdieron la fe. Las razones son diversas.

 

            7.1. Preguntas personales no respondidas en la adolescencia

 

                "Estudié en un colegio católico donde me obligaban a ir a Misa. Para peor, los curas no predicaban con el ejemplo. Me amenazaban con echarme del colegio por mis dudas de fe" (20).

                "Mi familia es una típica familia chilena de clase media, muy religiosa, temerosa de Dios y del diablo. No es una religiosidad muy elaborada, sino con los conceptos dados por la Iglesia. Este tipo de religiosidad me influyó hasta los 11 a 12 años. Tengo buenos recuerdos de la primera comunión: mi catequista interpretaba bien lo que era la religión, la vivía. Era una religiosidad del tatita Dios que es drástico, que si te portas mal te va a castigar. Después se dio en mí un proceso que creo natural: mi madre no podía contestar -fruto de su deficiencia cultural- muchas inquietudes. Sus respuestas no me bastaban, tampoco las de la Iglesia. Fue un proceso de ser creyente, de rezar todas las noches, de pedirle a Dios, hasta llegar a negar a Dios. Ahora vivo tranquilo, pero sin Dios" (2).

                "Mi familia es conservadora, por lo tanto católica entre comillas. Iba a Misa como una cosa social más que espiritual. Me bautizaron e hice la primera comunión. Pero no existía ningún compromiso de mi familia con la religión ni con Dios ni con los valores que se suponía se debían defender. Hice 10 años en colegio de religiosas. En el colegio se hacían clases de religión y después retiros, pero siempre sin mucha relación con la vida que yo tenía. Era la religión de decir qué es bueno y qué malo, qué tienes que hacer y qué no; y ahí vino la contradicción: de repente cosas que te decían que no tenías que hacer, tú te dabas cuenta que no eran malas, que eran buenas y que te hacían sentir bien. Como a los 15 años me empecé a cuestionar con mucha fuerza y me di cuenta que no tenía respuesta; entonces fue como un problema que me saqué de encima: a mí no me satisfacía esta religión" (7).

                "Cuando pequeño fui monaguillo e hice mi primera comunión. He conservado el respeto por las personas practicantes que lo hacen con sinceridad. Dejé de creer cuando me di cuenta de que no había coherencia entre lo que se decía y lo que se hacía en la Iglesia; esto coincidió cuando dejé de ser niño y pude pensar por mí mismo; ahí vi que me decían muchas mentiras, que Dios es una invención, que después de la muerte todo se acaba" (23).

                "En mi familia todos son cristianos católicos; mi mamá era catequista, mi papá es observante, pero como los chilenos: a veces va a Misa, a veces no. La enseñanza básica, hasta 7º, la hice en colegio de curas. Fui bautizado sin tener conciencia: es una crítica que le tengo a la Iglesia. Después hice la primera comunión presionado por mi familia. Cuando empecé a realizar estudios de antropología y sociología, me empecé a preguntar qué sentido tenía el creer y me di cuenta que para mí no tenía ningún sentido" (8).

                "Para mí Dios era una persona, un amigo con el cual conversaba, como lo estoy haciendo contigo. Oraba mucho, tenía una relación de amistad, una relación muy especial. ¿Por qué dejé de creer? Creo que fue porque mi concepción de Dios era muy vertical, yo y Dios; y por otro lado la realidad social, los problemas de los demás. Nunca comprendí la vida de Cristo que me presentaban en la Iglesia en relación con el mundo actual" (27).

 

            7.2. Los defectos de la gente de Iglesia

 

            "Fui bautizado por tradición. De pequeño me sentí obligado a ir a Misa por imposición de mi madre. De adolescente tuve fuerte atracción por la vida religiosa; me acerqué a sacerdotes religiosos, pero me decepcionaron por su comportamiento mundano y poco espiritual. Me negué a recibir la primera comunión. Me alejé de la Iglesia católica y de todas las religiones. Pero esto no afectó mi creencia en Dios y me he creado mi propio pensamiento respecto de Él" (9).

                "Tuve una mala experiencia. Estudié en un colegio católico donde me obligaban a ir a Misa. Para peor, los curas no predicaban con el ejemplo. Me amenazaban con echarme del colegio por mis dudas de fe. Una vez que terminé el colegio dejé todo lo religioso" (20).

                "Soy de familia católica. Fui educada en colegio de religiosas y me confirmé. Lo que me hizo cambiar fue el hecho de sentirme defraudada por la Iglesia, porque fui formada en la parte de la Iglesia que era clasista, que decía: hay pobres y hay que ayudarlos; o sea, como que la gente necesitaba de los pobres para ser buenos y salvarse. Y yo creo que más que eso, se debe trabajar para que no haya pobres, para que no haya injusticia. Por otro lado, la inconsecuencia: te decían hay que hacer esto, pero ellas, las religiosas, hacían otra cosa; y los sacerdotes por un lado predican la paz y por otro andan bendiciendo armas. Además está mi familia, que se dicen católicos pero a mi modo de ver no lo son. Me he hecho una promesa: voy a volver a la religión el día que la Iglesia opte en la práctica por lo que está diciendo. Si la Iglesia se replanteara el camino, yo podría replantearme, cuestionar qué es Dios y si existe; volver a buscar por ese lado mis principios, mi vida" (18).

