El adolescente y su educación en la sociedad actual:
un problema de comunicación
Hipótesis de trabajo:
¿ Realmente la comunidad educativa y la sociedad toda se esfuerza por interpretar al adolescente y se manifiesta hacia él en un proceso comunicacional que lo sitúa como sujeto con sus características particulares ofreciéndole la posibilidad de error como un resultado posible en el camino de búsqueda ?
Es difícil enfrentar de forma completa la problemática del adolescente, aún cuando nos las limitemos a aquellas que inciden sobre su educación. En el desarrollo de esta monografía trataré de darle mayor importancia a lo que hace a las cuestiones que le suma el estar viviendo en la sociedad actual, al rol que debería cumplir la escuela en su formación y a los métodos de educación y comunicación que los afectan. De todos modos no es mi intención lograr una exposición completa de los temas mencionados, sino lograr plantear reflexiones válidas para el rol del docente en su interacción con los adolescentes actuales.
Naturalmente se relaciona al termino adolescencia con adolecer o padecer, pero en sí el termino abarca más que esto. "La aurora de un adulto en el crepúsculo de un niño" es una frase literaria de F. Dolto que nos sirve para ilustrar con palabras a ese proceso de cambio, de transición entre dos momentos muy importantes y definidos como lo son la niñez y la adultez.
Para muchas personas la adolescencia significa una etapa de crisis, de ausencia y de desarrollo; pero deberíamos relacionar estas interpretaciones con la importancia que se les ha dado a las fases del desarrollo del hombre a través de los tiempos. Así encontraríamos que en la modernidad se anhelaba llegar a ser adulto, mientras que el niño significaba una etapa de latencia en la que disfrutaba del carecer de responsabilidades. A esto luego le vino el psicoanálisis y la importancia que la niñez implicaba, hasta llegar a la postmodernidad, donde las importancias son otras: el adolescente pasó a ser alguien valorado y buscado por muchos sectores de la sociedad y la adolescencia se encuentra como una etapa a la que todos quieren llegar y mantenerse. Por lo tanto debemos plantearnos cuan adolescente es el adolescente actual. Así mismo parecieran seguir siendo válidas algunas premisas que acompañaron históricamente la caracterización del sujeto adolescente, como por ejemplo el echo de estar desestructurado y restructurando su mundo interno y sus relaciones con el mundo externo. En lo referente al mundo externo, recibe mensajes permanentes que le son dados de distintas maneras y en gran parte son las maneras en la que se envían esos mensajes responsables de la aceptación o no del sujeto.
Podemos sin temor a equivocarnos darle al adolescente determinadas característica, que por otra parte son las mismas que caracterizaron a los adolescentes del pasado inmediato. Algunas de estas características (ª ) son:
Muchas de estas características se podrían explicar en base a los duelos que sufre el adolescente , como consecuencia de los cuales se producen sentimientos de negación, resignación y desafecto. Según Aberasturi (· ) el adolescente tiene que superar tres duelos:
Además de los duelos citados está la acción del mundo sobre el adolescente que le prohíbe la acción y lo obliga a refugiarse en la fantasía y la intelectualización.
Otra característica particular de los adolescentes es el hecho de formar grupos de pares y en parte esto se corresponde a un agrupamiento de personas con problemas en común y que se agrupan para enfrentar esas circunstancias y defenderse en conjunto. Aunque en los grupos de pares se pueden dar el caso de actitudes de orden perturbador que se realizan para lograr la caracterización del grupo.
Frente a todo esto esta la educación, que comprende a un proceso de comunicación. Y es con los distintos métodos de comunicación (© )y de educación que se les impone a los adolescentes, que se obtienen distintos resultados.
