Personajes de la Pasión
Autor: P. Antonio Rivero, L.C.
La
Pasión de Cristo hay que leerla en directo, en
vivo y como protagonistas. Nadie puede pasar
por esas impresionantes páginas y quedar
igual.
Todos estamos reflejados en alguno o en
algunos de los personajes de la Pasión de
Cristo.
¿Es que acaso no hemos tenido algún gesto
hermoso con nuestro hermano, ese Cristo
viviente, como hizo la Verónica con Cristo?
¿No hemos ayudado nunca a alguien a llevar la
cruz, cualquier cruz, sea física o moral, como
el Cireneo con Jesús?
¿No es verdad que también a veces nos hemos
comportado como Pedro, que le niega, o como
Judas, que lo traiciona villanamente, o como
los demás que lo abandonan? ¿Esos soldados y
esbirros que azotan cruelmente a Jesús no nos
recuerdan que en alguna ocasión hemos sido así
con nuestro prójimo?
Sin duda alguna que muchas veces podemos
compararnos con san Juan evangelista, fieles a
Cristo hasta la cruz. O como María, la tierna
Madre que fue un sostén para su Hijo amado.
Pilato hemos sido tantas veces, al lavarnos
las manos cobardemente y no defender a Cristo
ante los demás. Y también Anás y Caifás,
hombres prepotentes y soberbios, que por
envidia condenan a Cristo. Y nosotros, por
envidia, nos deshicimos de “ese” que nos caía
mal.
En la Pasión de Cristo nos vemos reflejados un
poco todos los hombres de ayer, de hoy y de
siempre. La Pasión la vive Cristo por
nosotros, a causa de nosotros y en lugar de
nosotros.
Ojalá que al repasar estos personajes sintamos
una profunda pena y dolor inmenso, por haber
ofendido a Cristo, y, sobre todo, un deseo
sincero de acercarnos a Cristo, pedirle perdón
y aceptar de nuevo su amistad.
Cristo, perdónanos. Cristo, acéptanos de nuevo
como amigos. Cristo, aquí nos tienes.
Fuente:
Catholic.net
El P. Antonio Rivero es párroco de Santa
María de Betania en Argentina