SANTA SEDE

 

EL PAPA RECUERDA A TODAS LAS PERSONAS QUE NO PUEDEN DISFRUTAR DE VACACIONES

Prepara su viaje a Siria, tras las huellas de san Pablo

CIUDAD DEL VATICANO, 16 julio (ZENIT.org).- Juan Pablo II quiso dedicar el único encuentro público previsto en estos doce días de vacaciones a saludar a todas las personas que están disfrutando de unos días de descanso y, sobre todo, a quienes no podrán gozar de las merecidas vacaciones veraniegas.

Este domingo a mediodía, Les Combes, la localidad alpina en la que descansa el Papa desde el pasado 10 de julio, ofrecía un espectáculo hasta ahora inusual. Dado que el chalet en el que se hospeda el pontífice en este año cuenta con un terreno mucho más grande que el de años anteriores, todos los que quisieron pudieron subir hasta esta latitud para participar en el tradicional encuentro que el obispo de Roma tiene todos los domingos con los peregrinos.

Ambiente de fiesta 
La gente comenzó a llegar a las 7.30 de la mañana: al final eran más de cinco mil personas. Cuando el Papa salió a unos centenares de metros de su casa para rezar con todos la oración mariana del «Angelus». Al aparecer algunos de los presentes, en su mayoría artesanos y agricultores, le entregaron los regalos que le habían traído: productos de artesanía típicos del lugar, esculturas talladas en madera y los típicos quesos regionales... Los niños del coro de la escuela, que ya conocen al Papa, cantaron algunas canciones montañeras. Los presentes se encontraban circundados por las cimas nevadas del Mont Blanc y del Gran Combin, sobre las que el sol reflejaba con gran dificultad sus rayos, oculto tras una persistente capa de nubes.

Las vacaciones se convirtieron también en el tema principal de las palabras que dirigió el Papa: «Aquí, entre los agradables bosques y valles, el físico se regenera y el espíritu puede dedicarse mejor a la reflexión y a la contemplación».

Momentos de «enriquecimiento interior» 
Desde la serenidad de los Alpes, el Santo Padre quiso «recordar a quien se encuentra de vacaciones en estos valles o en otros sitios de montaña o de mar --dijo--. A todos les invito a hacer de estos días de merecido descanso veraniego un momento de enriquecimiento interior y de favorable descanso familiar».

No todos tienen la suerte de poder salir a disfrutar de días de merecido descanso y el pontífice no quiso olvidarse de ellos. Envió un «saludo cariñoso» a los enfermos, a los ancianos, a las personas solas y a los encarcelados --con quienes se había reunido el domingo pasado de manera simbólica en la prisión romana de «Regina Coeli»--. «Les aseguro que me acordaré diariamente de cada uno en la oración», afirmó.

Era el día de la fiesta de la Virgen del Monte Carmelo. La cima de ese monte es cantada continuamente en la Biblia por su particular seducción. Por ello, no pudo dejar de comentar los elementos simbólicos que encierra esa cumbre de Israel, cercana a Haifa, en la que el profeta Elías «defendió sin descanso la integridad y la pureza de la fe del pueblo elegido en el Dios vivo», como recordó el mismo Papa. «En esta montaña, en el siglo XII después de Cristo --añadió--, se reunieron algunos eremitas para dedicarse a la contemplación y la penitencia. De su experiencia espiritual surgió la Orden de los Carmelitas».

La cumbre de la santidad 
Karol Wojtyla, que antes de entrar al seminario de Cracovia había pensado seriamente en hacerse carmelita tras leer los escritos de san Juan de la Cruz y santa Teresa de Ávila, continuó explicando que «el Carmelo indica simbólicamente el monte de la adhesión total a la voluntad divina y de nuestra salvación eterna. Todos estamos llamados a escalar valientemente y sin detenernos esta montaña espiritual. Caminando junto a la Virgen, modelo de fidelidad total al Señor, no tendremos miedo de los obstáculos o dificultades. Apoyados por su materna intercesión, podremos realizar plenamente, como Elías, nuestra vocación de auténticos "profetas" del Evangelio en nuestro tiempo».

