Carne Numerosas investigaciones han puesto de manifiesto que el consumo
de carne es un importante factor de riesgo para la mayor parte de los
tipos de cáncer (de cerebro, de pulmón, de estómago, de riñón, de
vejiga urinaria, de útero, de ovario y de próstata, entre otros). Resultan particularmente favorecedoras del cáncer:
Leche El consumo habitual de leche, especialmente si es completa (no
desnatada), se asocia, según diversas investigaciones, con la aparición
de algunos tipos de cáncer: de mama, pulmón, colon, ovario, próstata
y vejiga urinaria. Una de las posibles explicaciones para ello es que la leche pueda transmitir el virus de la leucemia bovina, que es cancerígeno. Bebidas alcohólicas Todas ellas son favorecedoras del cáncer, incluso aquellas a las que se atribuyen propiedades medicinales, como el vino o la cerveza. Y no sólo inducen el cáncer cuando se ingieren dosis elevadas, sino también cuando se hace un consumo moderado de ellas. Una sola copa de vino al día aumenta en un 250% el riesgo de padecer cáncer de mama en las mujeres. Está demostrada la relación entre el consumo de bebidas alcohólicas
en general y los cánceres de boca, laringe, esófago, mama, pulmón,
hígado, páncreas, colon y vejiga urinaria. Sin embargo, en muchas revistas se publica que un poco de cerveza y
de vino ayuda a proteger nuestra salud contra el cáncer. Según las investigaciones, un consumo importante de huevos (en general, más de tres por semana) se relaciona con los cánceres de mama, estómago, pulmón, endometrio y ovario. Factores que explican dicha relación:
Marisco Suele estar contaminado por los productos químicos vertidos al mar, los cuales son cancerígenos.
Pescado Las pruebas estadísticas y experimentales de que el pescado pueda
favorecer el cáncer son menos numerosas e importantes que las de la
carne. Sin embargo, se ha encontrado relación entre el consumo
habitual de pescado (especialmente salado o curado) y los cánceres de
laringe, nasofaringe, endometrio y páncreas. Dos factores al menos, pueden explicar la relación entre el
pescado y el cáncer:
Especias Una alimentación rica en especias picantes puede ser un factor de riesgo para ciertos tipos de cáncer, como el de boca y el de esófago. Según algunos estudios, el pimiento picante (chile) puede ser cancerígeno, aunque según otros, protege del cáncer. Café Su consumo se relaciona con el cáncer de vejiga urinaria y con la
enfermedad fibroquística de la mama, que puede ser precancerosa. Este efecto del café no se debe a la cafeína sino a algunos componentes de la esencia del café. Por eso el consumo de café descafeinado también aumenta el riesgo de padecer cáncer de vejiga urinaria. Productos refinados Cuando el pan blanco, la bollería y los productos de repostería
refinados desplazan a los cereales integrales de la dieta, se
favorecen diversos tipos de cáncer. Al menos estas tres características
de su composición, explican su asociación con el cáncer:
Azúcar El consumo abundante de azúcar blanco (sacarosa) se relaciona, en
diversos estudios epidemiológicos, con el cáncer de colon, de estómago
y de cuello uterino. La fructosa, aunque presenta algunos inconvenientes cuando se consume en exceso, protege contra el cáncer de próstata. |