La Violencia contra los Niños

¿Qué es el maltrato infantil?

El maltrato a los niños/as es un grave problema social, con raíces  culturales y psicológicas, que puede producirse en familias de cualquier nivel económico y  educativo. 

El maltrato viola derechos fundamentales de los niños/as y por lo tanto, debe ser  detenido, cuanto antes mejor. 

¿Cuáles son las formas de maltrato a niños/as? Pueden distinguirse varias formas de  maltrato, que los adultos ejercen sobre los niños: 

•La negligencia que se expresa en desprotección, descuido y/o abandono. 

•El maltrato físico que es toda forma de castigo corporal e incluye también, el encierro o  la privación intencional de cuidados o alimentos. El abuso sexual, consistente en obligar o  persuadir a un niño/a para que participe en actividades sexuales adultas, frente a las que  no puede dar un consentimiento informado. 

•El maltrato emocional, que acompaña a todas las otras, pero que puede ejercerse  independientemente de las demás. Por ejemplo, mediante amenazas aterrorizantes,  descalificaciones, desvalorizaciones y/o ausencia de expresiones cariñosas. 

•Por último, el peor maltrato que se le puede dar a un ser humano en desarrollo que  todavía no ha nacido, es el aborto. Se mata bajo el amparo de la ley (en EE.UU. y otros  países donde se ha legalizado el aborto provocado) a criaturas inocentes en el vientre de  sus madres, mediante métodos crueles, dolorosos e inhumanos que la ley no permite se  utilicen para matar animales. 

Maltrato de infantil- sólo estas palabras nos horrorizan. ¿Cómo puede alguien causar  intencionalmente dolor a un niño inocente y desamparado? Sin embargo, esto sucede  legalmente 4,500 veces al día en EE.UU., cada vez que una criatura es víctima del aborto.  Si se dejan a un lado las palabras y la retórica sobre el aborto, hay que hacerle frente a  la horrible realidad. Los niños por nacer que no son deseados por sus padres, son  quemados, envenenados, cortados y despedazados en el claustro materno. Los niños  prenacidos no difieren en nada de los recién nacidos, solamente son más jóvenes. Muchos  podrían vivir si nacieran prematuramente. Todos sufren horribles dolores antes de morir  abortados. ¿Es acaso un derecho de la mujer el poder decidir sobre la vida o la muerte del  ser inocente que lleva en sus entrañas? ¿ O es tal supuesto "derecho" un caso de maltrato  infantil o de verdadero homicidio, con un nombre diferente? 

El Dr. Phillip Ney, psicólogo experto en el Síndrome Postaborto, ha declarado:  "Recientes evidencias indican que muchas mujeres conservan un sentimiento de  culpabilidad por mucho tiempo después que abortan. El sentimiento de culpabilidad es una  causa importante del castigo físico excesivo y del infanticidio. El aborto también disminuye  la autoestima de la mujer, según demuestran estudios de madres que maltratan a sus hijos."  (P.Ney, M.D., "Relación entre el aborto y el abuso de los niños", Canada Journal of  Psychiatry, Vol. 24, l979, pp.6l0-620.) 

Cómo identificar a los niños maltratados

Los indicadores de conducta 

El comportamiento de los niños maltratados ofrece muchos indicios que delatan su  situación. La mayoría de esos indicios son no específicos, porque la conducta puede  atribuirse a diversos factores. Sin embargo, siempre que aparezcan los comportamientos  que señalamos a continuación, es conveniente agudizar la observación y considerar el  maltrato y abuso entre sus posibles causas. 

•Las ausencias reiteradas a clase. 

•El bajo rendimiento escolar y las dificultades de concentración. 

•La depresión constante y/o la presencia de conductas autoagresivas o ideas suicidas. 

•La docilidad excesiva y la actitud evasiva y/o defensiva frente a los adultos. 

