Torre de Babel

La "Torre de Babel" es el nombre de la construcción mencionada en Génesis 11; 1-9.

 

Historia de la Torre

 

Los descendientes de Noé habían migrado del "este" (Armenia) primero hacia el sur, a lo largo del Tigris y luego hacia el oeste a través del Tigris hacia "una vega en el país de Senaar". A medida que crecían en número se vieron forzados a vivir a mayor y mayor distancia de sus hogares patriarcales, "dijeron: Ea, vamos a edificarnos una ciudad y una torre con la cúspide en los cielos, y hagámonos famosos, por si nos desperdigamos por toda la faz de la tierra". El trabajo comenzó pronto, "y así el ladrillo les servía de piedra y el betún de argamasa". Mas Dios confundió su lenguaje, de tal manera que no entendía cada cual el de su prójimo y desde aquel punto se desperdigaron por la tierra y dejaron de edificar la ciudad.

 

Este es el relato Bíblico de la Torre de Babel. Hasta ahora no se ha descubierto ningún documento babilonio que se refiera claramente a este tema. Autoridades tales como George Smith, Chad Boscawen y Sayce creen haber descubierto una referencia a la Torre de Babel, pero Frd. Delitzch señala que la traducción de la palabras que determinan el significado del texto es por demás incierta. (Smith-Delitzch "Chaldaise Genesis", 1876, 120-124; Anmerk., p. 310).

 

Oppert halla una alusión a la Torre de Babel en un texto de Nabuconodosor, pero en su opinión es poco más que una teoría (cf. "The Cuneiform Inscriptions of Western Asia", I, pl. 38, col. 2, línea 62; pl. 41, col. 1, I. 27, col. 2, 1. 15; Nikel, "Genesis und Keilschriftforschung", 188 sqq.; Bezold, "Ninive und Babylon", 128; Jeremias, "Das alte Testament im Lichte des alten Orients", 2da ed., Leipzig, 1906, 286; Kaulen, "Assyrien und Babylonien", 89).

 

Una referencia más probable a la Torre de Babel la encontramos en la "Historia" de Berosus tal como la hallamos en la dos variantes de Abydenus y Alexander Polyhistor respectivamente ("Histor. Graec. Fragm.", ed. Didot, II, 512; IV, 282; Euseb., "Chron.", I, 18, en P.G., XIX, 123; "Praep. Evang.", IX, 14, en P.G., XXI, 705). Se le da una gran importancia a esta referencia, ya que se supone que provienen de fuentes babilonias.

 

Localización de la Torre de Babel

 

Tanto el escritor sacro del Génesis como Berosus sitúan a la Torre de Babel en algún lugar de Babilonia. Hay tres opiniones principales sobre la posición precisa de la ciudad.

 

(1) Pietro della Valle ("Viaggi descritti", Roma, 1650) sitúa a la torre en el norte de la ciudad, en la margen izquierda del Éufrates, en donde se encuentran las ruinas llamadas Babil. Schrader tiende a ser de la misma opinión en la obra de Riehm "Handworterbuch des biblischen Altertums" (I, 138), mientras que en "The Cuneiform Inscriptions" (I, 108) deja a la elección del lector decidir entre Babil y el templo de Borsippa. La posición de Babil dentro de los límites de la antigua Babilonia concuerda con donde el relato Bíblico sitúa a la torre; el mismísimo nombre Babil puede tomarse como una reliquia tradicional del nombre Babel interpretado por el escritor sacro como una referencia a la confusión de las lenguas.

 

(2) Rawlinson (Smith-Sayce, "Chaldean account of the Genesis", 1880, pp. 74, 171) sitúa a la torre en la ruinas de Tell-Amram, a las que Oppert considera los remanentes de los jardines colgantes. Estas ruina se encuentran en la misma margen del Éufrates que las de Babil y también se hallan dentro de los antiguos límites de la ciudad. Las excavaciones de la alemana Orientgesellschaft han descubierto en este lugar el antiguo santuario nacional de Esaglia, consagrado a Marduk-Bel, con el testimonio documentario que el techo de la construcción decía llegar al cielo. Esto concuerda con la descripción de la Torre de Babel como se halla en Génesis 11: 4 "con la cúspide en los cielos". A este lugar también pertenece la torre Etemenanki o casa del cimiento del Cielo y la tierra, la cual se compone de seis gigantescos escalones.

