Nació el 23 nov. 1650, en Barcelona, hijo de Juan Oriol y de Gertrudis Bogunyá, casada luego esta última en segundas nupcias con Domingo Pujolar, a quien incumbió la educación del pequeño hijastro. Su padre fue maestro terciopelero; su segundo padre, zapatero. En 1663 ingresó como monaguillo en la iglesia de Santa María del Mar. Al año siguiente, comenzó sus estudios en la Univ. de Barcelona, en la que adquirió el grado de doctor en Teología. Ordenado sacerdote a los 26 años, tuvo que asumir el cargo de preceptor en la familia del noble Tomás Gasneri, al mismo tiempo que ejercía su ministerio sacerdotal (durante 10 años) en la iglesia de S. Felipe Neri. Muerta su madre en 1686, peregrinó a Roma, donde frecuentaba especialmente el Oratorio de S. Felipe y contrajo amistad con los cardenales Leonardo Collorado y Pier Matteo Petrucci, los cuales le obtuvieron de Inocencio XI el beneficio residencial de los títulos de S. Clemente y de S. Lorenzo en la iglesia barcelonesa de Santa María del Pino o de los Reyes. Empezó a disfrutar del beneficio a partir de 1687. En 1698 concibió el plan de ir a Oriente como misionero. Iniciado el viaje a Roma (el santo quería pedir permiso al Papa para trasladarse a Jerusalén), cayó gravemente enfermo en Marsella; en este impedimento vio una señal de que debía desistir de su ideal misionero y volver a Barcelona. Murió en esta ciudad a los 51 años, eJ 23 de marzo de 1702 y fue enterrado en su iglesia de Santa María del Pino. Los restos se conservaron hasta que, en 1936, fueron profanados y destruidos durante la Guerra civil española. Pío XII devolvió a Barcelona una reliquia insigne que el obispo de la ciudad, el card. Casañas, había donado a S. Pío X en 1908. La beatificación tuvo lugar bajo Pío VII, el 5 sept. 1805; la canonización, el 20 mayo 1909, bajo S. Pío X. La fiesta se celebra el 23 de marzo. J. O. es un santo que no se ha distinguido por un apostolado especial o extraordinario. Predicador celoso (aunque tampoco extraordinario), confesor Muy apreciado, lo que más llamaba en él la atención era su recogimiento, su caridad ejemplar, particularmente para con los enfermos y, sobre todo, la austeridad de su vida (le llamaban «doctor Pa i Aigua»: «doctor Pan y Agua»). Su fama de taumaturgo aumentó después de su muerte. Las fiestas de la beatificación y de la canonización contribuyeron a mantener la popularidad del santo en Barcelona, donde todavía muchos varones llevan su nombre. Existen retratos del santo derivados de un bosquejo sacado por un dibujante coetáneo.
     
     

BIBL.: Compendio de la vida, Barcelona 1794; J. F. MASDEU, Vita, Roma 1806; íD, Compendio della santa vita, Roma 180é; íD, Vida, 2 ed. Barcelona 1885; F. NADAL, Vida, ib. 1815; J. DE PALAU Y DE HUGUET, Breu história de la vida y miracles, i3. 1884; A. RODRÍGUEZ DE URETA, Vida admirable, 2 ed. ib. 1891; A. GILI GOELL, Lo miracler de Barcelona, ib. 1899; J. BALLESTER CLARAMUNT, Vida, ib. 1909; E. ANZIZU, Vida, ib. 1910; C. SALOTII, Compendio della vita, ib. 1909; íD,(, Vita, Roma 1910; R. LLATES, Vida, Barcelona 1953; R. FARRARVS PUIG, Notas oriolanas contenidas en un manuscrito barcelonés de los siglos XVIII y XIX, «Analecta S. Tarrac.» 31 (1958) 95-99 (relación de dos milagros); J. Rlus SERRA, Oficio y misa de San José Oriol, ib. 367-384 (historia del culto, según los documentos del archivo de la Congregación de Ritos); W. SCHAMONI, El verdadero rostro de los santos, Barcelona 1951, 248 ss.; N. DEL RE, Giuseppe Oriol, en Bibl. Sanct. 6,1331-1333.

A. OLIVAR DAYDÍ.