HOMILIA DEL XVI DOMINGO ORDINARIO.- CICLO C

"MARTA Y MARÍA LA CONTEMPLACIÓN EN LA ACCIÓN"

1.- INTRODUCCIÓN

Este Evangelio es un ejemplo más de que Cristo fue el primero que liberó a la mujer de la postergación en que se encontraba sumida en todo el mundo, incluso en las Religiones. Es la religión de Israel en tiempo de Cristo, los doctores maestros de la Ley no podían enseñarla a las mujeres.

Aquí vemos que María se sentó a los pies de Cristo como hacían los discípulos para escuchar a su maestro.

En el Evangelio de la conversión de la pecadora, Jesús nos presentó a una mujer como modelo de arrepentimiento.

Aquí nos presenta a otra mujer como modelo de contemplación.

En el mensaje de este evangelio se encuentra en las frases que Cristo dijo a Marta:

1º.- "Marta, Marta andas inquieta y nerviosa con tantas cosas"

Marta simboliza a aquel trabajo agobiante que no nos permite que tengamos tiempo para escuchar la palabra de Jesús y meditarla y, por tanto, en este caso la acción no se basaría en la palabra de Jesús.

2º.- Una sola cosa es necesaria

Solamente hay una cosa de la que no se puede prescindir, escuchar la palabra del Mensajero de Dios sobre el Reino.

Los trabajos por importantes que sean no deben impedir el poder atender a la doctrina del Reino.

Es lo mismo que dijo Jesús con otras expresiones:

"Buscad el Reino de Dios y su justicia y todo lo demás se os dará por añadidura" (Mat 6, 33)

3º.- María ha elegido la mejor parte: escuchar la palabra de Cristo

El que María se sentase rápidamente a los pies de Jesús como una discípula manifiesta el ansia que tenía de aprender el mensaje de Cristo.

2.- MARÍA DE BETANIA MODELO DE CONTEMPLACIÓN

El espíritu que vive en María de amor a Cristo, la actitud que encarna, sentada a los pies del Maestro y las palabras con las que Jesús aprueba su acción se convierten en modelo de actitud cristiana de contemplación.

"María escogió la mejor parte y esta nadie se la quitará"

¿Quién la podrá apartar de la fe en la venida del Reinado del amor de Dios en Cristo? Ni la vida, ni la muerte, nada, ni nadie podrá apartarnos del amor de Dios en Cristo

3.- DOS EQUIVOCADAS INTERPRETACIONES DE ESTE EVANGELIO

1ª) Es considerar este episodio como una recomendación de la vida contemplativa (propia de los monjes) en cuanto superior a la vida activa.

Eso es introducir un enfoque alegórico que carece de fundamento (en el texto), en el relato.

La segunda falsa interpretación es oponer entre sí la acción y la contemplación, simbolizadas por Marta y María respectivamente.

Esto no es exacto. Marta simboliza no la acción en general, sino la acción agobiante que no nos permite tener tiempo para escuchar la palabra de Dios.

 

La verdadera interpretación es:

El mensaje del texto va especialmente dirigido a la existencia del cristiano, que se define como contemplativo (a) en la acción.

Esto significa:

    1. En la existencia cristiana no han de separarse la acción y la contemplación.

    2. La contemplación culmen de la vida interior debe dar sentido a la vida exterior.

4.- EXPLICACIÓN DEL MENSAJE FUNDAMENTAL

4.1 La existencia del hombre se desarrolla en dos planos exterior e interior.

En el plano exterior se pronuncian las palabras y se realizan las acciones.

En el plano interior toman cuerpo los pensamientos, se forman las intenciones y se toman las decisiones del corazón.

Estos dos ámbitos se pertenecen mutuamente y constituyen el único mundo de la existencia.

Ambos son importantes pero el más importante es el interior pues de él procede en último término lo que acontece en la existencia exterior.

Motivos y efectos pertenecen al mundo exterior pero las decisiones vienen de dentro. Por eso en la vida humana en general lo interior tiene preeminencia sobre lo exterior ya aquí se ve la impronta de lo único necesario que es lo primero que ha de estar claro.

Si las raíces enferman, el árbol puede continuar vivo durante algún tiempo, pero terminará muriendo.

4.2 Esto es así también y más aún en la existencia del cristiano en la vida de la fe

También aquí hay acción externa: Se habla, se escucha, se trabaja, surgen iniciativas, se realizan obras, se crean organizaciones, pero el sentido último de todo ello, está en el interior.

