Oriente Medio

a) Geografía de Oriente Medio
b) Política de Oriente Medio
c) Religión de Oriente Medio
d) Conflictos naturales de Oriente Medio
e) Conflictos políticos de Oriente Medio
f) Problemas actuales de Oriente Medio

Arabia Saudí, Bahréin, Emiratos Arabes Unidos, Irak, Irán, Israel, Cisjordania y la Franja de Gaza[1], Jordania, Kuwait, Líbano, Omán, Qatar, Siria, Yemen, Pakistán, Afganistán, Egipto[2], Libia y Sudán… se incluyen en la expresión Oriente Próximo, a pesar de que geográficamente pertenecen a Africa.

Tres grandes placas tectónicas convergen en Oriente Medio: la placa africana, la placa euroasiática y la placa arábiga. La placa arábiga se está moviendo hacia el norte, en dirección a la placa anatólica (Turquía) y a la falla anatólica oriental.

Oriente Medio tiene principalmente áreas de relieve bajo, aunque algunas zonas de Turquía, Irán y Yemen son muy montañosas. La Anatolia se encuentra entre dos cadenas montañosas: Pontus y Taurus. El monte Ararat, en Turquía, tiene una altura de 5.165 m, y el más alto en la región, monte Damavand, en las Montañas Elburz de Irán, tiene una altura de 5.610 m. Los Montes Zagros se encuentran en Irán, en el área de su frontera con Irak. En varias regiones de Yemen las elevaciones sobrepasan los 3.700 m, y las tierras elevadas se extienden a lo largo del Mar Rojo hacia el Líbano. El centro de Irán se divide en dos cuencas con ocasionales lagos de sal. Al norte Dahst-e-Kavir (Gran desierto de Sal) y al sur Dahst-e-Lut.

Además, hay una falla geológica a lo largo del Mar Rojo, con zonas rift que crean depresiones estructurales con áreas por debajo del nivel del mar. El Mar Muerto, localizado en el límite entre Cisjordania, Israel y Jordania, está a 418 m. bajo el nivel del mar, lo cual lo convierte en el punto más bajo de la superficie terrestre.

Se trata, en líneas generales, de un clima árido y mediterráneo. No obstante, Oriente Próximo es una zona de gran diversidad geográfica.

Turquía, Siria y Líbano poseen un clima, hidrografía y vegetación típicamente mediterráneos. Israel y Egipto poseen un clima mediterráneo, que pasa a ser desértico según va continentalizándose. Arabia Saudí se caracteriza por la sequedad y el carácter estepario y desértico de sus tierras.

En Oriente Medio, la relación entre superficie y densidad de población no tiene por qué ser estrecha. Tenemos el ejemplo de Arabia Saudí, que a pesar de tener un territorio muy amplio la densidad es muy baja (9 hab/km²) debido a los grandes espacios desérticos que tiene el país sin habitar. Este mismo ejemplo lo sigue Libia que a pesar de tener mucha superficie la densidad es de sólo 2 hab/km². En cambio regiones mucho más pequeñas como Bahrein vemos que tienen la densidad de población más grande. Podemos poner también el ejemplo de Paquistán, que aunque es el país con más población, no es el que tiene más densidad por km².

Una de las preocupaciones de los políticos israelíes es la llamada bomba demográfica. Si sigue la tendencia, pronto los palestinos sobrepasarán a los israelíes. Los ciudadanos árabes están considerados cada vez más como enemigos que como ciudadanos con iguales derechos”, señala el informe anual de la Asociación por los Derechos Civiles en Israel (ACRI, en sus siglas inglesas). Según esta organización, los ataques racistas contra ciudadanos árabes-israelíes se dispararon un 26% en 2006. Según un sondeo reciente difundido por la televisión del Parlamento de Israel, el 76% de los israelíes de religión judía apoya la idea de transferir a los palestinos que viven en el país a un futuro estado palestino, una opción rechazada de plano por los árabes-israelíes.

En Oriente Medio existen todo tipo de regímenes políticos, destacando los casos generales de:

-Monarquías absolutas. Forma de gobierno en la que el monarca ostenta el poder absoluto.

-Monarquías constitucionales. La monarquía constitucional es una forma de gobierno en la que el poder real está limitado por otras instituciones, en particular por un parlamento. Las normas fundamentales del sistema político están definidas en la constitución, escrita o consuetudinaria.