Muchas veces se enfrenta a un grupo de adolescentes con autoritarismo y se impone una emisión de conocimientos por parte de un emisor que es el docente hacia los adolescentes que actúan como receptores pasivos de los que solo se extraen imágenes que permiten ver como esta llegando el mensaje. Un sistema de este tipo no hace más que confrontar con las características de los adolescentes y generarles repulsión y falta de consideración a lo que se le enseña (¨ ). En un modelo de este tipo la pedagogía es exógeno al mismo, el educando es un objeto y la motivación pasa por premios y castigos. Totalmente contrario con las intenciones del adolescente que requiere estimulación en la participación, que se estimule la criticidad, que se les escuche y asuma los conflictos, que el error sea un resultado más en el camino de búsqueda y que como valores no se les de a la obediencia, sino a la solidaridad y a la cooperación. Por lo que trabajos de grupo, una función educativa basada en la acción-reflexión-acción y la justificación de la evaluación basada en la necesidad de evaluar el cumplimiento de objetivos que al sujeto le van a servir, son alternativas que acercan al educador con el adolescente educando.
Cuando en la introducción de este trabajo planteaba cuan "adolescentes" eran los adolescentes actuales, hacía referencia al cambio que la modernidad le implica a estos procesos que implican sentimientos de tristeza y esfuerzo psíquico para superarlos. Con esto no quiero decir que hay que pensar a los adolescentes actuales como afortunados que no padecen en ninguna forma la crisis que implica este momento de transición; sino que lo que planteo es la posibilidad de tal crisis pase por otro lado o por los mismos problemas pero atenuados por un estilo de vida "soft" y emociones "ligth"(§ .
En este contexto podemos marcar las nuevas pautas que influyen en cada duelo:
Dentro de un marco social que promueve el individualismo y estimula la competencia el trabajo grupal es algo que muchas veces resulta subestimado y poco comprendido. Sin embargo tenemos que revalorizarlo como posibilidad de lograr una comunicación que integre a cada individuo como sujeto que participe activamente y para generar focos de discusión en el que todos se animen a participar. También la clase escolar puede contribuirse como grupo en la medida en que exista la posibilidad de que docentes y alumnos puedan reconocer la presencia de necesidades, así como de las distintas acciones y actividades destinadas a satisfacerlas.(© )
En la red de interacciones grupales cada sujeto ocupa una posición ligada a su función en el sistema, y que esta ligada a la adjudicación de distintos roles. El análisis de los roles emerge de la interacción grupal, pero así mismo es importante dejar claro que se establezca al menos un secretario que baya tomando nota de las ideas volcadas por el grupo, un coordinador que administre la palabra a los distintos integrantes del grupo de una forma democrática, pero basada en el orden y el respeto, y finalmente un vocero que exponga las apreciaciones del grupo y logre volcar con cierta "gracia" las apreciaciones anotadas por el secretario. También para enriquecer a los grupo es importante dotarlos de heterogeneidad, una estrategia para esto podría ser una numeración al azar.
El punto de partida de la productividad grupal es que los integrantes puedan reconocer sus necesidades como sujetos y como grupo, tratando de resolver la contradicción primaria sujeto-grupo, como resultante surge el nosotros. La vivencia del nosotros se transforma en sentimiento de pertenencia y esta pertenencia permite lograr la identidad grupal.
A los fines educativos hay que comprender que en todo grupo tendremos a individuos naturalmente líderes, por eso es importante lograr la participación de todos los integrantes del grupo identificando a estos individuos impidiéndoles que bloqueen el accionar de los restantes miembros. Una manera es ubicar a estos sujetos en un rol de coordinador que permita la participación de los restantes miembros.
Sin duda la sociedad postmoderna incide con sus prejuicios y sus valoraciones sobre el adolescente y su educación(§ ). Los adolescentes sufren sobre ellos la presión de agentes muy importantes:
En parte aclarar este punto es desglosar lo explicitado anteriormente como una de las presiones que tiene el adolescente actual. Esto se debe a muchos factores que van desde una estrategia dirigida y mal intencionada de control de decisiones sobre la distribución de gastos de cada familia, hasta la simple idea de aprovechar lo que es claramente un negocio. Lo adolescente tienen cultura de consumo, este es muchas veces poco fundamentado y va tomando cada vez más importancia. Por ej. En Francia en 1986 el 50% de las compras realizadas fueron impulsadas por menores de 15 años.
