Mártir

"Es preciso suplicar a los Mártires, cuyos cuerpos y reliquias son entre nosotros como unas sagradas prendas que nos prometen su asistencia. Sin duda, los que lavaron con su sangre las manchas de sus pecados, tienen grande proporción para pedir el perdón de los nuestros. No nos avergoncemos, pues, de tomar por intercesores en nuestra flaqueza, a los que también conocieron la suya, aun en aquel mismo tiempo en que quedaron victoriosos. (S. Ambrosio, sent. 42, Tric. T. 4, p. 343.)"