-Repúblicas. Básicamente es la forma de estado en que el pueblo ostenta la soberanía y este delega el poder de gobierno en sus representantes electos. En dicho estado la jefatura del mismo es ejercida por un presidente o similar y no por un monarca

-Federaciones. Estado conformado por la reunión de varias entidades territoriales. También suele denominarse estado federal o república federal y, generalmente, tiene un sistema político republicano y excepcionalmente monárquico.

-Regímenes militares. Con dos cámaras legislativas (Senado y Asamblea Nacional). El jefe del estado y del gobierno es el presidente asistido por el Primer Ministro.

-Gobiernos provisionales de coalición. Donde el jefe del estado es el presidente, y el del gobierno el primer ministro. Fue establecida como gobierno transitorio tras la invasión de Irak por parte de los EE.UU, Reino Unido y otros miembros de la coalición multinacional creada para deponer el gobierno de Saddam Hussein en 2003. Citando la resolución 1483-2003 de la ONU y las Leyes de la Guerra, la CPA se invistió a sí misma con autoridad ejecutiva, legislativa y judicial por encima del gobierno iraquí desde su nacimiento en 2003 hasta su disolución en 2004.

-Estados socialistas con comités legislativos. Donde el jefe del estado es el secretario del congreso general del pueblo y el jefe del gobierno es el secretario del comité general del pueblo (primer ministro).

-Gobiernos de transición. Donde el presidente es tanto el jefe del gobierno como del estado.

-Emiratos. Territorio administrado por el emir, que es un cargo político equivalente a príncipe, caudillo o jefe.

-Irán: República,
-Paquistán: Régimen militar,
-Siria: República,
-Irak: Gobierno provisional de coalición,
-Kuwait: Monarquía constitucional,
-Bahréin: Monarquía,
-Líbano: República,
-Jordania: Monarquía constitucional,
-Israel: República,
-Libia: Estado socialista con comité legislativo,
-Afganistán: Gobierno de transición,
-Qatar: Emirato,
-Sudán: República,
-Egipto: República.

La economía de Siria tiene su principal sector económico en el mundo agrícola. A pesar de la amplia zona desértica, la superficie cultivada supone un 33% del total. Posee escasa riqueza petrolífera. Casi la mitad de su energía proviene de represas y el resto es de origen térmico.

La economía de Líbano no mantiene un nivel muy alto por falta de materias primas y escasez de recursos energéticos (que condicionan una pobre industria). Sin embargo, se trata de un país financiero y de tradición comercial. Son importantes su turismo y la banca.

La economía de Isarel es próspera, a pesar de la escasez de materias primas y de agua, y de las desfavorables condiciones del medio natural. Las grandes inversiones del capitalismo internacional judío han ayudado a convertir en un vergel lo que antes era sólo un desierto. Ho día mantiene una desmesurada deforestación de las zonas montañosas.

La economía de Jordania está saliendo en los últimos años de una débil agricultura, arcaica y minifundista, y agravada por el problema de los refugiados palestinos. Esto se debe a una industria que está empezando a emerger, y al crecimiento del turismo. Son importantes sus yacimientos de fosfatos, sales y petróleo, así como su energía (de origen térmico).

La economía de Arabia Saudí se reduce a la explotación de sus zonas de oasis, y su agricultura está mediatizada por sus condiciones climáticas y morfológicas. Se trata de una economía ligada al mar (pesca y comercio), aunque su motor más importante lo constituye el petróleo y gas natural. Su subsuelo proporciona caliza, yeso, mármol, oro, hierro y plata. Sus industrias más importantes son la petroquímica, química y siderúrgica.

La economía de Irak mantiene en la extracción de hidrocarburos su mayor riqueza, aunque la principal actividad de la población es la agricultura. Ocupa el quinto lugar entre los países de Oriente Próximo productores de petróleo, aunque esta riqueza se está viendo destrozada tras la Guerra irano-iraquí, Guerras del Golfo, embargos de la ONU...

La economía de Egipto pivota en torno a la agricultura. En 1975 encontró gas natural y petróleo en su suelo. El turismo es también una de sus grandes fuentes de ingresos.

La ANP, o Autoridad Nacional Palestina de Cisjordania y Franja de Gaza, es una organización administrativa autónoma que gobierna transitoriamente desde 1994 en partes de Cisjordania y la Franja de Gaza.