 

(3) Sayce (Lectures on the Religion of the Ancient Babylonians, p. 112-3, 405-7), Oppert ("Expédition en Mésopotamie", I, 200-16; "Études assyriennes", pp. 91-132) y otros son de la común opinión que identifica a la Torre de Babel con las ruinas de Birs-Nimrud en Borsippa, en la margen derecha del Éufrates, más o menos a 10 u 11 kilómetros de las ruinas de la ciudad propiamente dicha. Éstas son las ruinas del templo de Ezida, consagrado a Nebo, el que de acuerdo con la antes citada inscripción de Nabuconodosor, fue reparado por ese rey, ya que no se había completado por algún gobernante de antaño. Estos datos son muy vagos para ser la base de un argumento apodíctico. El Talmud babilonio (Buxtorf, "Lexicon talmudicum", col. 313) conecta a Borsippa con la confusión de lenguas, mas un gran tiempo había pasado desde la composición de Génesis 11 y el tiempo de Talmud babilonio. Además, el relato Bíblico parece indicar que la torre estaba dentro de los límites de la ciudad, mientras que es poco probable que lo límites llegaran a Borsippa en tiempos muy antiguos. El carácter histórico de la torre no se ve manchado por nuestra inhabilidad para señalar su posición con certeza.

 

Forma de la Torre de Babel

 

La forma de la torre debe ser similar a las construcciones que aún existen en estado ruinoso en Babilonia; la pirámides más antiguas de Egipto presenta vestigios de la misma forma. Bloques de mampostería cúbica, de tamaño decreciente, son apilados uno sobre otro. Las torres de Ur y Arach tenían sólo dos o tres pisos, pero la de Birs-Nimrud tenía siete sin contar la alta plataforma en la que la estructura había sido erigida. Cada piso estaba pintado de un color particular de acuerdo al planeta al que estaban dedicados. Las esquinas de estas torres generalmente apuntaban a los puntos cardinales, mientras que en Egipto lo hacían los lados. Encima de esta construcciones había un santuario, de tal manera que servían de templos y observatorios. El interior se revestía con barro secado al sol, mientras que las paredes exteriores se revestían con ladrillos cocidos a fuego. El peculiar asfalto de la vecindad babilonia servía de argamasa; detalles todos en concordancia con el relato del Génesis. Aunque algunos escritores aseguran que toda ciudad babilonia tenía una de estas torres o zigurat (que significa "puntiagudo" según Schrader, "puesto en alto" según Haupt, "memorial" según Vigouroux), no se ha preservado ningún espécimen completo. La Torre de Khorsabad es tal vez la mejor preservada, pero aún en este construcción la escultura asiria suplementa nuestro conocimiento. La única indicación de la época en la que la Torre de Babel fue construida la encontramos en el nombre de Péleg (Génesis 11: 10-17), el sobrino nieto de Héber; esto lo sitúa entre 101 y 870 años antes del Diluvio. Lo límites son tan insatisfactorios porque la Versión Griega difiere del texto Masorético.

 

Además de los trabajos que se indican en el artículo, véanse RAWLINSON, The Five Great Monarchies, II (Londres, 1862-7, 1878), 534-5; SCHRADER-WHITEHOUSE, The Cuneiform Inscriptions and the Old Testament, I (Londres, 1885-8), 106-14; HOBERG, Genesis, 2da ed. (Friburgo, 1899), 129. Para una mirada crítica, ver SKINNER, Genesis (Nueva York, 1910, 228 sqq).

 

A.J. MAAS

Transcrito por Thomas M. Barrett
Dedicado a aquéllos que estudian lingüística e idiomas antiguos.
Traducido por Rodrigo de Piérola C.
Dedicado a San José, custodio de la Sagrada Familia.