Las vacaciones del Papa en este Jubileo son breves: terminarán el 22 de julio. En estos días, en los que el tiempo ha sido muy cambiante, ha salido en coche para disfrutar del paisaje junto a sus colaboradores y amigos. Además de compartir amplios momentos de conversación, como ha confirmado hoy el mismo Joaquín Navarro-Valls, portavoz de la Santa Sede, que le acompaña en estas vacaciones, está dedicando horas a la lectura de todo tipo de libros (literatura, historia y pensamiento), a la oración y a pensar en las próximas etapas del gran Jubileo del año 2000.

En concreto, en declaraciones a la televisión italiana, Navarro-Valls ha confirmado que se está preparando el viaje del Santo Padre a Damasco (Siria), siguiendo las huellas de san Pablo. Ahora bien, el portavoz no adelantó ninguna fecha, pues la agenda del Papa para estos meses está realmente «cargada». 


 

LO QUE NO SE DICE SOBRE LA REDUCCION DE EMBRIONES EN EMBARAZOS MULTIPLES

Habla Gonzalo Miranda, experto en Bioética de la Universidad Gemelli

CIUDAD DEL VATICANO, 16 julio (ZENIT.org).- El 13 de julio pasado, el Consejo Pontificio para la Familia publicaba una declaración en la que afirmaba que la técnica de reducción de embriones que se realiza cuando se dan embarazos múltiples constituye una forma de aborto procurado. Para comprender mejor las razones que han llevado a este pronunciamiento, «Zenit» ha entrevistado a Gonzalo Miranda, secretario del Centro de Bioética de la Universidad Católica del Sagrado Corazón de Roma --más conocida con el nombre de su fundador, Gemelli-- y profesor del Ateneo «Regina Apostolorum», institución universitaria que también tiene su sede en Roma.

«El documento publicado por el Pontificio Consejo para la Familia no hace más que recordar y subrayar algunos principios esenciales de la doctrina católica, que deberían ser también acogidos por cualquier persona sensata --afirma Miranda--. Posiblemente, la motivación inmediata de esa declaración esté ligada al reciente caso de una mujer italiana que se ha descubierto embarazada de ocho gemelos, a causa de una y hiper-estimulación ovárica realizada en vistas a la aplicación de una técnica de reproducción asistida. Claro, ahora vienen los "sabios de turno" y nos enseñan que lo más conveniente serían practicar la "reducción embrionaria". En pocas palabras, eliminar algunos embriones para que se salven otros».

«Se recurre, como casi siempre, a eufemismos que suenan hasta bonito --añade el experto en bioética--. "Reducción embrionaria". Y la gente, responde: "pues claro: ¿qué tiene de malo? Si son demasiados habrá que reducir su número...". No se explica, desde luego, en qué consiste esa reducción, "no sea que la gente se vaya a asustar". No se dice que, normalmente, se introduce una aguja en el tórax o en la cavidad cardiaca del embrión o feto, donde se inyecta una solución de cloruro de potasio o una solución salina, a veces aire, produciendo irremediablemente la muerte del bebé todavía no nacido».

«Naturalmente, siempre es posible cerrar los ojos (también los de la mente) --añade Miranda--, para no entender que lo que crece en el seno de una mujer embarazada no es un cúmulo de células, ni un ser extraterrestre, sino simplemente un ser humano (o, como en este caso, varios seres humanos). Me parece muy grave que haya tantas personas que se declaran favorables al aborto. Pero lo que me parece de verdad inaudito, y gravemente sintomático, es que haya personas que se esfuerzan apasionadamente por borrar a los no nacidos (embriones o fetos) de la lista de los seres humanos, a quienes todos hemos de respetar».

