Denuncias bíblicas
contra los Imperios

 

 

Resumen introductorio

 

Presento una selección de citas bíblicas, aplicables simbólicamente a cualquier imperio, y en nuestro caso, siguiendo la dinámica bíblica, al imperio que actualmente domina al mundo.

Vamos a ver que son abundantes las citas proféticas en contra de los imperios. No hablan ellos de un solo imperio, sino de los imperios en general, y en muchos casos, del imperio concreto del momento histórico en el que vive cada autor.

Los profetas entienden por imperio todo régimen de gobierno absolutista y despótico, que tiende a dominar al mayor número de países posibles, a través de la violencia, el miedo, un comercio centralizado y una intensa y hábil propaganda engañosa.

Esta crítica tan fuerte parte de la fe en su Dios, Yavé, tan distinto a "los otros dioses".

En la Antigua Alianza Dios se muestra solidario con los empobrecidos, los explotados y humillados. En la Nueva, en Jesús Dios se muestra además presente en todos los que sufren. Los otros dioses, en cambio, favorecen la humillación, el servilismo y la resignación del pueblo.

El Dios de la Biblia está al servicio del pueblo: lo ayuda a tomar conciencia de su dignidad, y a liberarse de toda esclavitud, de forma que puedan vivir prósperamente como hermanos. Los dioses del imperio, en cambio, apoyan y están al servicio de los gobernantes de turno y sus prácticas de orgullo, dominación y acaparamiento.

Por ello los profetas son tan críticos con todo sistema de gobierno que acapare riquezas y poder, con la consiguiente explotación del pueblo. Ellos entienden que los imperios son idólatras: apoyan su proyecto de gobierno en divinidades inventadas por ellos mismos que justifican los acaparamientos de unos pocos y la miseria de la mayoría, y ello lo presentan, además, como voluntad divina. Atacan también con dureza a las injusticias de sus propios gobiernos internos, pero ello no es ahora nuestro tema...

Estos oráculos buscan ante todo que nadie se deje engañar: esos acaparamientos, esas violencias, esos desprecios tan radicales a otros seres humanos, de ninguna manera son queridos por Yavé, por más que sean presentados disfrazados de hermosos ropajes religiosos. Desenmascaran también las verdaderas intenciones de los imperios, que generalmente se reducen a conseguir un sometimiento económico (impuestos) y comercial, además de una consiguiente invasión cultural.

Destaca en los oráculos proféticos la denuncia contra todo lo que hoy llamamos violación de los derechos humanos: masacres de civiles, esclavitud, hambre, abuso de mujeres y niños, robo institucional, odio, falta de libertad, violencia y crueldad a todas las escalas...

Otro aspecto que enfatizan es la seguridad de que, aunque el imperio se proclame eterno, por más fuertes que parezcan, y aunque sea muy grande su orgullo, su poderío acabará pronto. Y su caída será justamente a partir de sus propias contradicciones; su propio veneno interior les va a matar: su orgullo egoísta y sus lujos desenfrenados, su cinismo, su hipocresía y sus intrigas internas y su capacidad de violencia... Sus propios ídolos les llevarán a la ruina.

Aunque acá no le hemos dado amplia cobertura, estos oráculos acaban siempre dando esperanzas al pueblo de que llegarán nuevas épocas, centradas en Dios, y por ello, prósperas y fraternas.

Invitamos a los lectores a leer, meditar y dialogar esta selección de citas que presento a continuación. Si las encuentran de actualidad, sería bueno que amplíen sus lecturas leyendo las citas completas...

 

 

José L. Caravias sj

 

1. Fe en el Dios solidario con los oprimidos y empobrecidos:

Yavé dijo: He visto la humillación de mi pueblo en Egipto y he escuchado sus gritos al ser maltratado por sus mayordomos; conozco sus sufrimientos. 8 He bajado para liberarlo del poder de los egipcios... Su clamor ha llegado hasta mí y he visto cómo los egipcios los oprimen. Ex 3,7.9

Ex 3,10 Ve, pues; yo te envío a Faraón para que saques de Egipto a mi pueblo.

Sal 9,13 Yavé pide cuentas por la sangre derramada; se acuerda y no olvida el clamor de los oprimidos.

Sal 72,13 Él se apiada del débil y del pobre; de la opresión violenta rescata su vida, pues su sangre es preciosa ante sus ojos.

