Cuaresma, cambiar el corazón
para vivir el Proyecto de Dios

por Marcelo A. Murúa

"Rasga tu corazón y no tus vestidos, y vuelve a Yavé tu Dios, porque él es bondadoso y compasivo…"

Joel 2, 13

 

La cuaresma se inició con esta hermosa lectura del libro del profeta Joel, en la liturgia del Miércoles de Cenizas (texto completo Joel, 2, 12-18)

El Dios de la Vida, que como nos recuerda Joel retomando las palabras del Exodo (ver Ex. 34, 6 en el cual Dios pronuncia su Nombre ante Moisés, y su nombre es Misericordia), es rico en misericordia y lleno de compasión por nosotros, nos convoca a un cambio de corazón.

El corazón, en la biblia, es el órgano más importante. Donde se aloja el espíritu que anima a cada persona. Del corazón brotan las actitudes, los sentimientos, los valores que mueven la vidad de cada uno. Por eso Dios quiere que examinemos nuestro corazón y dejemos que su Espíritu lo llene, para poder vivir como El enseña, para poder realizar su Proyecto.

Son repetidas las veces en que los profetas llaman a un cambio de corazón. Ezequiel lo dirá con palabras tajantes, que permiten descubrir el esfuerzo y la ruptura interior que significa esta conversión que Dios pide a sus seguidores.

"Les quitaré del cuerpo el corazón de piedra y les pondré un corazón de carne. Infundiré mi Espíritu en ustedes para que vivan según mis mandatos…"

Ezequiel 36, 26-27

 

El cambio de corazón expresa la conversión a la que Dios nos invita. Dejar que El sea quien nos mueva… quien oriente y anime nuestras actitudes, sentimientos, valores, opciones…

Cuaresma es el tiempo propicio para hacer una revisión de vida y, a la luz de la Palabra, disponernos al cambio interior que exprese en obras concretas la conducta que Dios propone como "regla de vida".

En la primera semana del tiempo de Cuaresma la liturgia nos propone releer al profeta Isaías, para escuchar de boca de Dios, cuál es el verdadero cambio que El nos pide.

El ayuno que agrada a Dios es la misericordia con el hermano que sufre, que nace de la compasión que brote (o no) en nuestro corazón ante las situaciones de injusticia y muerte temprana en que viven los que nos rodean.

¿Nos animaremos a vivir la Cuaresma desde las exigencias de Dios?


Para ayudar el proceso de discernimiento