                "Dejé de creer cuando me di cuenta de que no había coherencia entre lo que se decía y lo que se hacía en la Iglesia" (23).

 

            7.3. La influencia de las ideologías

 

                "Soy de familia religiosa practicante; por ella recibí formación religiosa. Fui bautizado e hice mi primera comunión. La enseñanza básica y media la hice en colegio católico. Mi alejamiento de la Iglesia fue natural, a medida que fui creciendo, estudiando, desarrollándome. Esto se fortaleció a través de la reflexión que fui haciendo, por los nuevos elementos adquiridos por la militancia en un partido y porque fui haciendo otros análisis de la historia y la sociedad. No fue algo puntual sino una evolución" (3).

                "Cuando empecé a realizar estudios de antropología y sociología, me empecé a preguntar qué sentido tenía el creer y me di cuenta que para mí no tenía ningún sentido" (8).

                "Mi familia es creyente y practicante. Me bautizaron y recibí la primera comunión. Todos los estudios los hice en colegio católico. Trabajé a nivel parroquial en un equipo de misiones y fui animador de catequesis y participé en comunidades de base. Mi separación y distanciamiento con la Iglesia y la fe se produjo a partir del año 83. Ese año se vivían muchos conflictos sociales y mi conciencia me dijo que me saliera, pues yo veía que a través de esa alternativa no podía dar respuesta a mis problemas y a la situación que se vivía. El año 84 materialicé definititivamente mi opción" (4).

                "Lo que me hizo cambiar fue el hecho de sentirme defraudada por la Iglesia, porque fui formada en la parte de la Iglesia que era clasista, que decía: hay pobres y hay que ayudarlos; o sea, como que la gente necesitaba de los pobres para ser buenos y salvarse. Y yo creo que más que eso, se debe trabajar para que no haya pobres, para que no haya injusticia" (18).

                "Lo que me hizo perder la fe en Dios fue el ver tanta injusticia, mucha violencia y la poca comunicación. El saber que existía un Dios, pero que no le importaba lo que estaba pasando. A mí no me pasó nada grave, pero a mi papá sí: estuvo detenido injustamente cuando yo tenía siete años. Este hecho externo influyó fuertemente en mi interior y me llevó a separarme de Dios" (26).

                "Recibí una formación cristiana tradicional de parte de mi madre, creí en Dios y participé en la Iglesia yendo a Misa los domingos. Al entrar en la Universidad empecé a conocer mejor los problemas sociales y políticos, descubrí que la fe que vivía era superficial: no conseguía hacer la conexión entre mi fe y los problemas que descubrí. Rechacé la fe por considerarla alienante, más preocupada del cielo que de la tierra. No he encontrado aún respuesta a mis interrogantes; reconozco que no he buscado en forma seria, por comodidad y confusión; pero sé que es vital para mí encontrar una respuesta" (27).

 

            7.4. La influencia del ambiente

 

            "Estuve en un colegio de monjas hasta octavo. Alcancé a hacer hasta la primera comunión. Después entré en un colegio municipal y ahí se me fue todo" (6).

 

            7.5. Procesos personales

 

            Entre los procesos personales que han llevado a los entrevistados a perder la fe se mencionan el desinterés por la fe y las crisis existenciales.

            -Pérdida del interés por la fe:

                "Cuando estuve en la Iglesia aprendí muchas cosas: que había que ir a Misa los Domingos, aprenderse los 10 mandamientos; y eso era ser cristiano. Entonces me quedé con eso; aunque sé que puede haber algo más, pero no lo he buscado porque no me interesa; creo que hay otras cosas más importantes que hacer" (18).

                "Tuve mucha fe, pero llegó un momento en que no pude interesarme. Fue muy raro, hasta que comprendí: ya no creía en Dios. (...) Un día me dije: si Dios no existe, me cae el cielo encima, un árbol; pero no pasó nada. Entonces, Dios no existe. Creo que la gente va a la religión por miedo a ser castigada más que por amor a Dios. Yo no sentí nunca el amor a Dios, y es lo que me hubiera gustado" (5).

            -Crisis existenciales:

                "Yo pasé por una etapa muy individualista. Me entró en crisis el verbo necesitar, quería bastarme a mí mismo. Tener gente cerca, pero sin que mi vida dependiera de ellos. Al final llegué a una soledad muy honda. Tuve que reconocer que necesitaba de los demás y que eso no significaba creer menos en mí, sino entender que existe una especie de retroalimentación. Hoy podría decirte que soy ateo, pero que Dios te puso en mi camino para que coversemos de esto. (...) Hubo rupturas familiares muy fuertes que me trajeron un cuestionamiento de todo lo que mi familia me había entregado, entre ello, de los valores religiosos, específicamente católicos. Pasé por una etapa existencialista donde dudé de todo y me dije que Dios no existía" (24).