Eclo 35,16 El Señor escucha la oración del oprimido; 17 no desoye la súplica del huérfano... 18 Las lágrimas de la viuda que corren por sus mejillas, 19 ¿no son acaso un clamor contra quien se las hace derramar?... Dios no las verá sin irritarse...

Jn 15,12 Este es mi mandamiento: que se amen unos a otros como yo los he amado.

Mt 25,40 En verdad les digo que cuanto hicieron con alguno de los más pequeños de estos mis hermanos, me lo hicieron a mí mismo... 45 Siempre que no lo hicieron con alguno de estos más pequeños, dejaron de hacérmelo a mí.

Mt 25,41¡Malditos, aléjense de mí y vayan al fuego eterno!... 42 Porque tuve hambre y ustedes no me dieron de comer; tuve sed y no me dieron de beber; 43 era forastero y no me recibieron en su casa; estaba sin ropa y no me vistieron; estuve enfermo y encarcelado y no me visitaron...

Hch 9,5 ¿Por qué me persigues?... Yo soy Jesús a quien tú persigues...

Mt 23,9 No llamen Padre a nadie en la tierra, porque ustedes tienen un solo Padre,... y todos ustedes son hermanos.

Gál 3,26 Todos son hijos de Dios gracias a la fe... 28 Ya no hay diferencia entre judío y griego, entre esclavo y hombre libre; no se hace diferencia entre hombre y mujer, pues todos ustedes son uno solo en Cristo Jesús.

Jn 17,21 Que todos sean uno, como tú, Padre, estás en mí y yo en ti.

 

 

2. Denuncias contra los imperios en nombre del Dios solidario:

 

Amós

Contra Damasco

Am 1,3 Am 1,3 Así dice Yavé: "Mi sentencia en contra de Damasco será inapelable por sus innumerables crímenes. Porque machacaron a los de Galaad como se trilla el trigo.

Am 1,9 Porque vendieron como esclavos poblaciones enteras, sin acordarse de su alianza con sus hermanos.

Am 1,11 Porque ha perseguido con espada a su hermano ahogando todo sentimiento de piedad, porque le tiene un odio siempre vivo y le guarda un rencor que nunca pasa.

Am 1,13 Porque ellos al extender sus dominios abrieron el vientre de las mujeres embarazadas...

 

Nahún

Contra Nínive

Nah 1,12 Así dice Yavé: Por más potentes y poderosos que sean, serán cortados y desaparecerán.

Nah 2,12 ¿Dónde está la cueva de los leones, guarida de sus cachorros, donde iban a llevar sus crías sin que nadie los molestara? 13 El león desgarraba para sus cachorros; despedazaba para sus leonas y llenaba su cueva de víctimas y su guarida de despojos. 14 Pero aquí estoy yo contra ti, dice Yavé: yo convertiré en cenizas tus carros, y la espada devorará tus cachorros. Yo pondré fin a tus robos, y no se oirá más el grito de tus mensajeros.

Nah 3,1 Pobre de la ciudad de sangre, toda llena de mentira, de rapiña, de incesantes robos... 4 Está pagando sus muchas prostituciones la prostituta de encantadores atractivos, maestra en sortilegios, que engañaba a los pueblos con sus prostituciones y a las naciones con sus hechicerías. 5 Aquí estoy contra ti, palabra de Yavé, voy a alzar tus faldas hasta tu cara; mostraré a las naciones tu desnudez, y verán los reinos tus vergüenzas. 6 Arrojaré inmundicias sobre ti, te deshonraré y te pondré como espectáculo y todo el que te vea, huirá de ti.

Nah 3,16 Habías multiplicado tus mercaderes más que las estrellas del cielo; 17 tus guardias, como langosta, y tus funcionarios como enjambres de insectos que se posan en los cercos en un día de frío... 19 ¡No hay remedio para tu fractura, tu llaga es incurable! Todos los que oyen aplauden por tu ruina; pues, ¿sobre quién no pesó constantemente tu crueldad?

 

Isaías

Contra Babilonia

Is 13,11 Voy a castigar a todo el mundo por su maldad y a los perversos por sus crímenes; acabaré con el orgullo de la clase alta y humillaré la soberbia de los dictadores.

Is 13,19 Babilonia, la perla de los reinos, la joya y orgullo de los caldeos, será destruida por Dios, como Sodoma y Gomorra... 22 Las hienas aullarán en sus castillos y los chacales en sus lujosos palacios...