La ANP fue establecida en 1994, conforme a los Acuerdos de Oslo entre la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) y el Gobierno de Israel, como una entidad transitoria durante un periodo de 5 años tras el cual tendrían lugar las negociaciones finales entre las dos partes. Con base en estos acuerdos, la ANP fue designada para controlar tanto la seguridad como la administración civil en las áreas urbanas palestinas (Area A), y sólo control civil sobre las áreas rurales palestinas (Area B). Los territorios restantes, incluyendo los asentamientos israelíes, la región del valle del Jordán, y las conexiones por carretera entre comunidades palestinas, permanecen bajo control exclusivo israelí (Area C).

La ONU cataloga a la ANP dentro de las “entidades y organizaciones intergubernamentales que han recibido invitación permanente para participar en calidad de observadores en los períodos de sesiones, y en los trabajos de la Asamblea General, manteniendo oficinas permanentes en la sede de la ONU”. El status de observador en la ONU da derecho a voz pero no a voto.

Los estados están compuestos por territorio y nación. La nación palestina existe, pero le falta a la ANP tener un territorio demarcado oficialmente y reconocido internacionalmente por la comunidad de naciones.

La principal tarea que se le atribuye a la ANP es la de conseguir el reconocimiento internacional de un territorio perfectamente delimitado.

La mayoría de los islámicos prefieren que les llamen sólo eso, islámicos. Sin embargo hay una serie de diferencias entre ellos que pueden causar confusión a los que los vemos desde fuera. Para los musulmanes hay un solo Dios que es Alá, todos reconocen el Corán como su texto sagrado que sigue las enseñanzas de Mahoma, que habrá un fin del mundo, un juicio final y una resurrección.

Sin embargo podemos encontrar una serie de ramas dentro de la religión musulmana como son los suníes: muerto el profeta Mahoma en el 632, sus seguidores comenzaron a cuestionar cuál sería su sucesor.

Alí, primo y yerno de Mahoma, además de padre de sus nietos, reclamó sus derechos sucesorios y fue elegido cuarto califa, aunque no por unanimidad y se encontró con una oposición virulenta encabezada por Muawiya miembro del clan omeya y gobernador de Siria. Esta oposición derivó en la Batalla de Siffin-661, donde Alí fue derrotado, quedando a Muawiya como nuevo califa.

Este conflicto dio origen a los dos grupos más importantes dentro del Islam: los sunníes (o sunitas) y los chiíes (o chiitas). El tercer grupo en importancia es de los jariyis (o carajís).

Los suníes, que representan el 90% de todos los musulmanes, consideran que la sucesión de Mahoma corresponde a un árabe miembro de la tribu de Quraish, de la que procedía Mahoma. Los sunníes reciben su nombre debido a la importancia que dan a la Sunna, colección de dichos y hechos atribuidos a Mahoma y transmitidos en forma oral. O sea que no sólo se basan en el Corán sino también en la Sunna, lo cual permite adaptar el Corán a las exigencias de la época.

En cambio los chiíes, que suponen el 10% de los musulmanes, consideran que Alí fue el iniciador de la línea sucesoria de Mahoma. Los chiíes veneran a la familia de Mahoma como sagrada y siguen las enseñanzas del Ayatolá en cómo cumplir las reglas del Islam.

Los ibadíes sólo se encuentran en Omán, y no dejan de ser una rama más de cuando se disoció el Islam.

Es la principal ciudad de la región del Hiyaz, en la actual Arabia Saudí. Ciudad natal de Mahoma, es la más importante de todas las ciudades santas del Islam, visitada cada año por millones de peregrinos. Antes de que Mahoma predicara el Islam, ésta era ya para los paganos una ciudad santa, con varios lugares de importancia religiosa, entre ellos el más importante de todos: la Kaaba.

Para los musulmanes, el peregrinaje a La Meca forma parte de uno de los aspectos fundamentales de su fe, de los denominados pilares del Islam. Cada año, cerca de 3 millones de peregrinos se dirigen a la ciudad santa para realizar el Hajj-peregrinación mayor durante el mes musulmán de dul-hiyya. Muchos más hacen la Umrah-peregrinación menor, que puede realizarse durante todo el año.

-Kaaba: la “casa de Dios”, antiguo edificio de piedra cubierto de una tela negra bordada en oro hacia el cual todos los musulmanes oran 5 veces al día. Todos los peregrinos están obligados a caminar a la izquierda alrededor de la Kaaba 7 veces y tienen que intentar tocar la esquina de la Piedra Negra, en el ritual llamado Tawaf.

