JÓVENES POR EL REINO DE CRISTO (J.R.C.)

HISTORIA Y NATURALEZA DE JRC

JRC nació de una manera totalmente inesperada, sin haberlo programado nadie, entre 1977 y 1978.

En septiembre de 1977 la Dirección Nacional del APOR había organizado en Avila una Semana de estudios sobre la oración, a la que asistían numerosos socios del APOR, mayoritariamente sacerdotes, religiosas y seglares adultos. Pero fueron invitados también algunos jóvenes, pertenecientes a 7 grupos de diversas partes de la geografía nacional. Esos jóvenes, que antes no se conocían, tuvieron una reunión de presentación, y se llevaron la grata sorpresa de ver que, a pesar de las diferencias de estilo que había entre ellos, existía sin embargo una unidad de fondo que les permitía entenderse muy bien. Este mutuo contacto les ayudó mucho, y surgió entre ellos la propuesta de organizar un Encuentro de grupos juveniles que, sin alterar el estilo de cada uno, tuvieran ese mismo fondo común, que en realidad era el espíritu del APOR. La Dirección Nacional del APOR acogió la idea, y los mismos jóvenes que habían asistido a Avila fueron extendiendo la idea a otros grupos durante el curso 77/78.

Así llegamos a septiembre de 1978, cuando se celebró en Valladolid una reunión de 4 días bajo el título "Encuentro Nacional Jóvenes por el Reino de Cristo", en el que se congregaron unos 300 jóvenes de más de 20 grupos de toda España. En el Encuentro se palpó la presencia del Espíritu Santo, que repartió sus dones entre los jóvenes, y produjo entre ellos una gran unidad, lo que les llevó a pensar en dar permanencia a lo que allí había ocurrido. Surgió así "Jóvenes por el Reino de Cristo" (JRC), como una Agrupación de diversos grupos juveniles que, sin perder su independencia o estilo propio, se unían espiritualmente en el APOR, cuyos principios todos aceptaban.

Posteriormente se dio forma jurídica a lo que había nacido carismáticamente, configurándose JRC como Sección Nacional del APOR, con unos estatutos que fueron aprobados en 1979 en una primera redacción provisional, y confirmados en 1990. En junio de 2000 han sido renovados, convirtiendose JRC en un Centro Nacional del APOR.

Desde 1978, se ha venido celebrando una vez al año un Encuentro Nacional de 4 días en diversos lugares de la geografía española, generalmente el 21 \ 31 fin de semana de septiembre, y diversos Encuentros Diocesanos en los lugares en que hay varios grupos adheridos a JRC. Otras muchas iniciativas han surgido en estos años del mutuo conocimiento y colaboración de los grupos de JRC, y han sido numerosos los frutos de todo tipo.

JRC no es, pues, un grupo más, ni un super-grupo que absorba a sus miembros, sino una uni\n ante todo de tipo espiritual, abierta a todo el que coincida en el espíritu del APOR. Es curioso que con ello se ha producido en la práctica, sin nadie programarlo, lo que los Papas habían pedido respecto al APOR, como vemos en este texto que se recogió en los Estatutos de JRC por expresar perfectamente su naturaleza:

* ...intensamente deseamos que todos los que se dedican a las obras externas de apostolado se adhieran al apostolado de la oración y se imbuyan de su espíritu: clérigos y laicos, varones y mujeres, que en la "Acción Católica" o en otras asociaciones, ayudan al apostolado jerárquico.- Y ciertamente, es muy de desear que se adhieran al apostolado de la oraci\n segdn la forma que presenta vuestra pía asociación...

...aunque el Apostolado de la Oración, por razones de propagación, no puede carecer de cierta ordenación y composición de miembros, sin embargo, tanto más se podrá prescindir de su "organización técnica" entre los que ya practican el apostolado activo, cuanto más profundamente el Apostolado de la Oración llegue a convertirse en elemento y ejercicio común de todas las obras apostólicas de la Iglesia.

...el Apostolado de la Oración no es una asociación o una ordenación y composición de miembros que compita con otras pías asociaciones semejantes. No compite con ellas, sino que de tal manera se une a ellas, que las penetra como aire puro y sano, con lo cual la vida sobrenatural y la acción apostólica se renueven y confirmen siempre y en todas partes. + (Pío XII, Discurso al Congreso Internac. del A.O., 27-9-1956. Texto recordado por Juan Pablo II: Discurso a los Secretarios Nacionales del A.O., 13-4-1985).