Is 14,5 ¡Cómo ha terminado el tirano y acabado su arrogancia! Yavé ha roto el cetro de los malvados, el bastón de los opresores, 6 al que les pegaba a los pueblos con rabia, golpeándolos sin cesar, y oprimía con furia a las naciones, persiguiéndolas sin descanso.

Is 14,12 ¿Cómo caíste desde el cielo, estrella brillante, hijo de la Aurora, y estás derrumbado por tierra, agresor de naciones? 13 En tu corazón decías: "Subiré hasta el cielo y levantaré mi trono encima de las estrellas de Dios, me sentaré en la montaña donde se reúnen los dioses; 14 subiré a la cumbre de las nubes, seré igual al Altísimo." 15 Pero, ¡ay!, has caído en las honduras del abismo, en el lugar adonde van los muertos. 16 Los que te ven se te quedan mirando, meditando tu suerte: "¿Es éste el que espantaba a la tierra y hacía temblar a los reinos, 17 el que convertía al mundo en un desierto, arrasaba las ciudades y nunca abría la cárcel a sus presos?"

Is 14,19 Has sido arrojado lejos de tu sepulcro, como una basura que molesta, como un cadáver pisoteado... 20 No tendrás la sepultura de los reyes, porque has desolado tu tierra y asesinado a tu pueblo.

Is 16,5 Cuando se haya terminado la opresión, haya desaparecido el tirano, y se hayan alejado los que aplastan el país, entonces, el trono tendrá como base la dulzura y en él se sentará con confianza, bajo la carpa de David, un juez amante del derecho, y dispuesto a hacer justicia.

 

 

Jeremías

Contra Babilonia

Jer 50,1 Palabra de Yavé, que dijo al profeta Jeremías contra Babilonia.

Jer 50,17 Israel era una oveja perdida, perseguida por leones. Primero, el rey de Asur la devoró, y luego, Nabucodonosor, rey de Babilonia, se comió hasta sus huesos. 18 Por eso, así habla Yavé de los Ejércitos, el Dios de Israel: Estoy listo para castigar al rey de Babilonia y a su país, como ya castigué al rey de Asur.

Jer 50,23 ¿Cómo se ha partido en mil pedazos el martillo de toda la tierra? ¿Cómo es posible que Babilonia se haya convertido en espanto de las naciones?

Jer 50,31 Contra ti me dirijo, Insolencia, dice el Señor Yavé de los Ejércitos; ha llegado tu día, la hora de tu castigo. 32 Insolencia tropezará y caerá al suelo, sin tener quien la levante.

Jer 50,33 Los hijos de Israel sufren juntos la opresión; los que los han hecho cautivos los retienen y se niegan a soltarlos. 34 Pero su Redentor es poderoso, su nombre es Yavé de los Ejércitos. El ha tomado la defensa de su causa; dará paz al mundo, pero hará temblar a los habitantes de Babilonia.

Jer 50,35 Guerra a Babilonia, sus jefes y sus sabios. 36 ¡Guerra a sus adivinos, para que se vuelvan locos! ¡ Guerra a sus soldados, para que tiemblen de miedo! 37 ¡ Guerra a toda la mezcolanza de tropas aliadas que hay dentro de ella, para que se vuelvan cobardes! ¡ Guerra a sus tesoros, para que sean saqueados! 38 ¡ Guerra a sus aguas, para que se sequen! Porque es un país de ídolos y están locos por sus horribles imágenes.

Jer 51,6 Salgan de en medio de Babilonia y que cada cual salve su vida. 7 Babilonia era una copa de oro que embriagó al mundo entero, ya que todas las naciones tomaron vino en ella y perdieron la razón.

Jer 51,13 Ciudad opulenta, ha llegado tu fin, el término de tus rapiñas.

Jer 51,34 El pueblo de Sión dice: "Me comió y me chupó el rey de Babilonia; me dejó como un plato vacío, me tragó igual que un dragón, se llenó la panza con mis mejores manjares. 36 Por lo tanto, así habla Yavé: Aquí estoy para tomar la defensa de tu casa y para asegurarte tu venganza.

Jer 51,41 ¡Ay, Babilonia conquistada, capturado el orgullo del mundo! ¡Ay Babilonia convertida en el espanto de las naciones?

