ODÓN DE CLUNY, SAN


Segundo abad de Cluny (s. IX-X).
      N. en 878-879, de noble estirpe, en la región del Maine (Francia), y fue educado en la corte de Guillermo de Aquitania. A los 19 años, abandonando la brillante carrera de las armas, entró, como canónigo, al servicio de la iglesia de S. Martín de Tours. Una prolongada estancia en París le permitió completar su formación literaria y ampliar sus conocimientos de las artes liberales, bajo el magisterio de Remigio de Auxerre. Vuelto a Tours, se hizo monje benedictino en el monasterio de Baume-Ies- Messieurs (Jura), regido entonces por el abad Bernón, que poco después lo sería también de Cluny (910). En la escuela de este austero y santo reformador aprendió el recién llegado los principios y la práctica de la vida monástica. Antes de su muerte (927), Bernón designó al aventajado discípulo como sucesor suyo en tres de los siete monasterios sometidos a su autoridad. Renuncian- do a los otros dos, Déols y Massay, O. retuvo Únicamente a Cluny y fijó en él su residencia. El celo y las acertadas disposiciones del nuevo abad convirtieron pronto al hasta entonces desconocido monasterio borgoñón en un modelo de vida religiosa y un poderoso centro de irradiación espiritual. Pese a ocupar cronológicamente el segundo puesto en la lista de sus prelados, 0. fue en realidad el verdadero fundador de Cluny y el artífice de su futura grandeza. Desde esta época sus abades se cuentan entre los personajes más influyentes de la Europa cristiana medieval. En 931, 0. obtuvo del papa Juan XI un privilegio que eximía a Cluny de las autoridades eclesiásticas y laicales, y lo declaraba inmediata- mente sujeto a la Santa Sede. Al mismo tiempo el Papa confirmaba su misión de reformador monástico, concediéndole permiso para incorporar al suyo otros monasterios y recibir a los monjes que desearan abrazar la observancia cluniacense. Con ello quedaban sentadas las bases de la que con el tiempo sería la congregación de Cluny, vasta confederación de monasterios, organizados. a la manera feudal, llamada a prestar inmensos servicios a la cristiandad, y en especial a la gran obra de la reforma eclesiástica, durante los s. XI y XII. Los intentos encaminados a introducir las costumbres cluniacenses tropezaron en algunos monasterios franceses e italianos con graves dificultades, pero la firmeza y la prudencia de 0. triunfaron, en la mayoría de los casos, de todas las resistencias. A semejante éxito contribuyó no poco su amistad con los papas y príncipes, de quienes fue consejero. Esta favorable posición le permitió asimismo desplegar una importante labor pacificadora. Cuando regresaba de una de estas misiones de paz, que le había conducido hasta la Ciudad Eterna, le sorprendió la muerte en Tours, el año 942 (948 según otros), siendo sepultado en el monasterio de S. Julián de la misma ciudad. Venerado en Cluny casi inmediatamente después de su muerte, su santidad fue reconocida en un sínodo romano presidido por S. Gregorio VII. Sus reliquias fueron trasladadas, durante las guerras de religión, de Tours a Isle-Jourdain (Gers), donde se conservan en la actualidad. Se celebra su fiesta el 19 de noviembre (la orden benedictina el 29 de abril, juntamente con la de los otros santos abades de Cluny, Máyolo, Odilón y Hugo).
      La herencia literaria de 0., bastante considerable, comprende un compendio de los Moralia in Iob de S. Gregorio Magno, unas Colationes o conferencias, en tres libros, un vasto poema de inspiración bíblica, titulado Occupatio, varios Sermones y las vidas de S. Geraldo conde de Aurillac, fundador del monasterio del mismo nombre, y de s. Martín de Tours. Es además autor de diversas piezas litúrgicas, himnos y antífonas, y se le atribuyen algunos tratados musicales, de los, cuales únicamente un Tonale per ordinem parece auténtico.
     
     

BIBL. : Fuentes: PL 133,106-858; de la Occupatio hay una ed. crítica de A. SWOBODA, Biblioteca Teubneriana, Leipzig 1900; existen dos biografías antiguas de S. ODÓN, escritas por un discípulo suyo, JUAN DE SALERNO (PL 133,43-85) y por el monje NALGOD (s. XII), PL 133,85-104. Estudios: E. SACKUR, Die Cluniacenser, I, Hallen 1892, 36- 120; 11,1894,330-335; A. DU BOURG, St. Odon (Colección Les Saints), París 1905; L. KOLNER, Odo, der erste Cluniacenser Magister, Daggendorf 1913; E. AMMANN, DTC XI, 937-939; A. RAMÓN ARRUFAT, La orden benedictina, Montserrat 1927, 115-130; Fliche-Martin, V 11,320-324; J. PÉREZ DE URBEL, Historia de la orden benedictina, Madrid 1941, 182-193; PM, SCHMITZ, Histoire de I'ordre de Saint Benoit, I, Maredsous 1948, 137- 158; R. GARCÍA VILLOSLADA, Historia de la 19lesia, 11, Madrid 1953, 288-299; L. SERDÁ, Año cristiano, IV, Madrid 1959, 410- 414; R. OURSEL, Les saints abbés de Cluny, Namur 1960.

 

L. SERDÁ PRAT.

Cortesía de Editorial Rialp. Gran Enciclopedia Rialp, 1991