-Mina y Monte Arafat: Durante la peregrinación mayor, los peregrinos viajan hacia Mina, un pequeño pueblo en que el diablo está representado por un muro de 26 m. (y los peregrinos lo apedrean simbólicamente, en lo que se denomina la “lapidación del diablo”). Hasta el 2004 el diablo estaba representado por 3 columnas, pero el gobierno saudí lo sustituyó por el citado muro. Después de Mina, los peregrinos se dirigen al Monte Arafat, de 70 m. de altura y lugar destinado a la oración, pues se cree que fue allí donde el profeta Mahoma pronunció su discurso final.

En Próximo Oriente se suele encuadrar a todos sus ciudadanos en la misma religión, pero en la región también se encuentran otros grupos de minorías creyentes: católicos (23.4% en Líbano), ortodoxos (11.2% en Líbano y 10% en Egipto), drusos (7% en Líbano ), hinduistas (7.4% en Omán) y protestantes (1% en Egipto).

El descubrimiento de yacimientos petrolíferos al final del s. XIX pasó casi desapercibido, aunque durante las dos guerras mundiales estas reservas fueron muy utilizadas por los británicos. Este recurso, que se encontró en grandes cantidades en todo Oriente Próximo durante las siguientes décadas, iría adquiriendo una gran importancia, no sólo para los países de la región, sino también para las naciones industrializadas de Occidente que buscaron extender su dominio en la zona.

La riqueza derivada del petróleo que hay en sus yacimientos ha permitido convertir algunos territorios en oasis y desarrollar grandes complejos industriales. No obstante, la organización social, el bajo nivel cultural de la sociedad y la inversión en conflictos bélicos están ralentizando su desarrollo.

Aparte de los motivos políticos, y de derecho internacional, que Occidente esgrime para mediar en los conflictos de Oriente Próximo (por ejemplo en la invasión de Kuwait por parte de Irak), el petróleo es sin duda un importante motivo de carácter económico para mantener el control del petróleo en la región.

No obstante, el manejo del petróleo también es la causa de diferencias entre chiítas musulmanes, kurdos, árabes sunitas, laicos nacionalistas y cristianos.

Un ejemplo lo tenemos en los motivos históricos que llevaron a Irak a la Invasión de Kuwait-1990. Es verdad que existieron causas económicas, pues Irak se encontraba en una grave situación por la deuda contraída durante la guerra con Irán. Pero en una reunión de la OPEP las diferencias se acentuaron a la hora de fijar el precio del barril de petróleo. Además Irak reclamaba a Kuwait el pago de una compensación por el petróleo, que según Bagdad, el emirato había sustraído de su territorio durante la guerra con Irán.

Históricamente, el agua ha sido una constante fuente de conflicto en la zona. La Guerra de los Seis Días-1967 comenzó cuando Siria quiso desviar el río Hasbaya, e Israel construyó un nuevo acueducto para llevar agua del Jordán al desierto del Neguev. Y en 2001, los trabajos en el Líbano para modificar el cauce de Hasbani dieron lugar a un nuevo foco de tensión en la zona.

“Al enemigo ni agua”. La escasez de recursos ha llevado a Israel a seguir este dicho al pie de la letra y racionar el preciado líquido, vendiéndolo a los palestinos a precios desorbitados. Los expertos estiman que en Israel el consumo de agua anual por habitante es de 600 m³, un 40% menos del nivel considerado óptimo. Según la Oficina Estadística Palestina, esta cantidad es casi 8 veces superior a la consumida por los palestinos. Por ello, para satisfacer las necesidades agrícolas, económicas y las demandas de la población, necesitan controlar las fuentes de abastecimiento: el río Jordán y los acuíferos subterráneos de Gaza y Cisjordania. Esta es una de las principales razones para no devolver a los palestinos los territorios ocupados.

Antes de la desconexión llevada a cabo por Sharon en 2005, los asentamientos israelíes en la Franja de Gaza y Cisjordania (con origen en la Guerra de los Seis Días) eran más de 140. Unos 200.000 colonos judíos entre más de 3 millones de palestinos. Aunque oficialmente ocupaban el 1,8% de estos territorios, los límites reales de las colonias se extendían hasta el 6,8% del terreno.