Jer 51,45 Salgan de allí, pueblo mío! ¡Que cada uno de ustedes salve su vida...! 46 Pero que no desfallezca su corazón ni se asuste por las noticias que circularán por el país...

Jer 51,57 Haré emborracharse a sus jefes y a sus sabios, a sus gobernantes, funcionarios y soldados, que caerán en un sueño eterno para no despertar más. ¡Así lo declara el Rey, que se llama Yavé de los Ejércitos!

 

 

Habacuc

Contra el imperio opresor (¿Asiria, Egipto, caldeos?)

Hab 2,6 ¡Ay de ti, que te haces rico con lo que no te pertenece! ¿Hasta cuándo seguirás amontonando las riquezas que tomaste prestadas?... 8 Porque tú les has robado a un sinnúmero de pueblos, asesinado a su gente, arrasado el territorio, sus ciudades y habitantes, todos los demás países te despojarán a ti.

Hab 2,9 ¡Ay de ti, que has llenado tu casa con el producto de tus robos, para ponerte a salvo de todo peligro!

Hab 2,10 De ese modo has cubierto tu casa de vergüenza, y has causado tu propia destrucción al destruir a numerosas naciones. 11 Aun las piedras de los muros y la madera de las vigas gritarán en contra tuya.

Hab 2,12 ¡Ay de ti que construyes una ciudad a base de sangre y fundas un pueblo con medios injustos!

Hab 2,15 Ay de ti que emborrachas a tus vecinos dándoles vino mezclado con drogas, para humillarlos contemplando su desnudez. 16 Esto te acarreará más vergüenza que fama...

Hab 2,17 Sobre ti recaerán los males que le hiciste y hasta sus animales se echarán sobre ti, pues tú matas a los hombres, arrasas el país con sus ciudades y terminas con todo ser viviente.

 

 

Ezequiel

Contra Tiro (Imperio del comercio)

Ez 26,3 El Señor dice así: Tiro, estoy en tu contra.

Ez 26,17 ¡Ay! Cómo has caído, cómo has desaparecido de los mares, tú, la ciudad famosa, tan poderosa en el mar, que infundía terror a los habitantes del mar.

Ez 27,4 Tú dijiste: Soy hermosa y perfecta. Y tus límites estaban en alta mar... 15 Tenías en tus manos el comercio de innumerables países; te pagaban con colmillos de marfil y con ébano. 16 Pagaban la multitud de tus productos con piedras preciosas, telas finísimas, corales y rubíes. 24 Traían a tus mercados vestidos de lujo, alfombras de muchos colores, cables trenzados y firmes.

Ez 27,26 Eras como una nave en alta mar, toda cargada de riquezas. Tus remeros te llevaron por aguas profundas, pero el viento del este te destrozó en alta mar.. 27 Tus riquezas, tus mercaderías y tus fletes, tus marineros y pilotos, tus expertos comerciales y todos tus guerreros que transportas se hundirán en lo profundo del mar en el día de tu ruina.

Ez 27,33 Con la abundancia de tus riquezas y productos enriquecías a los reyes de la tierra. 34 Pero ahora fuiste tragada por las olas hasta lo profundo del mar. Tus mercaderías y tus hombres todos se fueron a pique contigo.

Ez 28,2 Eres muy creído y hasta piensas: Yo soy un dios, y como un dios vivo en medio del mar. Pero tú eres un humano y no un dios, ¿y podrías en tus pensamientos igualarte con Dios?

Ez 28,4 Con tu sabiduría y tu inteligencia afirmaste tu poder; el oro y la plata llegaron a tus cofres. 5 Muy grande es tu sabiduría, y tus negocios te hicieron más poderoso; y mientras crecía tu poder, te engreías cada vez más.

Ez 28,6 Así habla el Señor: Tú te igualaste con Dios en tus pensamientos, 7 pero yo hago que te vengan encima unos bárbaros, la más temible de las naciones, y su espada se medirá con tu cultura tan refinada...

Ez 28,16 Con el avance de tu comercio te llenaste de violencia y de pecados.

Ez 28,17 Tu corazón se había ensoberbecido por tu belleza. Tu sabiduría se había corrompido por tu grandeza, y yo te derribé en tierra y te puse como escarmiento ante los reyes. 18 Sacaré de ti mismo un fuego que te devore, que te reduzca a cenizas ante los ojos de cuantos te contemplan.

