Fideísmo
En oposición a la tendencia racionalista del siglo anterior, el abate Bautain, profesor de Estrasburgo y más tarde en París, defendió la incapacidad de la razón de llegar a las verdades religiosas, las cuales no pueden conocerse si no es exclusivamente por la tradición. Fue condenado el año 1831; en el Concilio Vaticano de 1870 fueron denunciados los peligros del fideísmo.
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escuela filosófica surgida como
una reacción al racionalismo imperante en el siglo XVIII, la que tuvo en el
abate francés, Bautain, uno de sus principales promotores, junto a Grahy (1872),
Bonald (1840) y al tradicionalista Lamennais (1854). Las ideas del fideísmo se
concentraron en considerar la imposibilidad de la razón humana de alcanzar la
Verdad, por sí sola. Así, la existencia de Dios no puede ser conocida por la
razón natural, sino sólo por la Fe, atento que todo nuestro conocimiento
proviene de los sentidos, de la experiencia y en consecuencia, todo lo que lo
sobrepasa, resulta incognosible e indemostrable para la razón. De esta suerte,
los fideístas afirmaban que toda construcción filosófica debía necesariamente
recurrir a la Fe, so pena, de no se alcanzar nunca certidumbre alguna sobre
materias propias de la Revelación Divina. Encontrándose muy extendidas estas
ideas, fueron condenadas por los papas Gregorio XVI (1830-1846), Pio IX a través
de la encíclica ‘Qui Pluribus’ (1846), para finalmente ser denunciados sus
peligros por los padres participantes en el Concilio Vaticano I (1869-1870).