A pesar de que gran parte de la comunidad internacional siempre ha considerado ilegales estos enclaves, los distintos gobiernos israelíes han defendido a ultranza su permanencia, alegando que esto respondía a su afán por garantizar la seguridad del estado de Israel (aunque el control de los recursos acuíferos que existen en el subsuelo es la causa principal). Los enfrentamientos en estos territorios son una constante desde hace décadas: los grupos terroristas palestinos dirigen sus atentados contra los habitantes judíos, quienes son abastecidos con armas por el gobierno israelí.

La Tierra prometida no encuentra la paz. Judíos y árabes arrastran ya 60 años de conflicto desde la proclamación del estado de Israel en 1948. Durante más de medio siglo, la política israelí de mano dura y el azote del terrorismo palestino han convertido el día a día de Oriente Próximo en la crónica de una contienda perpetua.

La I Guerra árabe-israelí-1948, provocó un éxodo masivo de palestinos. Se luchó en todo el territorio contra los palestinos y sus aliados árabes. En 1949 Egipto y otros países firman un acuerdo de paz con Israel, que no contemplaba las fronteras internacionales, sino sólo las líneas de demarcación de los frentes militares dejando provisionalmente al estado de Israel con una extensión mayor de lo prevista por la ONU.

Desde 1956 Israel vive una fase de normalización: baja la inmigración, la economía se organiza, se expande y se caracteriza por una alta tasa de crecimiento, se incrementan las relaciones internacionales con EE.UU y la estabilización de la situación política en el mundo árabe, con la hegemonía de Egipto desde 1958, apaciguan el conflicto. Pero en 1962 las relaciones de Israel con el mundo árabe se deterioran y provocan la Guerra de los Seis Días-1967: Israel atacó Egipto, Siria y Jordania y conquistó los Altos del Golán, la península del Sinaí, Gaza, Cisjordania y parte de Jerusalén.

En 1964 nace en Jerusalén la OLP, Organización para la Liberación de Palestina que, reconocida por la ONU, supondrá una profunda modificación de las bases del conflicto.

Durante las décadas de 1970-80 continúan las guerras entre Israel y Egipto, Siria y Líbano por los Altos del Golán y la península del Sinaí, finalmente devuelta a Egipto.

En 1988 Israel asesina al número dos de la OLP en Túnez y nace el Estado Nacional Palestino, presidido por Yasser Arafat.

En 1991, con la Conferencia de Paz de Madrid-1991 (en la que participaron Israel, Palestina, Siria, Jordania y Líbano) empiezan los gestos de paz, hasta que en 1995 Rabin es asesinado por un judío ultra-ortodoxo. Rabin había reconocido a la OLP, otorgando cierta autonomía a Gaza y Cisjordania a cambio de la renuncia a sus pretensiones territoriales.

Con Netanyahu continúan los acuerdos y retira sus tropas del sur de Líbano, pero el fracaso de la cumbre convocada por Bill Clinton en el año 2000 para negociar la soberanía de Jerusalén y se desató la II Intifada árabe-israelí-2000.

En 2001 Sharon es elegido primer ministro de Israel, entierra los acuerdos con Arafat y se niega a desmantelar las colonias judías. Un año más tarde, la ONU apoya la creación del estado palestino y Sharon continúa con sus agresiones. Construye un muro de separación entre Israel y Cisjordania declarado ilegal por el Tribunal de La Haya.

En 2003 se presenta una Hoja de Ruta para impulsar el plan de paz, que fija la creación de un estado palestino para finales de 2005. Israel apoya la construcción de un estado palestino y prometen desmantelar los asentamientos ilegales. Pero Hamas rompe la tregua con 3 atentados suicidas.

En 2005 Sharon y Mazen (sucesor de Arafat en la presidencia palestina) anunciaron un alto el fuego y se comprometieron al cumplimiento de la Hoja de Ruta. Sin embargo, no puso fin al terrorismo ni a las incursiones israelíes. Israel evacúa 21 colonias de Gaza y 4 de Cisjordania, y puso fin a 38 años de ocupación.

En 2006 Hamas (considerado una organización terrorista por EE.UU y Europa), gana las elecciones y se niega a reconocer al estado de Israel. La comunidad internacional impuso un bloqueo económico, cuyas consecuencias pagaron los ciudadanos.