«Hace un año la Cámara de Diputados de Italia aprobó una propuesta de ley para regular la fecundación asistida, cuyo primer artículo declaraba que el embrión humano debe ser respetado y protegido --recuerda el experto el catedrático--. Pues bien, recientemente un grupo de izquierda en el Senado se empeñó hasta lograr que semejante "aberración" fuera cancelada de la propuesta de ley. No se trata ya simplemente de oponer los derechos de una mujer embarazada en graves dificultades a los derechos del embrión o del feto, como a veces argumentan los defensores aborto. Aquí hay una especie de "ensañamiento abortista", una actitud de auténtico ensañamiento contra los no nacidos, que lleva incluso a luchar contra cualquier tipo de expresión o declaración que pretenda protegerlos y defenderlos».

«El caso del embarazo de ocho gemelos de la señora italiana de Trapani, al que antes hacía mención, nos debe hacer sospechar sobre la seriedad con que operan algunos centros de Reproducción Asistida --añade--. Si la señora fue sometida a una hiper-estimulación ovárica para preparar una intervención técnica para la reproducción, será porque se suponía que era el único modo en que podía obtener un embarazo. Es decir, ella o él, o la pareja en cuanto tal, habían sido declarados estériles. Evidentemente, la esterilidad no era tan cierta, dado que el embarazo fue provocado por una relación sexual del todo natural. ¿Diagnóstico erróneo? ¿Ligereza en el diagnóstico? ¿Engaño? Un estudio de hace unos cuantos años mostraba que entre las parejas que están esperando la realización de la fecundación "in vitro" tiene el hijo por "métodos naturales" en un porcentaje que oscila entre el 4 y el 11%».

«Mientras las técnicas artificiales contribuyan más a llenar las cuentas bancarias de los médicos que las "técnicas naturales" --concluye el padre Gonzalo Miranda--, siempre habrá quien esté dispuesto a engañar». 


 

EL PAPA SE NIEGA A RESPONDER A LOS INSULTOS DE ALI AGCA

La lectura, una de sus pasiones durante estas vacaciones

LES COMBES, 17 julio (ZENIT.org).- En torno a las diez de la mañana de este lunes, Juan Pablo II salió de paseo en coche para disfrutar de un día, esta vez soleado, de descanso en las montañas, en compañía de sus colaboradores y amigos. Se cumple así la primera semana de descanso del pontífice en los Alpes italianos, en la que, a excepción del domingo en que se encontró con unos cinco mil peregrinos, no ha dejado ni un solo día de salir de excursión.

¿Esta descansando el Papa en estos días de vacaciones? Joaquín Navarro-Valls, portavoz de la Santa Sede, uno de los pocos que acompañan en estos días al obispo de Roma, ha querido responder a esta pregunta que le ha planteado «Radio Vaticano». «Yo diría que sí. Desde el primer día el Santo Padre ha subido a la montaña. Todos los días ha salido de excursión: el Papa ha caminado y, como siempre, ha encontrado también el tiempo para rezar y leer. Está muy relajado y todavía le queda casi una semana. Por el momento, diría que todo va bien».

Pasión por la montaña 
En la primera semana, el clima no fue muy bueno. Ahora bien, esto no desalienta al Papa, añade Navarro-Valls. «El Papa tiene a sus espaldas una larga historia de "montañero" y conoce bien el ambiente. Los imprevistos cambios climáticos son propios de la montaña. Hace unos días, en una misma mañana, vimos copos de nieve, algo de granizo y, después, un sol estupendo. El Papa estaba encantado con estos cambios».

A los habitantes y turistas del lugar, las autoridades les han pedido que respeten el descanso del Santo Padre y que eviten molestarle. «Creo que el Papa está feliz al ver, por una parte, la discreción de la población y de los turistas y, por otra, las manifestaciones de cariño que todos los días le hace la gente cuando regresa a su casa tras la excursión. El otro día, por ejemplo, mientras caminábamos por una senda a 2.300 metros de altura, una pareja de excursionistas nos adelantó. Ni siquiera se detuvieron, le saludaron y le dijeron: "Buenos días, Santo Padre". Se veía claramente el deseo de no disturbar de ningún modo esa intimidad buscada por el Papa en sus pocos días de vacaciones».

