REPÚBLICA CHECA E IGLESIA «CLANDESTINA»
DicEc
 

La expresión Iglesia «clandestina» o Iglesia «de las catacumbas» es usada en la República checa y también en parte de Eslovaquia para hablar de los grupos que siguen a los obispos y sacerdotes ordenados clandestinamente durante la época comunista y que no han aceptado ser ordenados «sub condicione» para incorporarse plenamente a la Iglesia católica. La Congregación para la doctrina de la fe hizo pública el 11 de febrero de 2000 una Declaración sobre obispos y sacerdotes ordenados clandestinamente donde afirma que no se puede hablar ya de la Iglesia «clandestina» o «de las catacumbas». Sólo se puede hablar de clandestinidad en el sentido de que celebran los sacramentos en lugares privados, celebraciones de las cuales se recuerda que son ilícitas y algunas quizá incluso inválidas, por razón de las ordenaciones efectuadas por el obispo F. M. Davidek.

Además, la Declaración de la Congregación para la doctrina de la fe informa que una gran parte de los sacerdotes célibes ordenados clandestinamente —globalmente unos cincuenta— ha aceptado ordenarse de nuevo «sub condicione» y estos han sido incorporados en el ministerio pastoral por los respectivos obispos diocesanos. Por otro lado, de los veintidós sacerdotes latinos casados, diecinueve han sido ordenados «sub condicione» y han sido incorporados al rito bizantino-eslavo católico en Chequia. La Declaración de la Congregación para la doctrina de la fe también informa que hay una parte de obispos y sacerdotes ordenados clandestinamente, de la cual no se precisa su número, que no han aceptado la incorporación propuesta debido a que rechazan el ser ordenados de nuevo, aunque sea «sub condicione».