Las dos cosas han de darse ciertamente, una vida privada de la tensión de lo interior hacia lo exterior se atrofiaría. Si se arrancan las hojas de un árbol, sus raíces no impedirán que se asfixie. Si se destruyen flores y frutos las raíces son estériles.

Ambas cosas pertenecen a la vida pero la primacía lo tiene lo interior.

Esto no siempre se entiende de por sí.

No obstante las palabras de Jesús:"María ha escogido la mejor parte" siguen siendo válidas, esas palabras se fundamentan en la propia vida de Jesús, tres años –según algunos apenas dos- actuó públicamente.

Pero durante los treinta años anteriores guardó silencio e incluso una buena parte de aquel corto periodo de actividad la dedicó a la vida interior.

Antes de los acontecimientos importantes se va a un lugar solitario o a un monte donde él ora y madura las decisiones (Mc 1, 35; 6, 46).

Por eso la acción externa de Jesús está inserta en su interior silencioso.

Esto establece una ley que rige en toda vida de fe, cuanto más se trabaja más necesario es recordarlo.

Llegará la hora del juicio y se producirá la gran transformación, la intención será más importante que la acción, pero esto no es todo, lo de dentro y lo de fuera será entonces una misma cosa.

Lo exterior será real en la medida que sea justificado por dentro y lo que no esté también dentro se desmoronará.

En la nueva y eterna creación solo entrará lo que esté arraigado por dentro y sea verdadero.

5.- APLICACIÓN A NUESTRA VIDA

Debemos imitar a María de Betania en su ansia de conocer la llegada del Reino del amor de Dios en Cristo, ojala podamos decir en verdad como el salmista:

"Como la cierva sedienta busca corrientes de agua, así mi alma te busca a ti Dios mío, tiene sed de Dios, del Dios vivo".

Pero María tuvo ante sí a Cristo visiblemente presente y recibió directamente de él la irradiación del amor de Dios.

Nosotros en cambio, para captar el misterio del amor de Dios en Cristo tenemos que meditar todos los días al menos durante un cuarto de hora sobre los misterios de la vida de Cristo.

La meditación consta de tres partes:

  1. Consiste en ponerse en presencia de Dios y hacerse consciente de la asistencia de su Espíritu. Recogimiento y concentración en el misterio sobre el que se va a meditar e invocar la ayuda de la Virgen y San José, y el santo de nuestra devoción San Juan de la Cruz o Santa Teresa de Jesús.

  2. Consta de cuatro actos:

    1. La consideración sobre el misterio que tratemos en ese día.

    2. Afectos.

    3. Peticiones.

    4. Propósitos para nuestra vida.

c) Concluir dando gracias a Dios y pidiendo la gracia para cumplir nuestros propósitos

La oración mental es como un diálogo personal, íntimo y profundo entre yo y Dios.
"Es tratar de amistad con Aquel que sabemos nos ama" (Santa Teresa).

La oración expresa la comunión del hombre redimido con la vida íntima de las tres personas trinitarias.

Esta comunión se funda en el Bautismo y en la Eucaristía donde Dios por su Espíritu crea la interioridad cristiana, o vida interior.

Con la meditación se desarrolla esta interioridad:

Dios va purificando los sentidos y las potencias del alma y va iluminándola y enamorándola, uniéndola a sí cada vez más por el amor.

Si se es fiel a ella llega un momento en que Dios da una superior toma de conciencia de la actividad de la gracia que es la contemplación pura, esto es, libre de imágenes y reflexión, es una noticia amorosa que se engarza con la actividad de los dones superiores del Espíritu, fruto superior pero normal de la gracia del bautismo con el cual ella es dada en germen.

Por ejemplo: Santa Teresa, al principio, hacía oración mental sobre el Padre nuestro reflexionando sobre su significado, pero llegó un momento que al decir ¡Padre! Recibía una luz tan grande sobre ese misterio que se quedaba absorta en él durante largo tiempo.

El dinamismo de la vida interior implica una proyección apostólica y el dinamismo del apostolado exige la vida interior.

Hoy nos dice el Señor:
Estoy a tu puerta llamando, si me abres tu corazón por medio de la oración mental entraré, moraré en ti y te iré llenando de mi amor para que lo hagas efectivo a los hermanos.