Lecturas 
El portavoz vaticano no ha querido revelar los autores de los libros que está leyendo el pontífice en estos días «para no hacer publicidad gratuita...». «Puedo decir --añade-- que los libros son sobre temas de literatura, historia, filosofía y teología. El Papa lee a los autores en el idioma original y, por tanto, se puede ver que lee en alemán, en español, en italiano, en francés. Eso sí, puedo asegurar que se ha traído muchos libros».

Navarro-Valls explica que la lectura es también un gran descanso para Juan Pablo II. «Dedica la mañana para el paseo más largo, pero mientras estamos todavía en la montaña, en la tarde, lee una hora y media o casi dos. Al regresar a casa hace lo mismo: tras sus oraciones, retoma los libros --de hecho la luz de su habitación se apaga tarde--. En el fondo, no hace más que aprovechar la oportunidad que le ofrecen las vacaciones, pues por desgracia durante el año no puede dedicar todo este tiempo a la lectura».

Con el pensamiento en las negociaciones de paz 
En estos días, el Papa trata también de seguir los grandes acontecimientos de la actualidad. El portavoz vaticano, en un encuentro que tuvo ayer con la prensa, afirmó que el Papa está preguntando por la evolución de las negociaciones de paz entre israelíes y palestinos que tienen lugar en Estados Unidos y reza particularmente por su buen resultado.

El caso Alí Agca 
Navarro-Valls explicó ayer a la prensa que ni el ni el Papa piensan responder a las acusaciones que ha hecho Mehmet Ali Agca. En una carta manuscrita, escrita en una prisión de Turquía, Agca ha escrito: «Querido hermano Papa, ¡dimite! No puedes permanecer en el vértice de una institución que es el centro del demonio y el basurero de la historia. Hermanos católicos, os amo, pero debéis abandonar el Vaticano que ha cambiado el tercer secreto de Fátima y ha organizado el asesinato del pontífice». El portavoz reveló que Juan Pablo II escribió personalmente hace menos de dos meses al presidente de la República Italiana, Carlo Azeglio Ciampi, para pedir un gesto de clemencia para quien trató de asesinarle en 1981, quien descontaba la cadena perpetua en las cárceles italianas.

«Creo que no tengo que comentar estas afirmaciones para no ayudar a Alí Agca en su campaña de autopublicidad», dijo el portavoz vaticano ayer en un encuentro informal con los periodistas. Aclaró que al pedir el indulto para el terrorista turco Juan Pablo II no soñaba con aclarar la verdad. «Era más bien una actitud de perdón, pues si en todos estos años la verdad no ha podido esclarecerse...». Navarro-Valls ha subrayado en varias ocasiones que al pedir clemencia para el ex lobo gris así como para otros detenidos de las cárceles de todo el mundo, el pontífice nunca ha tratado de entrometerse en la autonomía de los Estados. «Los Estados deben decidir de manera autónoma --añadió ayer--, el pontífice ha querido sólo comunicar su propio estado de ánimo, sin pedir ni exigir nada al Estado italiano».

Alí Agca está descontando en Turquía una condena de diez años por un asesinato y todavía tiene que responder ante la justicia de su país por acusaciones de otros delitos.


 

JUAN PABLO II RECUERDA LA EPOPEYA DE LA PATRONA DE LOS EMIGRANTES

Francesca Saverio Cabrini, apóstol de los pobres en América

CIUDAD DEL VATICANO, 17 julio (ZENIT.org).- Patrona de los emigrantes, y primera ciudadana estadounidense declarada santa: estos son algunos de los «records» de Francesca Saverio Cabrini, mujer que ha realizado una de las epopeyas caritativas más espectaculares del siglo XX.