Ez 28,22 Esto dice el Señor: Yo me declaro tu enemigo, Sidón; en medio de ti voy a ser glorificado. Y cuando ejecute la sentencia contra ti y demuestre así mi santidad, se reconocerá que yo soy el Señor.

 

 

Contra Egipto

Ez 29,3 Esto dice el Señor Dios: Vengo contra ti, oh faraón, rey de Egipto, monstruo enorme que estás echado en medio de tus cañaverales y dices: Los canales son míos, yo los hice. 4 Pero yo te clavaré arpones en las fauces y haré que los peces de tu Nilo se te peguen a las escamas.

Ez 30,6 Caerán los que apoyan a Egipto y su soberbio imperio quedará destruido... 18 El día se convertirá en noche cuando yo haga allí pedazos los bastones de mando de Egipto y se acabe su poder arrogante.

Ez 32,2 Parecías león de las naciones, pero eres cocodrilo del Nilo; chapoteas en la corriente y enturbias las aguas con tus patas. 3 Esto dice el Señor Yavé: Tenderé mis redes sobre ti y la multitud de tus pueblos y con ellos te sacaré fuera.

 

 

Contra Gog y Magog (Imperio Sirio: Antíoco IV)

Ez 38,10 Así habla Yavé: Aquel día proyectarás planes perversos. 11 Pensarás: Voy a subir contra un país sin defensa, marcharé contra gente tranquila que vive en paz. Todos habitan ciudades sin murallas, cerrojos, ni puertas. 12 Iré a saltear a un pueblo que fue reunido de entre las naciones. Atacaré ciudades repobladas después de haber sido arruinadas. Iré a robar a un pueblo que vive en el ombligo de la tierra, entregado al comercio y a la crianza del ganado... 13 Seguramente vas a tomar un gran botín: para esto has reunido semejante ejército, para echar mano de un montón de bienes y animales, porque necesitas mucha plata y oro.

 

 

Daniel

Juicio contra los imperios (Babilonia, Persia, Siria...)

Dn 7,3 Cuatro animales enormes, todos diferentes entre sí, salieron del mar. 4 El primero era como un león con alas de águila (Babilonia)... 5 El segundo era una bestia semejante a un oso (Midia); iba levantada de un lado y tenía tres costillas entre los dientes. Se le decía: "Anda y devora mucha carne." 6 Yo seguí mirando y vi otra bestia como un leopardo (Persia) con cuatro alas en el lomo; tenía cuatro cabezas y se le dio el poder. 7 Seguí mirando en mis visiones nocturnas y vi la terrible cuarta bestia. Era espantosa y extraordinariamente fuerte; tenía enormes dientes de hierro; comía, trituraba y lo sobrante lo pisoteaba con las patas (Siria: Antíoco IV).

Dn 7,25 Este rey insultará al Dios Altísimo y perseguirá a los santos de Dios... 26 Pero llegará el juicio y se le quitará su imperio; será destruido, borrado totalmente.

Dn 8,3 Levanté los ojos y vi un carnero que estaba delante del río. Tenía dos cuernos largos, pero uno más alto que el otro y el más alto se erigió después del otro (Medos y Persas). 4 Vi que el carnero atacaba contra el poniente, el norte y el sur. Ningún animal podía resistirle, ni nada escapar a su poder. Hacía lo que le parecía y así se hizo grande.

Dn 8,5 Estaba yo pensando, y en esto vino de occidente un macho cabrío (Alejandro Magno) como sobrevolando la tierra entera sin tocar el suelo, que tenía un cuerno enorme entre los ojos. 6 Vino donde el carnero de dos cuernos que ya había visto delante del río y corrió hacia él con todo el ardor de su fuerza. 7 Vi cómo alcanzaba al carnero y se ensañaba con él; lo embistió y le rompió los dos cuernos sin que el carnero pudiera resistirle. Lo echó por tierra y lo pisoteó; no había nadie que librara al carnero de su poder.

Dn 8,8 El macho cabrío se hizo muy grande, pero cuando estaba en todo su poder, se rompió el gran cuerno y en su lugar despuntaron cuatro enormes cuernos en dirección de los cuatro vientos del cielo. 9 De uno de ellos salió un cuerno pequeño (Antíoco IV); éste creció mucho en dirección al sur, al oriente y hacia el País Hermoso. 10 Creció hasta el ejército del cielo y precipitó a la tierra parte de las estrellas y las pisoteó con las patas.

