28 DE JULIO

 

-Santa Catalina Thomas († 1574)

-San Melchor García Sampedro, mártir, dominico.

-San Víctor, papa. Africano de nacimiento, sucedió a San Eleuterio en 185. Mostró grandísimo celo para defender a la Iglesia contra los ataques de los herejes. Condenó a Teodoto, el banquero, que enseñaba que Melquisedec era superior a Jesucristo; a Montano y sus secuaces: a Praxeas, que dogmatizaba en Roma enseñando que el Dios Padre también había padecido en la pasión de Jesucristo; a Taciano, Marción, Valentín y Saturnino, propagadores de las doctrinas encratitas, que condenaban como ilícito el matrimonio. Luchó, en fin, para sofocar la cuestión tan debatida de la celebración de la Pascua, Roma, 197.

-Santos Nazario y Celso, mártires, Milán, s. I.

-Muchos mártires que padecieron en la Tebaida de Egipto en el imperio de Decio y Valeriano.

-San Eustacio, obispo y mártir de Ancira, Angora de Turquía.

-San Acacio, mártir, Mileto (Asia Menor), s. IV.

-San Sansón, obispo de Dola, en Bretaña (Francia), 565. Etimológicamente significa “ sol”. Viene de la lengua hebrea. Sansón nació en Deyfed, Francia, hacia el año 490, y murió en Dol en el 565. Todos consideran a este monje como el sucesor del anciano abad san Itud, muerto en el 515. Pero el sobrino de Itud ganó la plaza. Era enfermero y se aprovechó de una indisposición de Sansón para prepararle una mala tisana. El enfermo se tomó el potingue y el enfermero pensó que se iría al otro mundo. Pronto, sin embargo, se restableció. "Gracias, hermano, decía, que Dios te haya dado el remedio para que me hubieras curado también el alma". El aspirante a sucesor se convirtió. Fue la primera conversión que hizo Sansón entre otras muchas. Se marchó a predicar el Evangelio a Irlanda. De allí pasó a Cornualles y a Inglaterra. Juswall, soberano de este reino, le ayudó a él y a los misioneros con todo su poder. Por aquel tiempo entró un tipejo especial que le arrebató el reino. Sansón se fue entonces a París para obtener de Gilberto I que arreglase sus cuentas con el bandido o ladrón. Sansón terminó su vida apostólica convirtiendo a los Bretones.

-San Peregrino, confesor, Lyón, s. III.