Ciento cincuenta años después de su nacimiento y medio siglo después de su reconocimiento como intercesora de los expatriados, Juan Pablo II, que se encuentra de vacaciones, ha querido escribir un mensaje a las Misioneras del Sagrado Corazón, hijas espirituales de la Madre Cabrini.

El pontífice, en su mensaje, traza los rasgos biográficos de esta «Madre coraje de las Américas», como ha sido definida esta mujer pequeña y grácil, pero animada por una fe inquebrantable. De este modo, recuerda su nacimiento en un pueblo de la región italiana de Lombardía, su llamada vocacional, la fundación de las Misioneras del Sagrado Corazón y la gran intuición de León XIII, quien, cuando la santa le dijo que quería partir de misionera a China, le indicó otra meta: «No vaya a Oriente, sino a Occidente».

Comenzaba así una aventura que llevaría a la Madre Cabrini a atravesar el Atlántico 24 veces. Primero llegó a Nueva York, con un puñado de hermanas de religión. Después, fue más lejos: Nicaragua, Brasil, Argentina... Siempre con un mismo objetivo: ayudar a las masas de desheredados que habían llegado al nuevo mundo en búsqueda de trabajo, creando para ellos y prácticamente de la nada escuelas, hospitales, orfanatos...

Escribe el Papa: «Su corazón materno, inquieto, les alcanzaba por doquier: en los tugurios, en las cárceles, en las minas. Sin tener miedo a las distancias, viajaba de Nueva York a New Jersey, de Pennsylvania a Illinois, de California a Louisiana y Colorado».

En Estados Unidos, donde se le llama familiarmente «Madre Cabrini», hoy existe una gran devoción por esta gran apóstol que se naturalizó ciudadana estadounidense sin perder para nada el amor por su tierra lejana. Su obra continúa hoy en las Misioneras del Sagrado Corazón, que trabajan en las «favelas» brasileñas en la ayuda de los niños de la calle o en la asistencia de los emigrantes de los países de América, en un mundo que cambia pero que, como dice el Papa en su mensaje, experimenta los mismos problemas que tuvo que afrontar la santa Francesca en su apostolado: «el permiso de residencia, la enseñanza del idioma, la integración en la sociedad, la ayuda de los clandestinos en los centros de detención».

El mensaje de vida de la patrona de los emigrantes sigue cobrando más actualidad que nunca, por ello, el Papa pide a sus hijas espirituales que sigan promoviéndolo sin descanso, «en un constante esfuerzo por la tutela y la promoción de todo ser humano».


 

LA ÚLTIMA FRONTERA DE LA DIVERSIÓN: LA SILLA ELÉCTRICA

«L'Osservatore Romano»: cae la frontera entre lo real y lo virtual

CIUDAD DEL VATICANO, 18 julio (ZENIT.org).- «L'Osservatore Romano» dedica en sus páginas de hoy un artículo a analizar la última moda de la diversión en Italia: «el juego de la silla eléctrica».

Según explica la edición italiana del diario oficioso del Vaticano, una sala de juegos está experimentando una afluencia inesperada desde el día en que estrenó esta «desconcertante y macabra frontera de la diversión»: «como condenado a muerte, sentado en una silla de madera, idéntica a la que se usa para las ejecuciones capitales en los Estados Unidos, basta meter unas monedas para experimentar el escalofrío de la silla eléctrica».

Virtualmente real 

«Familias enteras hacen cola --informa el artículo--. Centenares de niños, adolescentes y adultos llenan la sala para ver "quién aguanta más", para ver quién llega hasta el final. Se gana si uno logra "dejarse matar", de lo contrario, si te detienes antes, eres un "gallina"».

El aparato tiene todos los elementos necesarios para provocar fuertes emociones: electrodos colocados en las muñecas, cinturones, barrotes, música de fondo que va aumentando progresivamente de volumen, luces que se encienden cuando el «condenado» «muere». Obviamente todo es virtual, sin riesgo para la salud, afirman los dueños de la sala de juegos, todo consiste en un intenso hormigueo en las manos y una fuerte dosis de emoción al sentir en el cuerpo las improvisas vibraciones que aumentan rápidamente de intensidad.