Dn 8,23 Cuando los pecadores lleguen al colmo, surgirá un rey insolente y hábil en engaños. 24 Su fuerza crecerá tanto que proyectará cosas inauditas. Sus empresas prosperarán; destruirá a poderosos y al propio pueblo de los santos. 25 Llevará a cabo sus engaños, se creerá mucho y, en plena paz, destruirá a muchos... Pero, sin que intervenga mano alguna, será destruido.

Dn 11,21 Se levantará un hombre despreciable (Antíoco IV)... que se apoderará del reino a fuerza de intrigas... 23 Obrará con engaño aprovechando las alianzas hechas con él y, con poca gente, se hará fuerte.

Dn 11,31 Mandará parte de sus fuerzas a profanar el santuario-fortaleza; suprimirán el sacrificio perpetuo y pondrán allí el abominable ídolo del devastador. 32 Tratará de comprar con halagos a los que renieguen de la alianza; pero el pueblo de los que conocen a su Dios se mantendrá firme.

Dn 11,36 El rey obrará caprichosamente, se engreirá y se exaltará por encima de todos los dioses, y dirá insolencias inauditas contra el Dios de los dioses; prosperará hasta que se colme la ira... 37 No hará caso de los dioses de sus padres... 38 En lugar de ellos venerará al dios de las fortalezas... 39 A todos los que adoren a este rey, él les hará grandes honores, los pondrá en puestos importantes y les dará tierras como recompensa.

 

 

Jesús

Mt 20,25 Ustedes saben que los gobernantes de las naciones actúan como dictadores y los que ocupan cargos abusan de su autoridad. 26 Pero no debe ser así entre ustedes. Al contrario, el que quiera ser más importante entre ustedes, debe hacerse su servidor.

Mc 13,5 Estén sobre aviso y no se dejen engañar. 6 Porque muchos vendrán en mi lugar, y dirán: "Yo soy el que esperaban", y engañarán a muchos. 7 Cuando oigan hablar de guerras y de rumores de guerra, no se alarmen, porque eso tiene que pasar, pero todavía no será el fin. 8 Habrá conflictos: nación contra nación, y reino contra reino... Estos serán los primeros dolores del parto...

Mt 24,23 Si alguien les dice: Miren, el Mesías está aquí o está allá, no le crean. 24 Porque se presentarán falsos cristos y falsos profetas, que harán cosas maravillosas y prodigios capaces de engañar, si fuera posible, aun a los elegidos de Dios. 25 Miren que yo se lo he advertido de antemano.

Lc 6,24 ¡Pobres de ustedes, los ricos, porque tienen ya su consuelo! 25 ¡Pobres de ustedes, los que ahora están satisfechos, porque después tendrán hambre! ¡Pobres de ustedes, los que ahora ríen, porque van a llorar de pena!...

Jn 15,18 Si el mundo los odia, sepan que antes me odió a mí... 20 Acuérdense de lo que les dije: el servidor no es más que su patrón. Si a mí me han perseguido, también los perseguirán a ustedes.

 

María

Lc 1,52 Derribó a los poderosos de sus tronos y exaltó a los humildes. 53 Colmó de bienes a los hambrientos, y despidió a los ricos con las manos vacías.

 

Pablo

Col 3,5 No se deje llevar por la avaricia, que es una forma de idolatría.

1Tim 6,9 Los que quieren ser ricos caen en tentaciones y trampas; un montón de ambiciones locas y dañinas los hunden en la ruina hasta perderlos. 10 Debes saber que la raíz de todos los males es el amor al dinero.

 

Santiago

Sant 4,1 ¿De dónde proceden esas guerras y esas riñas entre ustedes? De aquí abajo, por supuesto; son el fruto de las codicias, que hacen la guerra dentro de ustedes mismos. 2 Ustedes quisieran tener y no tienen, entonces matan; tienen envidia y no consiguen, entonces no hay más que discusiones y peleas...

Sant 5,1 Ustedes, los ricos, lloren y laméntense por las desgracias que les vienen encima. 2 Los gusanos se han metido en sus reservas y la polilla se come sus vestidos; 3 su oro y su plata se han oxidado. El óxido se levanta como acusador contra ustedes y como un fuego les devora las carnes. Han atesorado inútilmente... 5 Se han dado ustedes una vida de lujo y placeres, engordando como ganado, ¡y ya llega el día de la matanza! 6 Ustedes condenaron y asesinaron al inocente, ¿no se les va a enfrentar Dios?

