20 DE ABRIL

 

-Santos Sulpicio y Serviliano, mártires., Roma, s. I.

-Santos Víctor, Zótico, Zenón, Acindino, Cesáreo, Severiano, Crisóforo, Teonas y Antoninio, ms.. 303.

-San Teótimo, obispo de Tomis. Escitia, s. V.

-San Marcelino, obispo de Embrún, Francia.

-San Marciano, sacerdote, Auxerre, Francia, s. V.

-San Teodoro, llamado Triquinas por el áspero cilicio que vestía de continuo, Constantinopla, s. IV.

-Santa Inés de Monte Pulciano, Italia, 1317.

-San Hardouino, monje de Fontanella, Francia, 811.

-Beato Domingo Veragale, Pisa.

-Santo Domingo de Leonisa, Urbino, Italia, 1497.

-Beata Oda de Thorebaix, Bélgica, 1220.

-Santa Hildegunda, virgen, de la Orden del Cister, 1188, Schoenan, diócesis de Worms. Su vida es más admirable que imitable. Nacida en Neuss, cerca de Colonia, fue llevada en peregrinación a Jerusalén por su padre; pero habiendo muerto éste, tuvo que disfrazarse de hombre, tomando el nombre de José. El criado que la acompañaba huyó llevándose cuanto tenía. Continuó su ruta conducida por un ángel que el Cielo la envió. Llegó con su disfraz hasta Roma, y volviendo a Alemania, pidió el hábito en el monasterio de monjes cistercienses de Schoenan. Fue horriblemente atormentada, hasta el extremo de estar a punto de marcharse varias veces. Murió el año mismo de su noviciado.

-San Lutardo, ob. de Paderborn, 886.

-San Alberto, niño de cuatro años "cuyos ojos sonreían siempre, y siempre decían buenos días'", que fue asesinado, como tantos otros, por los judíos, Polonia, 1598.