18 DE MAYO

 

-San Próspero de Aquitania, gran escritor eclesiástico y enemigo acérrimo del arrianismo, que aparece siempre con el arma de la pluma en la mano. Aquitano de nacimiento, no se conocen datos de su juventud. Ya aparece como sacerdote leyendo a San Agustín para defender sus doctrinas en la contienda con los pelagianos y semipelagianos, hacia 415. Hilario, el piadoso lego aquitano, y Rufino le honraron con su amistad; el papa San Celestino le encomendó delicadas legacías, y León I le hizo su secretario en 440. Se cree que asistió al Concilio de Calcedonia. Murió obispo de Reggio, en el ducado de Módena. Son suyas muchas Cartas a San Agustín y a San Hilario contra los pelagianos; Una carta a Rufino, el Poema contra los ingratos, Epigramas, el libro sobre la Gracia de Dios y el libre albedrío, contra Collatorem; Un comentario de los Salmos, Las sentencias y una crónica desde la creación del mundo hasta el. 455.

- Santa María Josefa Sancho Guerra

-San Venancio, mártir de Camerino (Italia), 302.

-San Dióscoro, mártir (Egipto).

-Sam Félix, mártir, Espoleto (Italia).

-San Potamión, obispo y mártir., Egipto, s. IV.

-San Teódoto el tabernero, uno de los mártires más gloriosos del tiempo de Diocleciano. Natural de Ancira (Galacia), se dedicó primero a asistir a los confesores de la fe, llevándoles alimentos y recogiendo sus cuerpos después de muertos. Sostuvo especialmente en las luchas a sus compañeros mártires Tecusa, Alejandra, Claudia, Faina, Eufrasia, Matrona y Julita, que fueron expuestas a toda clase de ultrajes y llevadas al templo de Diana y Minerva como sacerdotisas, y que después de mil tentativas fueron inmoladas por la fe. Teódoto recogió sus cadáveres, y, sorprendido por los paganos, fue también martirizado, 304.

-San Erico, rey de Suecia, martirizado por los daneses en 1151.

-San Leonardo Murialdo

-San Félix de Cantalicio (1513-87), capuchino. Pastor y criado en su juventud, esos oficios humildes le sirvieron de ensayo para la vida de humildad y penitencia que como capuchino había de practicar en Ascoli, y, durante veintidós años en Roma, como mendicante de su Orden. Allí se hizo gran amigo de San Felipe Neri, llegando a ser uno de los personajes más populares y admirados en la Ciudad Eterna. Canonizóle Benedicto XIII, en 1724.

-Beato Guillermo de Tolosa, ermitaño de San Agustín (1369).

-Beato Juan Gelabert, compañero de apostolado de San Vicente Ferrer.

-San Merolino, sacerdote escocés, que fue martirizado par los ladrones yendo en peregrinación a Roma.

-San Arsenio el joven, monje de San Basilio (Regio).

-Santa Rafaela María del Sagrado Corazón († 1925)