HISTORIA DE LA IGLESIA

EPOCA ANTIGUA

SEGUNDA PARTE

LOS COMIENZOS DE LA GRAN IGLESIA (180-324)


LINEAS GENERALES DEL PERIODO

 

1.- De finales del siglo II a comienzos del III la Iglesia pasa definitivamente a ser la Iglesia universal. A pesar de diversas persecuciones, de conmociones políticas i religiosas internas la Iglesia afianza su organización interna, las formas de culto, la vida diaria de sus fieles i la perspectiva teológica. Esta situación le permitirá afrontar sin miedo los retos que se le presentaran después del edicto de Milán.

2.- Hasta comienzos del siglo IV prospera la penetración misionera de la Iglesia a lo largo i ancho del Imperio. El aumento notable de cristianos en las antiguas comunidades o el nacimiento de nuevas comunidades fortalecerá a la Iglesia ante cualquier ataque.

3.- La Iglesia se organiza en base a grandes agrupaciones eclesiásticas entorno a importantes sedes como Antioquía en Siria, Alejandría en África del norte i Roma con el restante occidente latino. Los obispos Calixto, Esteban y Dionisio fraguarán paulatinamente la pretensión de su iglesia de Roma de gobernar la Iglesia universal.

4.- La Iglesia intenta ofrecer a sus fieles a través de la liturgia y la vida comunitaria una vida cristiana intensa i coherente:

 

CAPITULO XVII.

LA PROPAGACIÓN DEL CRISTIANISMO HASTA FINES DEL SIGLO II

 

1.- Panorama de la evangelización cristiana en el curso del siglo II:

1.- Se siguen evangelizando los lugares de la primitiva evangelización apostólica. Con éxito especial en la zona paulina del Asia Menor.

2.- La evangelización abre nuevas fronteras a la Iglesia: Siria oriental, Mesopotamia, en oriente; África del norte, Galia, Germania e Hispania, en occidente.

3.- No existe aún una dirección y organización de la tarea misionera. Los responsables son las iglesias particulares y el entusiasmo de algunos cristianos. No conocemos el nombre de los evangelizadores.

4.- Nuevas formas de propagar el Evangelio:

5.- La heroica actitud de los mártires y confesores cristianos ante las persecuciones.

2.- Algunos detalles de la evangelización en las diversas zonas del imperio:

2.1.- Palestina:

Se distinguen dos periodos. Después de la I guerra judía (73/74) i después de la II guerra judía (d. 132-135):

2.1.1- La guerra judía del siglo:

Puso temporalmente término a la actividad de la iglesia en Jerusalén. La comunidad judeocristiana fue presidida por el obispo Simeón hasta su martirio v. 107. Toparon con dificultades y la oposición del judeocristianismo heterodoxo y del judaísmo ortodoxo de Palestina. El primero continuaba considerando a Jesús de Nazaret como un gran profeta, pero no como un Mesías e Hijo de Dios. Además, tenian influencias gnósticas de Simón Mago, Menandro, Dositeo y Cerinto. Mago y Menandro especialmente sobre Samaría. Los segundos se oponían a los renegados que habían abandonado el sábado y seguían predicando como Mesías al que había sido clavado en cruz por los judíos. Se opusieron al cristianismo en Palestina i con una fuerte contracción misional hacia los centros importantes de la diáspora. Los judíos ortodoxos palestinenses acusaron al obispo Simeón ante el procónsul Ático como descendiente de David i cristiano. Fue crucificado según la jurisprudencia del edicto de Trajano.

2.1.2.- La sublevación de Bar-Kochba (132-135)

Significó el final del segundo período del judeocristianismo palestinense y el cese de toda actividad misionera en Palestina. Muchos cristianos fueron perseguidos y asesinados, otros huyeron de nuevo al otro lado del Jordán. En lugar de Jerusalén se levantó la nueva ciudad de Aelia Capitolina, la prohibición de que habitasen en ella judíos redujo a partir de entonces la comunidad cristiana a gentiles, sobre todo griegos. El primer obispo Marcos era griego. Los pocos rastros de cristianismo que encontramos hasta Constantino se reducen a las ciudades. En el campo siempre hubo una fuerte oposición hacia el cristianismo.

2.2.- Siria:

Desde el principio la iglesia siria se esforzó por evangelizar no solo las ciudades sino también el campo. Mientras el paganismo se mantenía en Fenicia el cristianismo aumentaba en Damasco, Sidón y Tiro. Sobre todo en Antioquía, gracias a su obispo Ignacio, el cristianismo ganó prestigio entre los griegos. Hacia la primera mitad del siglo II la misión llegó a la región de Osrhoene, en Siria oriental, cuando el judeocristiano Addai empezó a actuar en Edesa y posteriormente en Mesopotamia. Su trabajo fue continuado por Aggai, mártir posteriormente. A fines de siglo un sínodo de Edesa discutió la fecha de la pascua cabe pues suponer que las iglesias de la zona estaban cohesionadas. Se supone que Taciano compuso para ellas su Diatessaron después del 160. No está suficientemente probada la temprana conversión de la casa real de Edesa y la elevación del cristianismo a religión oficial. Bardesanes, convertido al cristianismo en el 179 y expulsado posteriormente por gnosticismo, señala como característica de dichas iglesias la reunión dominical regular y el ayuno en días determinados.