En 2007 Mazen ilegaliza Hamas y crea un ejecutivo de emergencia. Estalla una guerra civil y se forman dos gobiernos paralelos que controlan las dos provincias palestinas: el de Al Fatah (el oficial, en Cisjordania) y el de Hamas (el extraóficial, en Gaza).

Hoy, siguen los enfrentamientos. La escasez de tierras, la discontinuidad territorial, la dispersión de población, el status de Jerusalén y la ausencia de plenas competencias son algunos de los factores que continúan retrasando la proclamación de un estado palestino.

Fue el enfrentamiento entre los palestinos y los miembros de las falanges libanesas, que acusan a los anteriores de no respetar la soberanía del estado. Siria interviene como mediador con 3 objetivos:

-mantener Líbano en su órbita de influencia,
-controlar a los palestinos,
-evitar la división del país.

En 1978 a esta guerra se suma el conflicto con Israel en lo que se llamó la Operación Litani. La OLP mantenía por entonces una estructura casi estatal en el sur de Líbano, que comparte frontera con Israel, desde donde se infiltraban en Israel para cometer actos terroristas. Tras un atentado palestino cerca de Tel Aviv, el ejército israelí invade masivamente el sur de Líbano creando un cinturón de seguridad. El Consejo de la ONU ordena su retirada y envía a los cascos azules FINUL.

El país queda dividido: el sur controlado por Israel, el río Litani controlado por la FINUL y el resto ocupado por Siria.

En 1982, como respuesta al intento de asesinato del embajador israelí en Reino Unido, Israel invade el sur del Líbano con el objetivo de expulsar a la OLP del país. La Operación Paz en Galilea no encontró oposición por parte de la FINUL y ocupó Beirut. En 1983 por mediación del rey saudí se firma el Tratado libanés-israelí que pone fin a la guerra entre los dos estados. El tratado es condenado por la OLP, Siria y progresistas palestinos.

Yasser Arafat abandona definitivamente Líbano. En 1985 el presidente libanés anula el tratado con Israel (que todavía mantiene su presencia en el sur) y reanuda las negociaciones a favor de la reconciliación nacional. El final definitivo de las tensiones llega en 1990.

En el 2000, y ante el rápido avance de Hizbulá, el ejército israelí se retiró de los territorios ocupados en el sur de Líbano. La tensión entre los dos países se recrudeció por la decisión de los libaneses de hacerse con parte del caudal del agua de uno de los afluentes del río Jordán. Israel calificó de intolerable la postura y amenazó con el uso de la fuerza para evitarlo. Desde entonces, el clima de tensión y desencuentro ha sido constante en la zona. Tanto Israel como Líbano contribuyen a alimentarlo con ocasionales escarceos en territorio enemigo y veladas amenazas contra la integridad del país contendiente.

Aunque existen causas políticas, puesto que la revolución de Irán despierta a las fuerzas políticas de oposición en Irak y desde Teherán se hace un llamamiento a la población chiíta de Irak para sublevarse contra el régimen enemigo del Islam, la guerra que enfrentó a Irán contra Irak, tuvo como origen la pretensión por parte de Irak de cambiar las fronteras entre los dos estados, establecidos por el Acuerdo de Argel-1995.

Saddam Hussein pensó que la potencia militar de Irán se había debilitado por la Revolución iraní-1979, y esto le permitiría obtener una victoria fácil.

La guerra comenzó con la Invasión de Irán-1980, atacando la provincia de Juzestán, rica en petróleo. Pero, aunque Irak obtuvo éxitos al principio, Irán reorganizó sus fuerzas, convirtiendo el conflicto en una guerra de desgaste.

Desde 1984 a 1988 iraníes e iraquíes, impotentes para vencer en el campo de batalla, se dedicaron a bombardear las ciudades del adversario (alcanzando a la población civil), y más tarde las instalaciones petroleras (con el objetivo de arruinar las fuentes de recursos). A partir de 1984 el conflicto tomó dimensiones internacionales, en lo que se llamo Guerra de los Petroleros. Los norteamericanos reforzaron su presencia militar en la zona para proteger la navegación pero jugando un papel ambivalente, apoyaban a Irak de cara al exterior, pero no tuvieron inconveniente en proporcionar armas a Irán.

Las mediaciones de la ONU, EE.UU, URSS y los países árabes más influyentes consiguen el alto el fuego en 1988.

