HOYOS, BERNARDO FRANCISCO DE
Escritor místico del s. XVIII. N. el 21 ag. 1711 en Torrelobatón (Valladolid); a
los 15 años entró en el noviciado de los jesuitas de Villagarcía. Cursó la
filosofía en Medina del Campo, y en el Colegio de S. Ambrosio, en Valladolid, la
Teología; era tan joven, que necesitó dispensa de edad para ordenarse, unos
meses antes de su muerte; caso singular en la Compañía, lo cual indica el
aprecio que hacían los superiores de las gracias extraordinarias de Dios en
aquel religioso. Mientras hacía la tercera población, como última etapa de
preparación para un apostolado que se prometía fecundísimo, murió en Valladolid
a los 24 años, el 29 nov. 1735. Su fama de santidad le mereció muy pronto el
título de venerable. El proceso de beatificación comenzó en 1895; aprobados sus
escritos en 1902, está en Roma el proceso desde 1920.
B. de H. tiene un influjo muy grande en la espiritualidad española, sin
haber ejercitado ningún apostolado y ningún magisterio espiritual directo. Sólo
por las revelaciones que recibió del Sagrado Corazón de Jesús y por el fervor y
celo apostólico que supo contagiar a los que estuvieron en contacto con él.
Parece que desde el noviciado tuvo dones místicos. Sobresalió siempre entre sus
compañeros por su pureza de vida y gran fervor. Sus directores espirituales al
reconocer aquellos dones, quedaron subyugados ante la potencia espiritual de
aquella alma y vinieron a ser sus dirigidos, ejecutores del mensaje que él
recibiera del cielo.
Fue durante los años de Teología, especialmente en 1732, cuando recibió
más frecuentes e importantes comunicaciones celestiales, mediante visiones y
locuciones, en orden al establecimiento y difusión de la devoción al Corazón de
Jesús en España. El Señor quería servirse de él y de la Compañía para este fin;
y B. de H., a pesar de ser un estudiante, supo cumplir los designios de
Jesucristo. Entre otras cosas Jesús le manifestó que «quería por su medio
extender el culto de su Corazón sacrosanto»; que «uno de sus sucesores
establecería en todo el mundo la fiesta que le pedía». Y pidiendo él a la
Santísima Trinidad esta fiesta en particular para España, se le reveló: «Reinaré
en España, y con más veneración que en otras partes».
La devoción al Corazón de Jesús. Estas revelaciones tienen bastante
semejanza con las de S. Margarita Ma de Alacoque (v.). Jesús le manifiesta su
deseo de ver difundida esta devoción por España, en buena parte por el
apostolado de la Compañía. B. de H. consigue que los dos misioneros jesuitas más
insignes de entonces, Cardaveraz y Calatayud, se comprometan a difundirla entre
el pueblo. Logra también que el director espiritual y primer biógrafo suyo, Juan
de Loyola, escriba para el clero y la gente más culta El tesoro escondido en el
Sacratísimo Corazón de jesús (Valladolid 1734), que en cuatro años alcanza ocho
ediciones; mientras, el P. Calatayud publica Incendios del amor sagrado, Murcia
1733. Personalmente obtiene que, con anuencia del obispo de Valladolid, se
celebre en el teologado de S. Ambrosio la primera novena solemne al Sagrado
Corazón, difunde millares de estampas con su imagen, y contagia de su fervor a
compañeros de estudio y a los penitentes que dirigió en sus pocos meses de vida
sacerdotal.
Así, un simple estudiante, distinguido con gracias extraordinarias, fue el
propulsor dinámico y eficaz de una devoción que ha sido y sigue siendo fuente de
espiritualidad y renovación moral en España.
V. t.: JESUCRISTO III.
BIBL.:1. E. DE URIARTE, S. I., Vida del P. B. F. de Hoyos, Valladolid 1888; C. ABAD, S. I., El primer apóstol del Corazón de Jesús en España, Valladolid 1933; 1. COUDERC, Le vénérable P. B. de H. prémier Apótre du S. Coeur en Espagne, Tournai 1907; G. GONZÁLEZ PINTADO, Vida del P. Cardaveraz, San Sebastián 1947; E. REY, Un extenso autógrafo del ven. P. B. de H., Comillas 1948.
M. ZALBA ERRO.
Cortesía de Editorial Rialp. Gran Enciclopedia Rialp, 1991