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EVANGELIO
FIESTA DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN 8 de Diciembre de 2002
 El
anuncio, hecho a María, de su maternidad divina, es una noticia alegre y
estimulante. Dios se hace hombre para siempre. No como los dioses paganos,
que sólo hacían breves y fantasmales incursiones en este valle de lágrimas. En
aquel tiempo, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de
Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José,
de la estirpe de David; la virgen se llamaba María.
El
ángel, entrando a su presencia, dijo:
—Alégrate,
llena de gracia, el Señor está contigo, bendita tú entre las mujeres.
Ella
se turbó ante estas palabras, y se preguntaba qué saludo era aquél.
El
ángel le dijo:
—No
temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios. Concebirás en tu
vientre y darás a luz un hijo y le pondrás por nombre Jesús. Será
grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el trono
de David su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su
reino no tendrá fin.
Y
María dijo al ángel:
—¿Cómo
será eso, pues no conozco varón?
El
ángel le contestó:
—El
Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá
con su sombra; por eso el santo que va a nacer se llamará Hijo de Dios.
Ahí
tienes a tu pariente Isabel que, a pesar de su vejez, ha concebido un
hijo, y ya está de seis meses la que llamaban estéril, porque para Dios
nada hay imposible.
María
contestó:
—Aquí
está la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra.
Y el ángel se retiró.
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COMENTARIO Nada
más comenzar el ADVIENTO, celebramos esta gran Fiesta de la Virgen María.
Ella es el modelo más perfecto de lo que debe ser el Adviento, de cómo
hay que vivirlo. Si el Adviento es la preparación para que Jesús nazca
en nosotros y entre nosotros, María fue quien mejor preparó el
Nacimiento primero del Señor. ¿Cómo? En primer lugar con la ORACIÓN. Y
al mismo tiempo con una apertura total a la VOLUNTAD DE DIOS, a los planes
que El tenía para con ella. Por eso cuando recibió el anuncio del Ángel
dijo inmediatamente: FIAT, hágase en mí según SU PALABRA. Y el Verbo de
Dios se hizo carne. Esto es la Navidad: hacer posible esa presencia de
Dios en nuestras vidas tratando de que el Verbo, la Palabra de Dios se
haga vida en cada uno. Hay que hacer todo lo posible para que el señor
pueda nacer en el corazón de los hombres. Que no le neguemos un lugar
para que vuelva de nuevo a realizar el milagro de hacerse NIÑO, y podamos
“jugar” con él alegremente.
Pídele a la Virgen María que te ayude a preparar bien la NAVIDAD.
Saludos de tu amigo Juan
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