Celebraciones en el tiempo
de Navidad
Santísimo Nombre de
Jesús –
1
3 de enero
Palabra divina
Nota. La memoria o la fiesta del Santísimo Nombre de Jesús ha pasado en
los últimos tiempo por varias vicisitudes. Desaparece como celebración en
el Calendario de la Iglesia Universal (1969), luego del Concilio. Queda
relegado, pues, a los Calendarios particulares. El Calendario Franciscano
siempre lo ha guardado. Y de nuevo reaparece en el Calendario de la
Iglesia, con el Misal del 2002, como memoria libre, a celebrarse en día
fijo: el 3 de enero.
En este himno nos deleitamos en una frase, que es admiración, adoración,
amor: tu nombre: Jesús. Y queda constituida como remate de cada
estrofa. Este nombre es un nombre de nuestra historia, como es, por
ejemplo, el nombre de “José”. Pero aquí viene la novedad absoluta, que
quiere meditar la entraña del himno. Este nombre tiene un contenido, y su
contenido es nada menos que la Palabra. Es, por tanto, un nombre donde
palpita la gracia del Dios infinito. Y al nombre, al nombre real,
vinculado esencialmente a su propio poseedor, le damos culto de adoración,
como “adoramos” la Santa Cruz.
Palabra divina,
concreta en un Hijo
nacido de Virgen;
tu nombre: Jesús.
Tu nombre es de carne
historia preciosa ,
oh dulce palabra,
tu nombre: Jesús.
El Dios infinito
se llama en la tierra
como un compañero,
tu nombre: Jesús.
Igual que la cruz
besamos tu nombre
por ser cuerpo tuyo,
tu nombre: Jesús.
Jesús, sacramento,
vigor y dulzura,
unción y festín,
tu nombre: Jesús.
Qué gozo sencillo
poder pronunciarte
como una caricia,
tu nombre: Jesús.
Y entrar en ti mismo,
llamarte, escucharte,
sentir que eres nuestro,
tu nombre: Jesús.
Recibe tu nombre
cual bello homenaje;
la Iglesia te aclama:
¡Dios nuestro Jesús! Amén
Jerusalén, enero 1987
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