«Todo virtual, ciertamente --reconoce «L'Osservatore Romano»--, menos una realidad humana que provoca perplejidad y preocupación. Más allá del obvio desconcierto por el placer macabro que da sentido a la idea, la noticia causa una cierta turbación por dos motivos».

¿Quién se acuerda de los condenados «reales»? «Ante todo, por el hecho de que se convierte en juego (juego experimentado directamente en primera persona) una realidad tan trágica como la pena de muerte. Quien se hace el valiente ante los amigos por el "valor" demostrado, quien se siente satisfecho por la descarga de adrenalina, quien se divierte con esta imitación de la silla eléctrica, ¿se da cuenta del drama de quienes esperan que el verdugo acabe verdaderamente con su existencia terrena?».

«Quienes vienen --responden los organizadores del juego-- no saben nada de la pena de muerte y no se plantean tantas preguntas». «Si esto es así --añade el diario vaticano--, no deja de ser triste. ¿Por qué no saben nada? ¿Por qué no quieren saber? Y, si saben, ¿por qué no se dan cuenta del problema?».

Esta cultura de la superficialidad, transmitida particularmente a niños y jóvenes, es para «L'Osservatore Romano» el gran problema que plantea el juego.

La lógica del videojuego 

El segundo motivo de preocupación es, según el diario, la «lógica del viedeojuego que se esconde detrás de esta experiencia. «¿Se acaba la partida? No pasa nada, tengo otra vida. Ante el letrero "game over", se puede meter otra moneda y comenzar desde el inicio. Y todo repetido de manera obsesiva y con esa verosimilitud que los progresos de la electrónica han hecho impresionante. Ahora bien, si la frontera entre la vida y la muerte se anula de una manera tan convincente y apasionante por el juego, ¿no puede suceder que en los espíritus más débiles provoque una confusión sumamente peligrosa entre la ficción y la realidad?».

«¿Acaso no es lo que sucede cada vez más en los numerosos episodios de las crónicas de los que son protagonistas niños y muchachos que para superar el aburrimiento se inventan el "juego" del crimen? --pregunta «L'Osservatore Romano»--. ¿Acaso no es esto lo que sucede en ciertas carreras delirantes nocturnas en coches lanzados a velocidad alocada y conducidos como si fueran un videojuego? Sólo que, en estos casos, si el juego termina en tragedia, la carrera acaba mal, y no hay otra moneda para volver a empezar la partida...».

El artículo termina con una última pregunta: ¿Queremos dar a entender esto a los muchachos, o vamos a seguir tranquilamente haciendo la cola con nuestros hijos para "jugar a la silla eléctrica"?». 


 

JUAN PABLO II SE ENCUENTRA CON UNA FAMILIA EN SU EXCURSIÓN ALPINA

Familiaridad al salir de casa en coche rumbo a la montaña

LES COMBES, 18 julio (ZENIT.org).- Juan Pablo II, que se encuentra de vacaciones veraniegas en Les Combes, localidad del Valle de Aosta, salió esta mañana como todos los días de excursión y, por primera vez desde que llegó a los Alpes italianos, el pasado 10 de julio, se ha detenido a conversar con una familia de jóvenes turistas.

Al salir de casa en coche, el Papa se detuvo además para saludar a las personas que se encontraban junto al camino. El ambiente era de familia: la gente le manifestó su cariño sin tratar de detenerle en su escapada a la montaña, aunque el pontífice no dio ninguna seña de tener prisa.

Las medidas de seguridad que se han desplegado en torno al Santo Padre son muy discretas. Se trata de medidas que no alejan, sino que más bien ordenan el contacto de la gente con el Papa. 


