16 de julio
Beata Magdalena Albrizzi
virgen
Pertenecía a la nobleza de Italia. Después de la muerte de sus padres, Magdalena
decidió retirarse al convento de Santa Margarita de Como, donde se recibía a las
hijas de los nobles.
Estando en la puerta del convento, Magdalena escuchó una voz que le repitió tres
veces: "Magdalena, dirígete a Brunate, ahí es donde debes retirarte." Entonces,
la beata se dirigió sin vacilar al claustro en las montañas de Brunate. El
convento estaba casi vacío; pero el número de religiosas aumentó
considerablemente después del ingreso de Magdalena, quien fue elegida superiora
y afilió el convento a la Orden de las Ermitañas de San Agustín. Magdalena fundó
otro convento en la ciudad de Como, pero ella permaneció en Brunate.
La beata curaba a los enfermos y tenía cualidades de visionaria. Su confianza en
Dios era tan grande que el Señor obró muchos milagros por su intercesión.
Magdalena exhortaba a sus religiosas a la comunión frecuente. Según parece murió
el 15 de mayo de 1465, a edad muy avanzada, después de una larga y dolorosa
enfermedad.