 

 

Apocalipsis

La Gran Bestia (Imperio romano: Nerón y Domiciano)

Ap 17,1 Te voy a mostrar el juicio de la famosa prostituta... 2 Con ella pecaron los reyes, y los habitantes de la tierra se emborracharon con el vino de su idolatría. 5 En su frente se podía leer su nombre: Babilonia la Grande, la madre de las prostitutas y de los abominables ídolos del mundo entero. 6 Y observé que se había embriagado con la sangre de los santos y de los mártires de Jesús.

Ap 18,2 ¡Cayó, cayó la Gran Babilonia! Se ha convertido en guarida de demonios, en refugio de espíritus inmundos...; 3 porque con el vino de su prostitución se han emborrachado todas las naciones; los reyes de la tierra pecaron con ella, y los comerciantes del mundo se hicieron ricos con ella, pues era buena para gastar."

Ap 18,4 Aléjate de ella, pueblo mío, no sea que te hagas cómplice de su maldad y tengas que compartir sus castigos.

Ap 18,9 Llorarán y harán duelo por ella los reyes de la tierra que con ella se acostaban y lo pasaban bien, cuando vean la humareda de su incendio... 11 Llorarán y se lamentarán por ella los comerciantes de la tierra, porque ya no hay quien compre sus mercaderías... 14 Se acabó para ti el lujo y el esplendor...

Ap 18,15 Los que traficaban con estas cosas y con ella se enriquecían, se mantendrán a distancia horrorizados por su castigo... ¡Ay, ay, Gran Ciudad, la que se vestía de lino, púrpura y escarlata, y resplandecía de oro, piedras preciosas y perlas! 17 ¡En una hora se acabó tanta riqueza!... 19 ¡Ay, ay de la Gran Ciudad, donde se hicieron muy ricos, gracias a su lujo, cuantos tenían naves en el mar! ¡En una hora ha quedado devastada!... 23 Tus comerciantes eran los magnates de la tierra, y con tus hechicerías se extraviaron las naciones.

Ap 18,24 Miren que en esta ciudad se encontró sangre de profetas y de santos; sí la sangre de todos los que fueron muertos en la tierra.

Ap 13,11 Vi luego otra bestia que surgía de la tierra y tenía dos cuernos de cordero, pero hablaba como un dragón. 12 Esta segunda bestia está al servicio de la primera, y dispone de todo su poder y autoridad; hace que la tierra y todos sus habitantes adoren a la primera bestia... 13 Realiza grandes prodigios... 14 Por medio de ellos engaña a los habitantes de la tierra y los persuade a que hagan una estatua en honor de la bestia... 16 Consigue que todos, grandes y pequeños, ricos y pobres, libres y esclavos, se pongan una marca en la mano derecha o en la frente; 17 ya nadie podrá comprar o vender si no está marcado con el nombre de la bestia...

Ap 19,20 Pero la bestia fue capturada y con ella el falso profeta que había realizado maravillas al servicio de la bestia, engañando con ellas a los que habían aceptado la marca de la bestia y a los que adoraban su estatua. Los dos fueron arrojados vivos al lago de azufre hirviente.

Ap 20,10 Después el diablo, el seductor, fue arrojado al lago de fuego y azufre, donde ya se encontraban la bestia y el falso profeta.

Ap 20,14 Después la Muerte y el Lugar de los muertos fueron arrojados al lago de fuego: este lago de fuego es la segunda muerte.

Ap 21,1 Después vi un cielo nuevo y una tierra nueva, pues el primer cielo y la primera tierra habían desaparecido... 3 Y oí una voz que clamaba desde el trono: "Esta es la morada de Dios con los hombres; él habitará en medio de ellos; ellos serán su pueblo y él será Dios-con-ellos; 4 él enjugará las lágrimas de sus ojos. Ya no habrá muerte ni lamento, ni llanto ni pena, pues todo lo anterior ha pasado." 5 Y el que está sentado en el trono dijo: "Ahora todo lo hago nuevo".

2Pe 3,13 Nosotros esperamos, según la promesa de Dios, cielos nuevos y una tierra nueva en la que reine la justicia.