 

JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD: COMIENZA LA CUENTA ATRÁS

Los números de uno de los acontecimientos culminantes del Jubileo

CIUDAD DEL VATICANO, 18 julio (ZENIT.org).- La preparación de las Jornadas Mundiales de la Juventud, que tendrán lugar del 15 al 20 de agosto del año próximo, ha comenzado la cuenta atrás. Se calcula que un millón de chicos y chicas provenientes de los cuatro rincones del mundo se unirán para vivir juntos su Jubileo junto a Juan Pablo II.

En Italia, doscientos muchachos están recorriendo en estos momentos el país llevando por pueblos y ciudades la Cruz de la Jornada Mundial que presidirá los grandes acontecimientos.

La máquina organizativa funciona a pleno ritmo. Numerosas diócesis italianas, en ocasiones con la ayuda de ayuntamientos y gobiernos regionales, acogerán a medio millón de jóvenes en escuelas, cuarteles, tiendas de campaña...

En total, se espera la llegada de uno 600 mil jóvenes extranjeros, los demás serán italianos. Tras éstos, el grupo más numeroso podría seguir el procedente de Francia con unos 70 mil componentes. Unos dos mil vendrán en moto desde ese país. Se trata de una peregrinación de ocho días que descenderá de Francia a Italia: en cada etapa se unirán nuevos peregrinos «moteros» (para más información puede enviar un mensaje electrónico a bikemoine@aol.com). A los jóvenes franceses, se les unirán 75 obispos. Además los jóvenes galos cubrirán los gastos de 2 mil jóvenes de 58 países que no podrían participar por falta de recursos.

Los españoles y los polacos también serán muy numerosos, en total vendrán unos 40 mil de cada uno de estos dos países (aunque podría haber sorpresas).

Por primera vez, Chile enviará al grupo de jóvenes más numeroso de América Latina, casi unos 5 mil. Para el 21 de junio, ya se habían inscrito más de 4 mil jóvenes de Canadá. En la clausura del encuentro, Juan Pablo II debería revelar cuál será la sede de la Jornada Mundial de los Jóvenes del año 2002 y Toronto se encuentra entre las ciudades favoritas.

Otra de las significativas presencias será la representación de 700 muchachos sirios y de 300 de Costa de Marfil. Según denuncia la agencia vaticana «Fides», los jóvenes de China continental están experimentando problemas para poder salir del País para ir a Roma con motivo de su cita con el Papa. Muchos de ellos todavía no han recibido la autorización necesaria por parte de las autoridades. En estos momentos resulta muy difícil saber cuántos podrán participar.

Los jóvenes peregrinos contarán con la ayuda de sus «ángeles custodios», unos 25 mil voluntarios de 48 países, que distribuirán las comidas, estarán disponibles para ofrecer información, responderán a las mil y una exigencias típicas de todo gran acontecimiento de masas.

Del 10 al 14 de agosto, los jóvenes que lleguen con antelación serán acogidos por las diócesis de Italia para descubrir las riquezas de arte y de acogida de este país y de su Iglesia. El 14 de agosto, tendrá lugar la acogida e instalación de peregrinos en Roma. El 15 de agosto por la tarde, el Papa dará la bienvenida a los jóvenes en la plaza de San Pedro del Vaticano. Del 16 al 18 tendrá lugar el Foro mundial de los jóvenes: momentos de encuentro de los chicos y chicas con líderes y testigos de la Iglesia en el mundo. En la noche habrá espectáculos, conciertos, vigilias de oración y reconciliación... El sábado, 19, en la mañana, los grupos se dirigirán a Tor Vergata, la explanada situada en las afueras de Roma, donde se tendrá el encuentro (la plaza de San Pedro del Vaticano no podría acoger a todos). Tras la comida, comenzará la fiesta en espera de la vigilia. Cuando el sol comience a ponerse, Juan Pablo II presidirá el encuentro vespertino arrojando su mirada sobre los dos mil años de la fe cristiana. Casi todos los jóvenes pasarán la noche en la explanada --muy pocos dormirán-- para esperar, en la mañana del domingo, la misa final que será celebrada por el Papa.