La publicidad intenta representar el arquetipo de la juventud: ingenuidad e impertinencia y traducir a imágenes y símbolos referencias que permanecerán en sus mentes y que lo vincularan con un producto, una marca, etc. S e hace uso a impulsores, palabras que vayan modelando la idea del consumo y creando una necesidad de tal cosa, hasta asumirlas como tal; y persiguiendo un fin último de apoderarse de manera "negociadora y entretenida" de la voluntad de estos jóvenes. Realmente e inconscientemente están "presos de esta publicidad" y en gran parte estos barrotes los van configurando la misma sociedad posmoderna y la idea de mantenerse a una moda y al modelo propuesto.
Así mismo podemos toma a la publicidad como ejemplo, ya que si bien es cierto que se encuentra su accionar casi siempre facilitado por la concordancia con la forma de vivir posmoderna, se trata en definitiva de un proceso de comunicación donde se da un mensaje que persigue un fin de venta. Es entonces en este sentido un ejemplo de adaptabilidad de una mensaje que por los códigos correctos logra algo que mucha veces resiste toda lógica, como lo es el hecho de comprar un determinado auto por las chicas que lo acompañaban en su imagen publicitaria. Por lo tanto si bien tenemos que enfatizar en que la publicidad manipula, fija valores convenientes a sus fines, utiliza una ideología oculta y una base del consumismo; además nos demuestra la importancia de la comunicación y del correcto uso de los medios para lograr adaptarse a un publico y lograr su objetivo.
Con los ítem anteriores se viene planteando la tendencia de que los distanciamientos en el proceso de educación del sujeto adolescente nacen en gran medida de modelos de comunicación poco apropiados, de factores que alteran este proceso de comunicación y de un mal entendimiento de las problemáticas que lo afectan. Así nos tenemos que plantear si son los duelos clásicos del adolescente lo que los afectan o si estos se han modificado y adaptado a un perfil posmoderno. También comprender las presiones que sobre este sujeto radican y que buscan objetivos propios que lejos están de la educación, como la misma publicidad que es un caso de singular importancia por la trascendencia y posibilidad de acción que los distintos medios comunicacionales le brindan. Además no tendríamos que descuidar el perfil socio-económico ya que la distintas disponibilidades de recursos de distintas sociedades hacen que estos procesos alteren su importancia. Frente a todo esto los educadores debemos llevar adelante un proceso de comunicación con claridad y tratando de salvar los inconvenientes planteados. Es por esto que hay que resaltar cuatro cuestiones básicas, que si bien no nos resuelve el proceso comunicacional en sí, le dan un marco de claridad, evitan perdidas de tiempo y logran orientarnos.(· ) Estas preguntas debemos formularlas cualquiera sea el medio utilizado:
En respuesta a esta pregunta nos debe quedar en claro el tema o mensaje a transmitir, para ello hay que tener en cuenta el interés, necesidades y problemas del espectador.
Esta pregunta este dirigida a dejar en claro cual es el público destinatario, importan cuestiones tales como: edad, sexo, procedencia, condición social, situación económica, profesión u ocupación, mentalidad, religión, costumbres, etc.
Esto incluye la selección de medios y procedimientos: oral con apoyo de la pizarra, retroproyector, cartel, panfleto, montaje audiovisual, video, etc.
Determinar los objetivos, es decir cuales son los propósitos del proceso de comunicación planeado.
Por último vale aclarar que ningún proceso de comunicación debería ser manejado y planificado desde lo previo a dicha acción, ya que la mayor importancia de esto radica en la interacción posible, dinámica y poco previsible.
Consideraciones finales y Conclusión:
Como aspectos concluyentes del trabajo es mi intención mostrarles la necesidad de reflexión sobre algunos puntos que si bien se conocen muchas veces se ignoran:
También quiero destacar que hay muchos aspectos del adolescente que podrían ser mejor explotados, por ejemplo tienen entre sus particularidades la de manifestar fuertes pasiones y prevalecer los sentimientos como prioridades, por lo que perfectamente se podrían utilizar estas características para tratar temas transversales que ellos sientan como propios y utilizar esto como un punto desde donde se pueden acoplar muchos otros conocimientos según el perfil que le dé cada área. Por lo que es gran parte de la cuestión se encuentra en esforzarse por lograr una comunicación adecuada y sumarle a esto el ingenio necesario para que se cumplan todos los objetivos fijados de la manera más llevadera posible.
BIBLIOGRAFIA
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Ing. Agr. Ezequiel M Latorre