Enfrentó a Irak contra una coalición internacional liderada por EE.UU. Se inició con la Invasión de Kuwait-1990 por parte de los iraquíes, que tenían como líder a Saddam Hussein. Irak reclamaba tradicionalmente que Kuwait era una más de las provincias de su territorio, pues ambos habían estado unidos históricamente bajo el gobierno otomano de Basora. Esta reivindicación permaneció en estado latente hasta que la grave situación económica iraquí, tras la guerra con Irán, provocó el deseo de Hussein de aumentar su cuota de producción de crudo y lograr la condonación de su deuda. Para ello necesitaba presionar a Kuwait y al resto de países de la OPEP, con la amenaza de ocupación del emirato. Las tropas de Kuwait fueron derrotadas con facilidad.

Como respuesta a estos sucesos, en 1991 una coalición internacional, bajo mandato de la ONU, inició una campaña militar con el fin de obligar al ejército invasor a replegarse de Kuwait. En dos meses Irak se rindió y aceptó las condiciones impuestas por la ONU.

El castigo al régimen iraquí fue de tipo económico, pues se le impuso un embargo sobre su producción de crudo y fue obligado a aceptar la entrada de observadores de la ONU para supervisar el desarme químico y bacteriológico. En 1994 Hussein tuvo que reconocer a Kuwait.

Consistió en la Invasión de Irak-2003 por parte de EE.UU y sus aliados Reino Unido, Australia, Polonia, España y Dinamarca, bajo pretexto de desarmar al país de armas de destrucción masiva, poner fin al apoyo brindado por Saddam Hussein al terrorismo, y lograr la libertad del pueblo iraquí.

Duró hasta el 2009, en que el presidente de EE.UU ordenó la retirada de las tropas extranjeras del territorio iraquí. Pero tras haber destrozado todo tipo de sociedad iraquí, y dejar acampar en la zona a la inestabilidad.

Dentro de Israel ha nacido el judaísmo, el cristianismo, y desde una de sus colinas Mahoma subió a los cielos. Jerusalén, centro de las tierras más disputadas de la historia, es un objetivo irrenunciable tanto para palestinos como para israelíes. La piedra angular del conflicto de Oriente Próximo se esconde en la Explanada de las Mezquitas, Templo de Al Aqsa y Cúpula de la Roca, a tan sólo unos metros de los judíos Templo de Salomón y Muro de las Lamentaciones.

Es el asunto en el que menos se ha avanzado en las distintas conversaciones de paz:

-los palestinos reivindican la zona oriental de la ciudad y ofrecen a cambio el acceso a los lugares santos judíos que se encuentran en ellas,
-los israelíes pretenden mantener el control sobre la parte este que ocupó durante la Guerra de los Seis Días-1967.

Los Acuerdos de Ginebra plantean una división temporal de la ciudad, que sería reunificada cuando ambas partes estuvieran preparadas para compartir la capitalidad.

En el Islam existen corrientes radicales en las que a menudo argumentos religiosos son utilizados para fundamentar objetivos políticos. Algunos de estos movimientos islamistas están siendo los principales beneficiarios de la apertura de los sistemas políticos. Los gobiernos autocráticos, están siendo sustituidos por fuerzas políticas anti-occidentales.

Por ejemplo. La sustitución del sah Mohammed Reza Pahlevi por Ruhollah Musavi Jomeini, tras la Revolución iraní-1979. El gobierno de Jomeini interrumpió la occidentalización llevada a cabo por el sah y exigió un retorno a los orígenes del Islam, responsabilizando a las potencias coloniales y superpotencias de la debilidad política, económica y cultural del mundo islámico. Su régimen apoyó activamente la actuación de grupos terroristas y la propagación de las creencias radicales fundamentalistas islámicas.

El integrismo defiende que la religión y la política son inseparables. Ellos, como representantes de Dios en la tierra, deciden qué normas políticas y legales son divinas. De esa forma, toda oposición puede ser calificada de no islámica.

Según los integristas, la colonización impuso a los países árabes una cultura que les era extraña (la cultura occidental). Para los integristas, sólo un regreso a las fuentes originales del Islam le puede devolver su poder y brillo de otra era. Los integristas no reflexionan sobre si lo que en el s. VII era necesario y correcto puede ser aplicado al s. XXI, sino que lo llevan consecuentemente a la práctica.