•La búsqueda intensa de expresiones afectuosas por parte de los adultos, especialmente  cuando se trata de niños pequeños. 

•Las actitudes o juegos sexualizados persistentes e inadecuados para la edad. 

Los indicadores físicos: 

•La alteración de los patrones normales de crecimiento y desarrollo. 

•La persistente falta de higiene y cuidado corporal. 

•Las marcas de castigos corporales. 

•Los "accidentes" frecuentes. 

•El embarazo precoz. 

Abuso sexual. 

El maltrato y el abuso no siempre presentan huellas físicas fácilmente visibles, pero  siempre dejan su marca en la conducta. La observación sensible, la actitud receptiva y la  escucha atenta, son los mejores recursos para identificar al niño/a maltratado. 

Los maestros requieren de especial sensibilidad para detectar si un niño es objeto de  maltrato, porque frecuentemente éste por verguenza o para proteger a otros miembros de la  familia encubre la situación. Hay que tener presente que para quien está creciendo en un  ambiente violento, la violencia no es cuestionada e incluso, puede parecer el único modo de  expresar los afectos. Un padre y/o una madre agresivos y/o abusadores, significan un  peligro real para la salud y la vida del niño, pero generalmente son su principal o único  referente afectivo. Además, la violencia de los padres produce un sentimiento contradictorio  de afecto, rechazo y dependencia emocional en el niño. 

A veces, el niño/a denuncia explícitamente el maltrato que sufre. La actitud receptiva de  los docentes puede animar a estos niños/as a confiarse. En estos casos es indispensable  disponer una escucha atenta y sobre todo: 

•Creer en la palabra del niño/a. 

•No culpabilizarle en ningún caso. 

•Investigar la verdad. 

•Consultar con otros profesionales. 

•Recurrir a las autoridades correspondientes. 

Cómo ayudar a las víctimas del maltrato

La mejor manera de ayudar a detener el maltrato del niño/a es: 

•Identificando los casos de maltrato. 

•Realizando intervenciones en las situaciones detectadas, a través del gabinete o de  docentes sensibles y capacitados. 

•Derivando y/o denunciando los casos de maltrato a los organismos pertinentes. 

Aquí proponemos algunas líneas de trabajo que la escuela puede desarrollar con los  niños y sus familias: 

•Realizar tareas de sensibilización y capacitación. 

•Realizar talleres reflexivos. 

•Desarrollar acciones de difusión y sensibilización entre los niños, las familias y la  comunidad acerca de los derechos del niño. 

•Articular con la currícula, actividades dirigidas a revisar el problema críticamente. 

•Estimular la confianza y la autoestima de los niños/as. 

•Para desarrollar con éxito la función preventiva, la escuela como institución debe ser  capaz de revisar sus propias actitudes hacia el control de las conductas de los niños y  adolescentes. 

•Ofrecer a los alumnos el espacio y las oportunidades para experimentar formas no  violentas de resolución de los conflictos. Llevar a cabo asambleas, consejos de aula y todo  medio que estimule la participación democrática en la vida escolar.

Un mensaje para los que pierden la paciencia

Lo primero es que Ud. sepa que sólo Ud. puede controlar su propia violencia. 

Cuando se sienta a punto de perder el control recuerde: 

•Procure poner distancia entre Ud. y el menor, aún dentro de su mismo hogar. 

•Si le es posible, dé una caminata lo suficientemente larga que le permita recobrar la  calma. 

•Si no puede salir de su casa, concentre su energía en alguna labor fuerte que le ayude a  descargar su cólera. 

•Tómese unos minutos para hacer ejercicios y relajarse. 

•Llame a alguien de su confianza y converse un rato mientras se tranquiliza. 

•Piense en algo agradable que le ayude a aliviar su tensión. 

•Tenga presente que su problema no es único. Muchos otros han pasado por lo mismo y  han logrado vencer. ¿Por qué no usted? 

•Busque ayuda profesional.