TEXTOS DE LOS SANTOS PADRES

-En consecuencia, cuando tenéis una reunión, os resulta imposible comer la cena de Señor, pues cada uno se adelanta a comerse su propia cena, y mientras uno pasa hambre, el otro está borracho.

La iglesia no es un museo de oro y plata... no era de plata en la última cena, la mesa aquélla ni el cáliz en que el Señor dio a sus discípulos su propia sangre... ¿Queréis de verdad honrar el Cuerpo de Cristo? No consintáis que esté desnudo. No le honréis aquí con vestidos de seda y fuera le dejéis perecer de fría desnudez.

SAN JUAN CRISOSTOMO


 

-Cuando los ricos no llevan a la misa lo que los pobres necesitan, no celebran el Sacrificio del Señor.

SAN CIPRIANO


 

-El no dar parte de lo que se tiene es ya rapiña. Esto que os digo quizá os parezca extraño. Pero no debéis maravillaros. Hay un testimonio de las Escrituras Divinas que llama rapiña, avaricia y defraudación no sólo al arrebatar lo ajeno, sino también el no dar parte de lo propio a los demás. ¿Qué testimonio es ése? Reprendiendo Dios a los judíos por boca del profeta dice: La tierra ha producido sus frutos y no habéis traído los diezmos; la rapiña del pobre está en vuestras casas. Porque no habéis hecho las ofrendas acostumbradas, habéis arrebatado lo del pobre.

SAN JUAN CRISOSTOMO


 

"No pensemos que basta para nuestra salvación presentar al altar un cáliz de oro y pedrería después de haber despojado a viudas y huérfanos. ¿Queréis de verdad honrar el cuerpo de Cristo? No consintáis que esté desnudo. No le honréis en el templo con vestidos de seda y fuera le dejéis perecer de frío y desnudez.

Porque el mismo que dijo: "Esto es mi cuerpo", dijo también: "Me visteis hambriento y no me disteis de comer"; "cuando no lo hicisteis con uno de esos más pequeños, tampoco conmigo lo hicisteis".

SAN JUAN CRISÓSTOMO


 

-Forzosamente, el principio y raíz de tus riquezas proceden de la injusticia. Porque Dios, al principio, no hizo al uno rico y al otro pobre, sino que dejó a todos la misma tierra. ¿De dónde, pues, siendo la tierra común tienes tú tantas yugadas de tierra y tu vecino ni un palmo de terreno?

SAN JUAN CRISÓSTOMO


 

-Es un homicidio negar a un hombre el salario que le es necesario para su vida.

SAN AMBROSIO


 

-Abrís de par en par las puertas de vuestros graneros, dad salida a vuestras riquezas en todas las direcciones. Dime, ¿qué es lo que te pertenece?, ¿de dónde trajiste nada a la vida?, ¿de quién lo recibiste? Así son los ricos: se apoderan los primeros de lo que es de todos y se lo apropian, sólo porque se han adelantado a los demás... Si cada uno se contentase con lo indispensable para atender a sus necesidades y dejara lo superfluo a los indigentes, no habría ricos ni pobres.

SAN BASILIO


 

-¡Oh cuántas almas asesinadas cuelgan de los collares de las matronas enjoyadas! Si vendieras una sola de tus joyas, distribuyendo su precio entre los pobres, conocerías por las necesidades remediadas cuántos sufrimientos vale tu ornato.

SAN CIRILO DE ALEJANDRIA


 

-Necesita, pues el que quiera vivir con placer, ante todo, una casa lujosa adornada como una novia, de baldosas piedras y oro y convenientemente situada, de acuerdo con los cambios de las estaciones del año... Después de eso es menester también vestidos preciosos, con que se cubran los escaños, los lechos, camas y puertas, pues entre esas gentes se viste y recubre todo, aun las cosas más inanimadas, mientras los pobres van lastimosamente desnudos. Añade los vasos de oro y plata, los graves gastos para comer faisanes y beber vino de Fenicia, que las viñas de Tiro producen abundante y caro para los ricos... Después de eso considera el múltiple cortejo que acompaña a la mesa: los que la ponen, los coperos, los despenseros, los músicos que les preceden, las cantoras, bailarinas, flautistas, bufones, aduladores... Para adquirir todo eso, ¡qué de iniquidades no se cometen con los pobres, a cuántos huérfanos no se abofetea, cuántas viudas no han de llorar largamente.

SAN ASTERIO AMASENO


 

Son todos éstos, testimonios de Padres de la Iglesia anteriores al s.V, testimonios que no hacen sino repetir, con otras palabras y ejemplos, lo que ya nos decía Santiago en su carta (St 1, 26-27).

-Ser cristiano y ver afligido a un hermano, sin llorar con él ni sentirse enfermo con él, es ser cristiano en pintura, es ser peor que las bestias.

SAN VICENTE PAUL


 

-La propiedad privada no constituye para nadie un derecho incondicional y absoluto. No hay ninguna razón para reservarse en uso exclusivo lo que supera la propia necesidad cuando a los demás les falta lo necesario.

PABLO VI


 

-Habrá que llegar más lejos por motivos de caridad y de fraternidad social... para crear un clima colectivo incluso de austeridad en el que se haga posible la ayuda fraterna en favor de aquéllos que sufren más duramente los efectos del paro... No sería cristiano, ni siquiera humano que, en tiempos difíciles de crisis económica y de grave despreocupación, quienes se encuentran libres de tales problemas mantuvieran un ritmo de vida hecho de ostentación, de lujo y de consumismo, que constituiría una ofensa para tantas familias.

JUAN-PABLO-II
(a la Semana Social de Badajoz,
Marzo de 1982)


 

"El pan para mí mismo es una cuestión material; el pan para mi vecino es una cuestión espiritual..."

NICOLÁS BERDIAEFF


 

"Cuando doy de comer a un pobre, me dicen santo; y, cuando pregunto por qué este hombre pasa hambre, me dicen revolucionario...".

HELDER-CAMARA