El Corán es la guía en todas las áreas de vida. Para los integristas, la vida se debe basar en un sistema en el que todas las decisiones, tanto políticas como sociales, económicas y legales se orienten por el Corán y la Sharia. No obstante, también elevan postulados que no se apoyan en el ejemplo histórico del Islam, tal como la estricta separación de hombres y mujeres.

El integrismo islámico mantiene una lucha abierta contra Occidente. No hay más que ver los atentados terroristas islámicos:

-contra EEUU, el 11 septiembre 2001,
-contra España, el 11 marzo 2004,
-contra Gran Bretaña, el 7 julio 2005.

Hoy en día existen 3 conflictos internos importantes dentro del Islam:

-los enfrentamientos chiítas-sunitas en Irak, y en menor grado los kurdos, con la idea de crear su propio estado,
-la financiación iraní a Hezbolá, chiítas del sur del Líbano que intentan desestabilizar gobiernos sunitas como el egipcio,
-la división en los territorios palestinos, donde el partido sunita Al Fatah controla Cisjordania, y la organización terrorista pro-iraní Hamas controla Gaza.

Los dos primeros han dejado innumerables víctimas, el tercero podría producir enfrentamiento entre dos estados (Irán-Egipto) y gestarse un conflicto de mayor escala.

La discriminación que sufre la población de origen palestino, un 20% de los ciudadanos, llamados eufemísticamente árabes-israelíes. Después de la Nakba-1948, unos 120.000 palestinos se quedaron en territorio israelí y accedieron a la ciudadanía. Hoy día, un 20% de los israelíes es de origen palestino, pero se enfrentan al nacionalismo de las autoridades de un estado que se define a sí mismo como judío, adoptando a priori una identidad excluyente.

Cada día, la minoría árabe-israelí lucha por lograr un trabajo o construir una casa. Una ley de 2007 les prohíbe comprar tierras, por ejemplo. Otra es la prohibición que rige desde 2003, que impide a los palestinos de Cisjordania reunirse con sus familias dentro de Israel.

Otras minorías con ciudadanía israelí (drusos, beduinos...) también sufren discriminación. Además, la sociedad israelí es muy heterogénea y carece de una identidad común, dados los diferentes orígenes geográficos e idiomas maternos de sus habitantes. Están los askenazíes (provenientes de la Europa del Este), los mizrahi (judíos de países árabes), los judíos rusos (que tienen su propio partido y editan periódicos en su idioma)...

La situación de guerra permanente que ha vivido gran parte del Oriente Próximo en las últimas décadas, ha hecho que parte de la riqueza generada por el petróleo fuera destinada a la adquisición de armamento y a la constante reconstrucción de las zonas afectadas.

La desviación de fondos a estas cuestiones está retrasando el ritmo de crecimiento y desarrollo de la zona.

Además, esta situación está siendo devastadora no sólo para el progreso, sino para la población civil.

Un ejemplo. En los territorios de Gaza y Cisjordania, malviven 3,8 millones de palestinos en una acuciante crisis humanitaria. Además del deterioro económico y alimentario, el llamado muro de seguridad en Cisjordania, ha cortado el acceso de los palestinos al 95% de los recursos hídricos e impide la libre circulación de personas entre ambas zonas, con lo que muchas personas han perdido su trabajo.

Como resultado del bloqueo impuesto por Israel desde 1967 y de las sanciones de la comunidad internacional tras la victoria de Hamas. La economía cayó un 21% en el último trimestre de 2006 y 2/3 de los palestinos viven por debajo del umbral de la pobreza.

Un informe de 2007 del FMI y la FAO alerta de que la creciente pobreza y el desempleo obligan al 84% de los habitantes de Gaza y al 60% de Cisjordania a vivir de la caridad y de que, sin ésta, no podrían alimentarse, ya que durante 2006 muchos palestinos vendieron sus propiedades para comprar comida.

-la población iraquí, que está sufriendo las consecuencias de varios años de guerra,
-las zonas que sufrieron la guerra civil libanesa (el barrio cristiano maronita de Ain Al-Rumaneh y el barrio chií de Shayyah).

Según los datos de la Central General de Trabajadores de Líbano, el 54% de la población libanesa roza el umbral de la pobreza. El poder adquisitivo de los libaneses se redujo el 15% durante el año 2007.

[1] Territorio controlado por la Autoridad Nacional Palestina.

[2] Incluyendo la península del Sinaí.