2.3.- Arabia.

Ya en el siglo I y II el cristianismo era conocido en Arabia del norte o Transjordania. Arabes en Jerusalén en Pentecostés (Act 2,11). Recordamos la comunidad de Pella a la que pertenecía el apologista Aristón, que, poco antes de la mitad del siglo II, escribió un Dialogo entre Jasón y Papisco sobre Cristo.

2.4.- Egipto:

Su evangelización sigue en la oscuridad no obstante los numerosos hallazgos de papiros de los siglos I i II. La fundación de la iglesia egipcia por Pedro es legendaria. Tal vez los fragmentos de papiro del evangelio de Juan de comienzos del siglo II pudieran ser las pruebas más antiguas de la presencia de cristianos en Egipto. La misión gnóstica en un principio parece que tuvo más éxito que la cristiana. Panteno es el primer maestro cristiano conocido i el 190 con el obispo Demetrio la comunidad alejandrina es ya considerable.

2.5.- Asia Menor:

Ya a fines del siglo I y a comienzos del II algunas ciudades del occidente muestran iglesias organizadas (Apoc 2-3), que había que añadir a las fundadas por Pablo. Ignacio de Antioquia añade las de Magnesia y Trales. La carta de Plinio (V.112) reconoce una extensa cristianización del campo en la provincia de Bitinia. La correspondencia de Dionisio, obispo de Corinto, informa también de las iglesias de Nicomedia, Amastris y las iglesias del Ponto. Los sínodos de los años 80 que se oponen al montanismo nos hacen presumir un cristianismo bien organizado. El obispo Polícrates de Efeso alude a la gloriosa tradición de su iglesia. En Creta el mismo Dionisio habla de las iglesias de Gortina y de Cnosos. Desconocemos en cambio la suerte de la fundaciones paulinas de Cilicia y Chipre durante esta época. Parece que Grecia y Macedonia, también paulinas, quedaron a la zaga en la evangelización. La iglesia más importante era la de Corinto con el obispo Dionisio. En Atenas tenemos testimonio del apologista Arístides. La posible cristianización de las provincias del Danubio durante el siglo II es incierta. Tal vez algún soldado cristiano iniciara a otros en la fe.

2.6.- Roma:

La carta de Clemente a la iglesia de Corinto indica que la iglesia creció a pesar de las persecuciones neroniana y domiciana. Seguramente los crecientes eran todavía en su mayoría no romanos. El prestigio de la iglesia de Roma aparece por la fuerte atracción que ejerce sobre otras iglesias i cristianos. Ignacio de Antioquia le tributa grandes elogios. Marción, Abercio, Hegesipo e Irineo, Valentín y Teodoto, Justino, Taciano y Policarpo de Esmirna viajan por algún motivo a Roma. Unos para lograr el reconocimiento de sus doctrinas, otros para reconocer la verdadera doctrina o para trabajar por la paz cristiana. Hermas, escribiendo aún en griego, no permite conocer su vida. El obispo Victor introduce ya el elemento latino a fines del siglo II. Justino abre en Roma una escuela para enseñar a los hombres cultos " la verdadera filosofía ".

2.7.- Italia:

El hecho que la mayoría de cristianos de la comunidad de Roma no fuesen latinos dificulta posibles incursiones evangelizadoras. Tal vez surgieron algunas sedes episcopales en el sur de Roma en la segunda mitad del siglo II. Parece también que Sicilia no fue misionada antes del siglo III?

2.8.- África del norte:

Evangelizada seguramente muy pronto, sin embargo no conocemos el nombre de los posibles evangelizadores. El primer documento son las actas de los mártires de Scillium -VII-180-. La comunidad principal era la de Cartago donde Tertuliano a finales del siglo II ejercía una gran actividad catequética i literaria. El 220 el obispo Agripino pudo convocar a sínodo a 70 obispos.

2.9.- Galias:

Evangelización de la desembocadura y valle del Ródano a través de las relaciones comerciales de Asia Menor con el sur de la Galia. El contacto fue temprano en el caso de la colonia griega de Massilia. La fuerza numérica de las iglesias de Lión y Vienne que descubre la persecución de Marco Aurelio con el martirio de 40-50 cristianos de esas ciudades permite adivinar unas comunidades fuertes. Irineo, obispo de Lión, aunque extranjero, pensó también en misionar a los celtas. Dificultades lingüísticas se lo impidieron.

2.10.- Germania:

Según Irineo existirían comunidades en las provincias renanas limítrofes al Rin con centros en Colonia y Maguncia. Parece también que el cristianismo llegó tempranamente a Tréveris centro comercial más importante que los anteriores.

2.11.- Hispania:

El mismo Irineo habla de la existencia de comunidades cristianas en las "provincias de Hispania ".